—Rápido camile, mamá ya se va a trabajar. — Gritó Beka.
Mamá estaba en la cocina, escribía recordatorios para que no olvidáramos nada de lo que teníamos que hacer. Lo hacía cada vez que realizaba un vuelo largo. Dijo que volvería dentro de dos días.
Era azafata de aerolíneas internacionales, siempre estaba viajando y conociendo nuevos lugares. Cuando viajaba, siempre le pedíamos que nos trajera recuerdos del lugar en el que había estado.
—Ahí estas, ¿Dónde te habías metido pequeña Cam Cam? — Dijo sacándome la lengua como broma.
Me acerque para observar lo que estaba haciendo, mamá realmente se preocupaba por todos nosotros.
— ¿A dónde irás esta vez? — Pregunté. Ella me miró con sus bellos ojos verdes.
—Rusia. —Respondió.
— ¿Es muy lejos? —Interrogue. Apoyando mi codo en su hombro.
— ¿quince horas y medias de viaje te parece poco?
—Tráenos algo ¿sí? — Pidió Beka. Sentándose junto a mamá.
—Les traeré muñecas rusas a todos. —Contestó ella.
Cuando termino de escribir los recordatorios, se despidió de nosotras y se fue a trabajar.
Regresaba de la escuela junto con Beka, entramos a la sala y lo primero que vimos, fue a Vanessa abrazando a papá y llorando desconsoladamente.
La televisión estaba encendida, mostraban la noticia de un accidente, el titulo era
"ACCIDENTE AEREO EN RUSIA DEJA A 337 MUERTOS "
Fue entonces cuando comprendí todo. Beka se echó a llorar en el suelo, la casa era un mar de lágrimas y gritos de dolor. No lloré.
Sentí como el tiempo se detenía lentamente, y de repente todo fue silencio, como si estuviera en una película sin sonido. Lo único que lograba escuchar, eran los latidos de mi corazón.
No fue hasta dentro de unos segundos cuando entré en shock, me quedé inmóvil. No lloré. Solo me senté en el suelo a asimilar la noticia.
Recordé lo último que me había dicho ella antes de irse.
"Te amo Camile, recuérdalo siempre".
...
Desperté. Estaba empapada en sudor. Siempre era la misma pesadilla, no importa cuántos años hayan pasado siempre se repetía una y otra vez.
Ya era de noche. Me había quedado dormida cuando regresé de la escuela.
Encendí mi teléfono para ver los mensajes que no había visto. Tenía 6 mensajes y 3 llamadas perdidas de Vanessa.
ROME
Lamento lo de hoy, no debí tocar un tema tan delicado para ti,
No quería hacerte sentir mal.
Lo siento.
VES
Eh! Si te sirve de consuelo,
Hoy golpee a Rome por haber sido un idiota contigo.
De nada, no me lo agradezcas XD.
Ignoré los mensajes, luego tendría tiempo de contestar.
Bajé a la cocina. Papá preparaba la cena, mientras leía su libro de recetas. Despego la vista de su lectura y me dio una mirada.
—No he querido tocar este tema porque la verdad es que no conozco muy bien los hechos.—Mencionó papá.-Pero creo que hemos aplazado demasiado esta conversación y es momento de que me digas que es lo que pasa.
ESTÁS LEYENDO
Cuando el amor sea para siempre ©| TERMINADA |
Teen FictionCamile siempre creyó que un "para siempre" sería eterno. Gus siempre ha estado herido y nunca ha logrado valorar a las personas que lo rodean. Y... Mitch, bueno nadie sabe de él desde que ocurrió ése incidente. Todo inició con una tragedia. Y ahora...