Royals [Draco Malfoy] traducción.

Capitulo Treinta Y Seis

POV DE DRACO

Me senté junto a la mesa entre otros mortífagos, pero Lilith no estaba allí. Después de que Dumbledore fuera asesinado, la guerra comenzó.

Odiaba estar aquí, la voz sin aliento de Voldemort me producía escalofríos, pero también me molestaba la voz rasposa de mi llamada tía.

Estaba preocupada por ella, no tuve la oportunidad de decirle nada. Probablemente piense que soy un asesino.

"Ahora podemos alegrarnos de que por fin hayamos conseguido que Lilith se una a nosotros" la voz de Voldemort me despertó de los pensamientos y miré hacia la puerta, viendo entrar su pequeño cuerpo. Estaba muy pálida, tenía ojeras, mostrando que no había dormido nada últimamente. Pero también su postura mostraba que había sido torturada.

Rápidamente intenté levantarme, pero mi padre me empujó con su bastón a la pierna, mostrándome que tenía que quedarme quieta.

"Joven amor, ¿no es hermoso?" Dijo Voldemort, mirando a su serpiente, acariciando suavemente su cabeza. Por lo que sé, esa COSA que tenemos delante nunca ha experimentado el amor, así que qué va a saber él.

Me senté, pero no dejé de observarla. En cambio, mi madre se levantó y se acercó a ella, colocando suavemente sus manos sobre los hombros de Lilith. Vi como mi madre le susurraba algo, viendo como Lilith asentía a sus palabras. Y Narcissa, tomó la mano de Lilith, haciendo que se sentara junto a la mesa a su lado.

"Ella te hace débil" dijo Voldemort y no tenía razón. Lilith me hizo fuerte, ella es mi ancla. 

"Vamos a darles una lección" sugirió Bellatrix y le lancé una mirada mortal a mi tía.

"No no" Voldemort la calmó y me miró directamente "La reunión ha terminado" dijo, pero yo me quedé indecisa. Normalmente las reuniones no terminaban así. Normalmente alguien moría.

Me levanté sólo cuando todos los demás empezaron a ir a otro lugar, así que rápidamente corrí hacia Lilith y me arrodillé frente a ella, mirando su rostro perturbado.

"¿Qué te ha hecho?" Le pregunté sabiendo que definitivamente fue Bellatrix quien la torturó.

Ella no contestó, sólo me miró, haciéndome sentir un intenso dolor en el corazón. "No quiero estar aquí" susurró después de un minuto y volvió a bajar la mirada.

"Lo sé" tomé suavemente su mano fría en la mía y la besé. ¿Por qué era ella la que tenía que estar involucrada en esto? Ella es el alma más pura que jamás haya existido. ¿Por qué tiene que soportar el dolor?

"Lilith" escuché la voz de mi madre acercándose a ella, miré por encima de mi hombro a mi madre y ella sostenía una taza de té. Mi madre colocó la taza frente a ella en la mesa. "Bebe, cariño" dijo mi madre suavemente y acarició el pelo de Lilith con delicadeza.

Frente a mí había dos mujeres que no merecían estar aquí, estaban aquí por culpa de mi padre, por sus errores delirantes. Y ahora era yo la que tenía que llevar el buen nombre de mi familia.

Lilith agradeció a mi madre y comenzó a beber el té, noté que sus manos temblaban suavemente. Oh, pobrecita...

"Os dejaré a solas. Llévala a tu habitación, allí podrá descansar" me informó mi madre y yo asentí, ayudando a Lilith a levantarse y caminando juntas hacia mi habitación.

En cuanto llegamos, corrí al armario y saqué un suéter negro y me acerqué a ella para ponérselo, ya que solo llevaba una camisa remangada, estaba helada.

"Sé que tu tarea era matar a Dumbledore" dijo y tragué saliva mirando sus hermosos ojos, sin saber a dónde irá a parar con esta frase. "Pero también sé que no lo asesinaste. Lo siento" dijo y suspiré aliviado

"Yo no lo asesiné" dije el hecho, asegurándome de que todo estaba claro. Aunque me sentía muy culpable por su muerte, no quería que muriera.

Entonces, en un segundo me abrazó, rodeando mi cintura con sus manos, presionando su mejilla derecha contra mi pecho: "¿Por qué me dejaste sola?" murmuró con tristeza mientras yo la rodeaba con mis brazos, acariciando su cabello suavemente, brindándole mi calor.

"Lo siento" susurré y realmente lo sentía, nunca tuve la intención de dejarla sola y era mi culpa que Bellatrix le hiciera eso.

Se apartó lentamente y me miró, sus ojos cansados miraban directamente a mi alma. Yo era vulnerable a su lado, pero ella me hacía fuerte. Me hizo darme cuenta de muchas cosas, haciéndome mejor persona. No digo que sea una buena persona, pero me sentía... lo suficientemente bueno cuando estaba con ella.

Me incliné hacia sus labios y los apreté suavemente. Ella me devolvió el beso y no me había dado cuenta hasta ahora de lo mucho que echaba de menos sus labios. Apoyé suavemente mi mejilla en la suya, profundizando el beso, pero pronto se apartó.

Me miró: "Vamos a morir, ¿verdad?", me hizo una pregunta que no esperaba escuchar. No le contesté.

Sí, Lilith, probablemente lo haremos.