«Mírenlo siendo tan lindo y adorable... debe ser un truco, quizás trama algo. Ese niño no es normal, es demasiado amable para ser real, debe ocultar algo realmente oscuro.
iEs perverso! ¡El mal personificado!
Si buscas en el diccionario la palabra "...
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—¿Y ya son novios? — Soora preguntó después de haber terminado de tragar las frituras observándole con grandes ojos.
— No sabes comer — Alejo murmuró rodando los ojos al ver las comisuras de sus labios batidos con migajas de frituras, pasando una servilleta con suavidad.
Emilio observó la escena y dándole una rápida mirada a Dylan— quien se encontraba a su lado revolviendo las frituras distraídamente — tomó una bocanada de aire y soltándolo en un enorme suspiro negó con una pequeña mueca.
— ¿Qué, por qué no?
— Joaquin siguió insistiendo en llamarme amigo toda la semana — resopló —. No sé cuál es su problema con eso, creo que le he dejado claro que no soy solamente su amigo.
Dylan dejó el tazón lleno de frituras sobre la mesita de centro llamando la atención.
— Mira, a Joaquin en serio le gustas. Todo el día es "Hyung hizo esto, hyung es muy apuesto, hyung blah, blah, blah" y ya estoy harto de su maldita inseguridad. Puedo soportar las quejas de Mochi, pero no voy a soportarte a ti también.
— Dy... — Alejo murmuró tomando su mano entre la suya para entrelazar sus dedos.
Soora observó las mejillas de su mejor amigo encender y sonriendo ante eso se alejó un poco para que el cuerpo de Alejo lograra inclinarse más hacia Dylan. Miró enternecida la manera en que Dylan se hacía pequeño ante la cercanía.
— ¿Inseguridades? — Emilio le miró ceñudo — Habla claro Dylan, ¿de qué está inseguro?
Dylan aplanó los labios y pareció meditarlo unos segundos, miró los tres pares de ojos fijos en él y soltando un suspiro largo comenzó a explicar: — Joaquín es una persona demasiado amable y dulce, sus sentimientos son siempre sinceros y sólo quiere encontrar a alguien que lo quiera por como es él y no por beneficio.
— No entiendo.
— Ha tenido muchas relaciones que siempre acababan en "fue divertido tenerte como sirviente un rato, pero ya me aburrí de ti." — su voz se hizo más gruesa y sus ojos destellaban enojados —. Si te haz dado cuenta, se deja manipular muy fácil por los demás e insiste en que no le molesta en lo absoluto. Por eso es tan terco con la palabra amigo, no quiere ilusionarse muy rápido y si lo hace esa es su única defensa. Si quieres dejarle en claro lo que sientes deberías decírselo hasta que te crea.
Emilio asintió repasando sus palabras en su cabeza, infló sus mejillas y soltó el aire en un resoplido. Ah, ese niño era tan tonto.
— Hablaré con él — se levantó sacudiendo sus ropas y dando una rápida reverencia dio media vuelta para llegar a la puerta de su casa —. Mamá llega en la noche y si encuentra la casa sucia, cortaré sus huevos y se los daré de comer.
Soora levantó su mano como si estuviese en la escuela y Emilio le dio la palabra. — Yo no tengo huevos.
