Se busca mamá.

Capítulo 8

La campanilla del apartamento se hizo escuchar tras la llegada del castaño de su amigo. Cuando le abrió observó en sus brazos un peluche de un dragón negro de ojos verdes con un moño verde envuelto a su cuello.

-Es más grande de los que le regalas -Jack sonrió de lado.

-Este es único, ya verás que hará su colección de razas de dragones -Hiccup entró mirando a la bebé en brazos de Hans con el mismo dragón en brazos de la bebé - ¿Pero qué mier....¿Hans? ¿El mismo?

Jack sólo sonrió aguantando la risa.

Hiccup le quedó esconder el peluche tras de él cuando Jayla lo miró.

-Feliz cumpleaños hermosa -Dijo con cariño- Ahora vuelvo, recuerdo haber olvidado algo en la juguetería.

Se giró y se fue.

Jayla quiso bajar a caminar hacia la cocina donde estaba Rapunzel con Merida alistando los cupcakes morados con chispas blancas y los tazones de botanas.

-Awwws hola bonita -Merida miró las papas fritas de sal – Jumm no sé si tu papá me de permiso de darte más papas antes de la comida.

Merida miró a Jack y Jayla también, este iba a negarse, pero al ver los ojos azulados de su bebé le hicieron aceptar.

-¿Y la novia? -Rapunzel se sentó con Hans después de color en la mesa de centro los cupcakes.

-Tenías que ser la tía entrometida de la familia -Hans dijo tomando de su soda.

-Sólo bromeo -Ella le soltó un leve puño a su hombro – Podrías regresármela con la misma pregunta, peeeero no soy más una solterona.

-¿Hablas del policía? -Merida llegó con Jayla agarrada de su mano, por lo tanto se encorvaba un poco de lado la pelirroja para seguirla sosteniendo al caminar.

-¿Policía? -Hans le miró admirado - ¿De dónde?

-Verás ..... acércate -Rapunzel le dijo haciendo que este se aproximara a ella para murmurarle -¿Qué te importa?

-Ash -Se apartó Hans.

-Lo conocí en unos turnos de emergencias -Rapunzel se seguía riendo.

Jack se acercó a toma run cupcake para morderlo, pero de nuevo se escuchó el timbre. Se acercó a abrir para encontrarse con Elsa.

Quien cargaba una mediana caja envuelta con papel morado y amarillo, llena de estrellas de la tapa con un moño de colores.

Admiró su vestido de día que llegaba su falta un poco arriba de la rodilla. Una vestido azul cielo, con tenis blancos pequeños y encima una chamarra café claro.

-Hola -Ella saludó con ternura -Perdona si he llegado algo tarde.

-Para nada, adelante -Se acercó a besar su mejilla -Luces.....muy hermosa, siempre en realidad ¿Cupcake?

-Gracias -Respondió intentando no sonrojarse.

Cuando entró y saludó a los demás con la mano, miró a Jayla con ternura para acercarse a ella y arrodillarse para darle la caja.

-Feliz cumpleaños, preciosa -Besó su frente provocando un suspiro que Jack tuvo que reprimir.

La niña sonrió, tomó la caja que apenas podía abrazar para dejarla al suelo y empezar a abrirla.

Los primero que fue sacando fueron unos dulces coloridos, una caja pequeña de crayolas y al final soltó un grito de alegría al tomar en manos un peluche de un reno pequeño y blanco.