Boss Bitch |JenLisa|

|38| Su No Hogar.

Tailandia.

¿Hace cuanto no iba a su país? No recordaba la última vez que había estado allí pero sabía que había sido cuando era niña, sus padres habían viajado por la muerte de su abuelo, padre de su padre, nunca lo conoció y su muerte no era algo que le generará nostalgia, lo mismo sucedía con su abuela y abuelos por parte de mamá, todos eran escorpio escogida por la misma mano, ella era escoria al formar parte de esa familia.

Amaba su nombre y apellido pero sobre todo su apellido era uno que no le gustaría que llevarán sus hijos.

― ¿Cómo se dice “quiero comer” en Tailandés? ― pregunto Jennie.

Durante el tiempo que llevaban en Tailandia sin dejar de sonreír Jennie preguntaba sobre cómo se decía tal cosa en Tailandés.

Aunque Lisa nunca vivió en Tailandia al sus padres ser de dicho país le enseñaron el idioma y por maestros también sabía como debía escribirlo, sus padres no eran muy buenos maestros.

― ¿Cómo se pregunta el precio de algo? ― Lisa rio enseñándole la manera en cómo debía preguntar. ― Eres tan buena con el Tailandés ¿de verdad nunca viviste antes aquí? ― Lisa asintió divertida. ― ¿Ósea que es la primera vez que vienes con uso de razón? ― una vez más asintió. ― Wa.

― ¿Te parece increíble? ― Jennie asintió.

― ¿Naciste en Corea? ― Lisa asintió.

― Toda mi vida la viví en Corea, pero mi registro sucedió aquí cuando el padre de mi padre murió. ― explicó. ― Realmente no conozco nada sobre la cultura Tailandés.

― Entonces ¿qué deberíamos hacer? Llegamos ayer y no hemos hecho más que perdernos en las calles.

Cuando salieron del hotel habían tenido que llamar a sus guarda espaldas para volver, habían terminado al otro lado de la ciudad mientras caminaban y aunque Lisa supiera el idioma no entendía las indicaciones de las personas.

― Podríamos investigar sobre lugares para visitar que sean lindos y famosos. ― opino Lisa empezando a buscar en su celular.

― Me parece una buena idea.

― Oh. ― hablo un hombre que se detuvo frente a ellas, ambas se miraron confundidas. ― ¿Ustedes son celebridades? No son de por aquí ¿verdad? ― Jennie miro a Lisa pidiendo traducción.

― Pregunto si eras celebridades y que si no éramos de aquí. ― explico a la mayor.

― Dile que se pierda, estamos ocupadas. ― Lisa asintió.

― Piérdase estamos ocupadas. ― el viejo frunció el ceño y luego rio confundiendo a la pareja. ― Lo siento pero tenemos prisa. ― dijo nuevamente, él hombre más detuvo una vez más.

― Puedo llevarlas a dar un tour por la ciudad, la conozco como la palma de mi mano, tengo un auto cómodo y no cobraré mucho. ― propuso con una sonrisa amable, Lisa le explico a Jennie la situación.

― Ash esta bien. ― dijo resignada. ― Pero no confío en este hombre así que pediré que nos digan. ― susurro cerca a Lisa, la menor asintió.

― Por favor enseñemos la ciudad. ― el hombre asintió empezando a caminar.

― Síganme por favor. ― Lisa miró preocupada a Jennie, no le agradaba mucho la idea de ir en un auto con un total desconocido en un país desconocido ¿y si vendían sus órganos al mercado negro? ― Aquí lo tienen, no encontrarán mejor auto en los alrededores. ― presumido el mayor entrando al auto viejo con pintura gastada.