Epílogo

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Aquella mañana de verano estaba resplandeciendo sus rayos filtrándose a aquella habitación de esa casa de las residencias privadas.

Dentro estaba la habitación con el peliblanco dormido en medio de aquella cama matrimonial, estaba solo puesto que dormía más tiempo de lo normal, pues anoche se quedó trabajando en un puesto más alto de arquitectura, como subjefe de sus proyectos.

Ahora estaba dormido en medio de aquella cama y su sueño estaba llegando a su fin cuando escuchó la puerta abriéndose, él sabía de lo que se trataba por lo que sólo discretamente para seguir haciéndose el dormido.

-Sigue dormido ¿Deberíamos despertarlo?

-Podríamos mojarlo.

-Podría enfermarse, Jatzira -Dijo la voz de la niña mayor de cabellos castaños que cada vez parecieran más claros, usaba un overol de mezclilla con perches de arcoíris.

-Mamá lo curaría como cuando nos agripamos, Jayla -Dijo la niña pequeña peliblanca que también usaba un overol pero con parches de copos de nieve- Voy a entrar, si no me responde lo dejamos aun dormir.

-No lo despiertes, Jatzira -Dijo la castaña al ver a su hermanita entrar a gatas para llegar del lado donde su papá dormía.

Se levantó suavemente para observar sus ojos cerrados.

-Está dormi.....

-¡Boo! -Jack la hizo gritar cuando la agarro con un brazo para acostarla a la cama y hacerle cosquillas que la hacían gritar más.

Jayla también se había espantado, pero después riendo saltó a la cama para ayudar a Jatzira.

-Eso es trampa, son dos contra uno -Dijo el peliblanco quien se puso en pie con Jayla sobre su espalda modo de caballito.

-Pero eres más grande, papi -Dijo Jatzira tomando una almohada para pegarle entre risas a su torso.

Los tres estaban riendo y dando movimientos torpes para hacer cosquillas a quien pudiera.

-Niñas ¿Qué les dije que dejar dormir a su papá?

El ojiazul miró a la mujer platinada vestido de pantalón de mezclilla, unas sandalias marrones y una blusa de tiras verde pistache y con su cabello suelto.

-Ya estaba despierto, me tendó una trampa -Dijo Jatzira soltando un último almohadazo al vientre de su papá que lo hizo bufar.

-Es tendió -Jayla bajó de la espalda de su papá para correr a abrazar a la platinada a la altura de su cintura -Mami preparó waffles hoy con formas de unicornios.

-Yo quería de dinosaurios -Dijo Jatzira fingiendo hacer garras con sus deditos.

-Podemos hacer tu propio dinosaurio si se apresuran a bajar a desayunar – Elsa acarició los mechones de Jayla para apartarlos tras sus orejas y así inclinarse a besar su frente.

-¡Si! -Jatzira se apresuró a saltar de la cama, pero Jack la atrapó puesto que estuvo por resbalar.

-Con cuidado, chiquita.

Pero Jatzira siguió corriendo con Jayla tras de ella para bajar las escaleras.

-No bajen las escaleras corriendo -Elsa les llamó para después suspirar llevando una mano a su frente -Y todavía no consumen el azúcar de la miel de maple.

-Disculpa si me dormí mucho tiempo.

-Tranquilo, anoche regresaste tarde -Elsa besó su mejilla – Primero desayuna con nosotras y después puedes ducharte.

Se busca mamá.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora