Capítulo 13

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Mi primera noche en el reino de Arbenya fue algo fría, pues cuando la noche llegaba al reino las temperaturas bajaban mucho, de seguro que a menos 20 grados o más.. La cama de la habitación en la que me estaba quedando era bastante grande, tenía muchas sábanas de pelo y muchas mantas encima para que no pasara frío.

Me quisieron invitar a la cena familiar pero me negué, eché la excusa de que estaba bastante cansada y que necesitaba descansar. Kaito me había advertido de que tuviera cuidado, por nada del mundo debía de mantener una conexión con la gente de este mundo.

Cuando eran las 22:30 una de las palomas de Kaito se posó en el balcón, como todavía estaba despierta me acerqué al balcón y me quedé viéndola. Tenía algo en su pata, me acerqué a ella y la tomé entre mis manos, le quité aquello y saqué de un pequeño tubo un papel.

"¿Como estas Tn? Por aquí hay bastante jaleo, le expliqué a todos que fue lo que pasó así que todos están manteniendo en silencio tu estadía en Arbenya para poder protegerte.. Me temo que deberás quedarte allí una semana más. Prometo que todo se solucionará. Me he echo pasar por el mensajero de Alan para decirle que tardará una semana más en volver, diles tú que iréis una semana después."

Tn: Bien.. - Cogí un papel que había en el escritorio que había allí y le escribí un mensaje a Kaito - Confío en ti Kaito Kid, bueno.. Mejor dicho Kaito Kuroba. - dije mientras sonreía. Después de escribir el mensaje lo enrollé y lo metí en aquél tubo, se lo volví a poner a la paloma y me acerqué con ella al balcón. - Ve con Kaito - dije mientras la soltaba. Cuando la vi marchar oí la puerta de mi habitación abrirse.

Alan: Tn.. ¿Estás despierta?

Tn: Oh, Alan.. ¿Pasa algo? - dije extrañada.

Alan: ¿Qué haces en el balcón? Esta noche hará mucho frío - dijo mientras se acercaba a mi.

Tn: Si.. Solo me he quedado viendo algo..

Alan: ¿El qué?

Tn: Nada.. - dije sonriendo. - ¿A que has venido, por cierto?

Alan: Ah.. Solo quería darte las buenas noches y también vine a asegurarme de que no tengas hambre. - dijo mientras desviaba la mirada.

Tn: No te preocupes tanto por mi Alan, estoy bien.

Alan: Aún así pedí que te trajeran algo caliente.

Tn: Pero..

Alan: Al menos una sopa - dijo mientras dejaba pasar a la sirvienta con la sopa.

Tn: Esta bien.. - La sirvienta dejó la sopa en una mesa y se fue. Seguido Alan se iba a ir por la puerta pero antes de irse me miró unos segundos.. - ¿Pasa algo?

Alan: No nada, solo pensé que eres muy linda. - dijo mientras me sonreía.

Tn: .... - En ese momento me sonrojé un poco, me había pillado por sorpresa. - Alan..

Alan: ¿Si?

Tn: ¿Podemos regresar una semana más tarde?

Alan: ¿Y eso?

Tn: No nada.. Solo que me gustaría tener más tiempo para visitar su reino.

Alan: Oh esta bien.. Pero entonces debo avisar al rey de Cyrenia.

Tn: Kaito ya se ha encargado.

Alan: ¿Eh?

Tn: Me ha enviado una paloma. Con un mensaje, de que él se ha encargado de eso.

Alan: Entiendo.. Bien, mañana podemos visitar el reino.

Tn: Si. - dije antes de ver como él salía por la puerta.

Alan: Buenas noches, Tn.

Tn: Buenas noches Alan.

Después de que se fuera me tomé la sopa y seguido me puse el camisón que me había ofrecido allí. Cuando me acosté en la cama todo estaba bastante suave. Me quedé dormida en poco tiempo

- A la mañana siguiente -

Fui despertada por unas sirvientas, al parecer me iban a ayudar a cambiarme ya que el príncipe Alan habían conseguido ropa para mi, para que no pasará frío estando allí.

Cuando terminaron de ayudarme fui llevada al salón donde su familia y él estaban desayunando. Al llegar me senté al lado de él, este sonrió y les contó a su familia que hoy me llevaría a visitar el reino.

Su familia estaba bastante contenta, yo por alguna razón sentí que ellos tenían un plan en mente. Cuando terminamos de desayunar Alan y yo salimos de aquél salón para dirigirnos hacia la puerta de aquél palacio sentí que cuanto más nos acercábamos a la puerta más frío tenía. Cuando llegamos donde estaba la salida del palacio me pusieron una capa de pelo sobre mis hombros.

En ese momento echaba de menos los abrigos, las estufas.. Se notaba que tenía ganas de volver a casa. Cuando empezamos a caminar por las calles muchos nos veían sorprendidos pues el hecho de que yo estuviera a su lado caminando por el reino daba mucho que hablar..

Cuando nos acercamos al mercado vi que muchos de los puestos que habían allí aparte de comida, era de bebidas calientes. Algunos vendían café, otros leche, tés, chocolate..

Alan: ¿Quieres algo de beber?

Tn: ¿Eh? No hace falta, además acabamos de desayunar no hace mucho.

Alan: Bien, pero si te apetece algo solo dímelo. - dijo mientras tomaba mi mano y la besaba después de haber dicho aquello.

(...)

Después de que me hubiera enseñado la calles principales de aquél reino al final fuimos a tomar un poco de chocolate ya que eso me hacía más recordar mi mundo.. Ya que yo en invierno siempre tomaba una taza de chocolate, además así podría entrar en calor.

Cuando llegamos a palacio me estuvo enseñando todos los lugares y rincones para que no me perdiera. Seamos honestos.. Me perdería en solo 5 minutos.

Retrocediendo en el Tiempo Y en el EspacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora