Capítulo 11

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Ese silencio lo detestaba siempre, aquel silencio que pareciera ensordecerte recordándole lo mal que hizo o lo que debería sentirse, aquel que le cuestionaba si sí lo amaba o sólo la complacía.

Aquel silencio que sólo dejaba que sus ojos hirientes se miraran.

Se levantó del asiento frente a la mesa para querer salir de ahí, pero no se dio cuenta que su muñeca la aprisionó la mano y uñas de ella que le impedía irse.

Él sólo quería soltarse a pesar de verla gritarle las palabras que lo herían, pero ahora ni la escuchaba, quería soltarse de su mano hasta que la otra le pescó de la camisa de su pecho para atraerlo más.

Fue el segundo que lo despertó dando un pequeño sobresalto mientras su frente estaba sudando demasiado y su respiración se había agitado.

Llevó una mano a su cara para levantarse y sentir entre sus dedos el cuello de su playera empapada. Se levantó para quitársela y colocarse otra limpia, miró a su puerta y se encaminó a prender la luz de su pasillo para pasar a la cocina y servirse un poco de agua.

De regreso no evitó mirar a Jayla desde la puerta. Descansando en su cuna mientras su mano quedó agarrada de la pata del animal de juguete que Elsa le regaló.

Le sonrió y después borró su sonrisa sintiendo angustia ahora y que no dudaría primero ir contactar a una persona después de lo que sucedió.

Fue a la mañana siguiente que se levantó mucho más temprano para alistarse y recibir más temprano a su prima.

Rapunzel escuchó atenta a Jack mientras checaba a su sobrina. No quería verse seria con la pequeña por lo que le lanzaba pequeñas sonrisas tiernas en su chequeo.

-Esa maldita bruja -Dijo entre dientes la rubia -¿Sí sabe que puede meterse en problemas legales si se te acerca?

Jack lo sabía, pero en su historia con Tooth, temía mencionar aquello. Sólo se encogió de hombros mientras miraba a su prima.

-¿Cómo ves a Jayla?

-No soy especialista en niños y enfermedades, sabes que lo mío es la cirugía -Ella le quitó un termómetro de la axila de la niña -Pero conozco los síntomas y puede que la última vez que se enfermó de fiebre sea un síntoma, presentó dolor de cabeza y piel pálida.

Jack suspiró mirando a su niña angustiado, pero cuando Jayla lo miró con su inocente sonrisa, este le sonrió con ternura para ocultar su expresión.

-Llévala con un pediatra -Dijo Rapunzel cuando Jack se despidió -Y si es necesario, ve consiguiendo algún abogado.

Asintió sólo con un leve movimiento, haciendo que Rapunzel supiera que algo le sucedía.

-Jack ¿Todo está bien? Me refiero a tu encuentro con Tooth y.....

-Todo está bien -No respondió con sinceridad -Ya debo irme, llegaré temprano.

Besó a su niña de la mejilla y luego a su prima para irse.

Aquel día en el trabajo estaba apresurado en avanzar en sus trabajos. Hans notaba que estaba o muy concentrado o muy disperso.

Se acercó a este cuando estaba en el piso de taller solo, lo miró estar cortando unos materiales rígidos para después juntarlos sobre una mesa.

-¿Para que son eso? -Preguntó el pelinaranja.

-Soportes, nada llamativo -Respondió.

-Ya suéltalo ¿Qué es lo que te sucede?

Jack le miró y de nuevo a los soportes, se encogió de hombros sin querer mencionar una palabra, pero podía contar con él.

Se busca mamá.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora