—¿Cómo que no puedo dormir con mis amigas? —preguntó Daniela por cuarta vez. Miraba con el ceño fruncido al profesor mientras sostenía en sus brazos la bolsa de dormir y su almohada.
El señor suspiró, esa chica llevaba un rato atormentándolo, y él estaba muy cansado.
Volvió a revisar la lista, en la cual claramente colocaba que las compañeras de la quinta tienda de dormir eran: la señorita Garzón, López, Price y Calle.
—Disculpe, jovencita Daniela, así dictan las reglas. Usted ha sido asignada a dormir con las compañeras en la lista, punto —dijo para la desgracia de la castaña, Poché observaba con los ojos abiertos la escena.
En ese instante su amiga Kim salió a la defensa, al igual que Manuela, no soportarían ser separadas de sus amigas.
—¡¿Cómo que dormirán juntas?! —exclamaron las dos, por primera vez en su vida de acuerdo con la otra.
El profesor volvió a suspirar, tendría que aguantar a esas chicas también.
—La señorita Calle, deberá compartir...
—Ya sé toda esa patraña. Me refería, a que usted hiciera una excepción —dijo la chica de los ojos miel, Daniela la apoyó cabeceando repetidamente.
—¡Por favor! No puedo dejar a mi amiga dormir con esa perra —dijo Kim muy decidida, señalándola.
—¿A quién le dices así, bola de grasa —le retó la castaña, mirándola con irritación.
Poché la miró con enojo, no le gustaba que insultaran a sus amigas.
—¿Ve? ¡Por eso no la quiero cerca de Poché! ¡No va por el camino de Yisus! —terminó diciendo la rubia.
—La joven Garzón tendrá que cumplir con las reglas, al igual que la señorita Calle —repitió el profesor y Poché simplemente no podía hablar, sentía el corazón en la garganta mientras sacudía la cabeza.
—No, no, no podría...
—Nada de cambios. Ahora vayan a cambiarse, antes de que las mande a dormir al bosque —dijo muy serio mientras se colocaba los lentes.
—¡Perfecto, mejor es compartir con osos que con ella! —dijo Kim y Poché hizo una mueca, ella no quería dormir en el bosque a mitad de la noche.
Poché intentaba no mirar a Daniela pero sus ojos se encontraron con los avellana y no identificó el enojo en ellos, era más bien, una mezcla de emoción y pánico.
¿Por qué Daniela Calle tendría que tener miedo? ¿Acaso pensaba que Poché le haría algo? La que debería estar aterrada en ese aspecto era la morena, intentó no temblar, aunque su piel estuviera de gallina.
Pasar toda una noche con la chica de tus sueños debía de ser magnifico. Claro, si esta chica no te odiara y no estuviera haciendo todo lo posible por no dormir contigo.
—No, ya hablé. Y usted, jovencita Gómez, deberá compartir la tienda con Villa y De Sutter —dijo señalando a su amiga, las mejillas de Laura enrojecieron y los labios de Manuela perdieron color. Kim sentía como si le fuera a dar un ataque.
—¡NOO! —chillaron las tres pero ya era tarde, la decisión estaba tomada.
Las cuatro tuvieron que resignarse con su estadía en la tienda que les había tocado. Poché notaba a sus amigas sumamente afectadas, por tener que compartir la noche con Manuela. Al menos se tenían la una a la otra mientras que Poché, al contrario, estaba sola con la castaña.
Tal vez en la noche fuera a hacerle alguna maldad y le tomaran fotos para subirlas a la red, no importa cuán enamorada estuviera de Daniela, ella no podía evitar pensar en que eso sería lo que haría la castaña. Nora tendría que compartir con dos amigas del equipo de animadoras, eso sí era suerte. Estaban las cuatro recogiendo algunas cosas mientras todos se preparaban para dormir, las chicas vestían con shorts y camisetas holgadas, la vestimenta común para dormir.
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Rivales | Caché Adaptación | Corrigiendo
FanfictionHistoria de "Thebookstore" María José Garzón comienza la secundaria sintiendo las burlas de sus amigos. Entre un grupito de chicas que la fastidian conocerá a Daniela Calle. Durante varios años ellas comienzan una gran rivalidad. Se odiaban a muert...