— Mikey... —Dijo Gerard mirándolo con tristeza, entendía el comportamiento de su hermano menor, entendía que lo quería proteger, pero también debía entender que Frank nunca le fue infiel, que realmente él era una víctima de esa loca que tenía como secretaria.
— ¿No oíste lo que te dije? Aléjate de mi hermano — Gruñó el de lentes.
—Basta, Mikey. Él es el papá de mis bebés, debe quedarse...
— Gerard, ¿Tú eres idiota? ¿Te olvidaste todo lo que te hizo?
— Señor Way ¿Está listo para saber el sexo de sus bebés? —Preguntó la enfermera que cuidaba a Gerard. El pelinegro miró a Frank con una sonrisa en sus preciosos labios. El tatuado sintió nervios y emoción al saber cuál sería el sexo de sus bebés, aunque le gustarían que sean dos bonitas niñas, pero sean lo que sean los amaría muchísimo así como ama a Gerard, el amor de su vida.
Frank, sin siquiera dudarlo, tomó la pálida y delicada mano de Gerard entre la suya, sintiendo su calidez y su suave piel. Al mirarse se sonrieron con amor y alegría, de verdad estaban muy felices.
...
Los bebés iban a ser dos niñas, las cuales crecían mucho en el vientre de Gerard, quien cada media hora pedía algo para comer. Frank se encargó de todos sus antojos, fue hasta la heladería a comprar los sabores favoritos del pelinegro y también fue al supermercado a comprar algunos snacks.
Ahora Gerard se encontraba nuevamente en su habitación, la doctora que lo atendía dijo que ya se podían ir, solamente estaban esperando a que Frank volviese, ya que éste se había ido al baño. Mikey aprovechó que estaban ellos solos para poder hablar.
—Gerard —Lo llamó Mikey, quien se sentó a un lado suyo en la camilla del hospital. El pelinegro lo miró y le sonrió, aún estaba feliz por saber que tenía dos niñas dentro suyo — Tenemos que hablar.
— Claro, Mikey.
— Estoy muy feliz con que estés por dar a luz a dos bonitas niñas, pero no estoy feliz con que ese idiota esté aquí, haciéndose el buen marido y el buen padre — Dijo el de lentes bastante enojado, realmente no estaba feliz con la llegada de Frank, jamás había estado feliz con todo lo que le había hecho a Gerard. Lo dejó solo noches enteras, llorando porque no llegaba como debía hacerlo, haciéndolo sufrir ¡Hasta en su cumpleaños había estado llorando! Mikey solamente quería lo mejor para él, y sentía que Frank no era lo mejor para su hermano, quien ahora llevaba dos hijitas de ese maldito enano.
— No le digas así, él es el padre de mis hijas — Contestó Gerard llevando ambas manos a su enorme vientre, posándolas allí y dándole pequeñas caricias — Entiendo que me quieras cuidar, Mikey. Amo tu protección, pero entiende que Frank es inocente, él es una víctima de aquella loca.
— ¿Y tú realmente le crees? Porque si yo despertase así de la nada en la cama de una loca no aceptaría sus bebidas, ¿No lo crees? ¿O es que Frank es tan idiota como para aceptarle todas sus bebidas sin siquiera sospechar de nada?
—Mikey, yo confío plenamente en Frank. Hay un vídeo donde se muestra su inocencia, y sobre lo que esa loca le hizo, prácticamente lo drogó para acostarse con mi esposo.
— ¿Esposo?— Dijo Mikey frunciendo el ceño. ¿Cómo podía decirle esposo a Frank después de todo lo que le había hecho? — ¿Acaso se casaron mientras yo no estuve o qué?
— Él nunca dejó de ser mi esposo.
— Yo recuerdo bien que se divorciaron.
— Sí... Pero nos seguimos amando — El menor de los Way bufó molesto al oír aquello, realmente no entendía a su hermano, y nunca lo iba a entender.
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Love of my life •Frerard•
FanficUn matrimonio de años, y también un engaño de por medio. Frank va a hacer hasta lo imposible para volver a recuperar la confianza y el amor de Gerard. •Mpreg. 28/12/2020