Boss Bitch |JenLisa|

|3| Juegos.

La alarma de las seis empezó a escucharse por todo el departamento provocando que una Nayeon exhausta gritara y saliera de su cama en busca de tan desesperante sonido.

 
Su búsqueda la llevó hasta la habitación de Lisa.

ー ¡Oye despierta! ¡Es hora de ir a la universidad! ー grito en el oído de la menor. ー ¡Rosé ya se a despertado! Y por favor ¡calla esa cosa algunos aún podemos dormir más! ー salió molesta de la habitación.

ー Loca.

Luego de media hora la pareja de amigas se encontraba lista en el comedor comiendo algo simple.

ー ¿Qué tal tu primera noche? ー los ojos sobre la tasa de café interrogaban a Rosé.

ー Fue increíble, esa cama no la cambiaría nunca. ー respondió llevando el plato vacío a la cocina. ー ¿Vamos?

ー Vamos.

Ambas tomarlo sus respectivas mochilas tomado el elevador hasta el primer piso en donde un puntual y guapo Bang Chan las esperaba en la puerta de un auto.

ー Buenos días señorita Lisa, señorita Rosé. ー saludo con su debida reverencia, ambas fruncieron el sueño.

ー Buenos días a ti también ¿qué sucede? ー pregunto confusa Lisa ante sus pensamientos absurdos.

ー Me pidieron llevarlas hoy a la universidad, tómenlo como una bienvenida. ー el hombre sonrió abriendo la puerta.

ー Que esto no se vuelva costumbre. ー hablo incómoda Rosé al entrar luego de Lisa al coque.

ー Concuerdo contigo.

...

Al llegar a la universidad ambas bajaron con rapidez y salieron corriendo del auto, no querían que nadie las viera, sería demasiado aguantar una prensa universitaria.

Ese día a mala suerte de Rosé, su primera clase no la compartía con Lisa, de echo hasta después de almuerzo la podría ver y eso la preocupaba un tanto.

ー Deberías ponerme un radar, no te preocupes estaré bien. ー bromeó Lisa al entrar en el salón correspondiente.

 
Algunas miradas se posaron sobre ella pero no duraron mucha, a excepción de una en particular la cual llamaba mucho la atención.

ー ¿Qué sucede Sana? ー pregunto Lisa al tomar asiento frente a la Japonesa.

ー Lo siento, no esperaba verte por aquí en un largo tiempo, tu cara parece que volverá a la normalidad en algunos días. ー hablo sonriendo con ternura, el corazón de Lisa revoloteo de alegría. ー ¿Cómo estás?

 
ー Bien, gracias por preocuparte luego de no hacer nada más que ver como esa idiota me golpeaba. ー reprochó Lisa sacando sus cosas.

 
ー Quería ayudarte ¿Qué podría hacer una pequeña y flacucha chica contra ellos? ー Lisa asintió dándole la razón.

 
ー Te perdono, solo por que de alguna manera me caes bien. ー una vez más Sana sonrió.

ー Gracias Lisa.

 
ー ¿Por qué me hablas si le caigo mal a Momo? ー pregunto Lisa viendo fijamente a la más baja, quien pensaba con una adorable expresión la cual Lisa no soporto más.

 
ー Por qué me gustas. ー Lisa frunció el seño sintiendo una alegría en su corazón. Si eso era real, no sería la primera persona que se le declaraba en la vida, pero se sentía como tal, era raro, por supuesto era algo de estar feliz.