Mi magia mi condena

Capitulo 11

Ha pasado un largo tiempo desde que hicieron una gran locura, me tuvieron por casi tres horas encerrado en una habitación con varias personas que son mu especiales para mi, pero me fue bien pude hacerlo, controlé y aún controlo mis emociones y lo hago muy bien. En él ultimo año que he estado practicando cada día lo hago mejor, veo el orgullo en mis padres por todo el avance que he tenido en mis once años. 

Y la mejor parte es la libertad que estoy teniendo, dos años sin estar encadenado, dos años saliendo del castillo aunque sea a la fronteras posteriores pero algo es algo, ahora en este momento estoy terminando de arreglarme. En menos de una hora inicio el nivel uno de magia elemental y no podría estar más feliz de lo que que estoy.

- Esta listo. - asentía de forma desenfrenada con una amplia sonrisa a la pregunta que me hacia Henry. 

Minutos después estaba caminando a la entrada del castillo una vez en la puerta me despedí de mis padres para irme con Héctor y Henry. Llegamos al edificio y podía ver a varios niños que conocía, y jóvenes que habia visto antes en varias celebraciones importantes en el reino, mi mirada buscaba a Ricardo, no quería estar solo y lo vi hablando con la heredera de los Ricalde Paula. Me despedí de mis guardias y me acerque a ellos.

- Hola... 

- Sharikan, hola.

- Buenos días majestad - La suave voz de paula me hizo reír suavemente mientras negaba con la cabeza.

- No es necesaria la cortesía Paula. puedes decirme Sharikan no tengo problemas con eso.

Ella asentía con una sonrisa, se parece un poco a su padre cabello castaño y ojos oscuros. Al menos tendré a mi mejor amigo y a una nueva amiga durante los estudios. Pero al parecer me equivoque.

- Mi magia es débil lo recuerdas, opte por formas de la magia, y Paula también ella no quiere ser la siguiente Ricalde, dice que los trabajos de su familia no es algo a lo que se quiera dedicar.

- Es decir que voy a estar solo los próximos 6 años.

- Nos veras en el descaso Shari.. y harás amigos en tu unidad. 

- Claro... nos veremos en el descanso en este punto. - dije antes de separarme de ellos, ambos se quedarían en el primer piso, respire antes de comenzar a subir los escalones, llegue al segundo piso, unidad de magia básica, y seguí subiendo hasta el tercer piso, magia elemental, busque mi salón 1C. 

Odio sentirme observado, me pongo muy nervioso así que solo respiraba calmando mis nervios, en este momento desearía ser un chico común del pueblo no el heredero al trono todos me observan.

- Buen día majestad - mire a mi lado derecho era un chico, se me hace conocido. 

- Buenos días, no me gusta que utilicen apelativos conmigo, puedes llamarme Sharikan, por favor.

- Esta bien, Sharikan. Máxime, Máxime Fayolle. - ya se porque se me hace conocido.

- El hijo de Héctor... - asentía a mi afirmación. Si se parece a su padre. En un momento estábamos sentados juntos.

- Somos iguales - me susurro, regrese a verlo y sentí como inmediatamente se me corto la respiración parpadeo y sus ojos eran verdes tan oscuros como los míos, tras un nuevo parpadeo sus ojos volvieron café tan claros como los de su padre.

- Ahora entiendo porque siempre me dice que puedo controlarme... eres un ser mágico...

- Si al igual que usted, yo nací con esta magia, soy uno en un millón, a diferencia de usted que nació con la magia de su madre en todo su sistema.

Ya tenia un nuevo amigo en Máxime, después de esa conversación conocí a los hijos de Erick, los gemelos Aubriot, son idénticos, pero aun no he hablado con ellos ni ellos conmigo, de hecho ninguno de los dos se separan. 

***

La primera semana de clases no estuvo tan mal, me gusta estar rodeado de personas de mi misma edad, me divierto mucho, ahora si puedo decir que hablo con los gemelos Aubriot, Dylan es muy callado a diferencia de su hermano al que si le gusta llevar una conversación. Por otro lado también esta Cristian Morelli, me lo presento Máxime y así poco a poco crecía mi circulo de amigos, que ya no solo era Ricardo, también logre acercarme un poco a Paula. Todos los días durante el descanso nos juntábamos todos.

- Traje al grupo a un amigo nuevo, él es Lucas Fossati, estudia magia básica, y es mi vecino - decía Máxime presentándonos al joven de cabello castaño y ojos grises.

Y así cada día crecía más el grupo, en solo una semana tenia un grupo de 10 amigos, todos leales. Nos llevábamos bien teníamos confianza los unos en los otros. Lo que nunca paso por mi cabeza es que estuviera por perder a uno de mis amigos. Los gemelos Aubriot llegaron a ser iguales de cercanos a mi como Ricardo, y ahora estoy en una habitación de la clínica de mi tío Javier acompañando a Dereck.

- Estas son las consecuencias cuando te relacionas con una mortal, es peligroso, tanto para ella como para sus hijos. Mis padres se aman, y no podre acompañarlos más tiempo.

- Claro que lo harás, te espera un largo tiempo, no va pasarte nada tranquilo. 

- No me hacen efecto ni los medicamentos ni las pociones de los Ricalde. Mi magia se esta volviendo débil y comienza a desaparecer. 

- Y créeme una mortal si puede relacionarse con un ser mágico, pero deben cuidarse demasiado, mantenerse en constante cercanía a la magia para que el feto pueda desarrollarse, lo único que no hicieron tus padres fue elegir, ellos dijeron son los dos o ninguno. Tu estarás bien sabes por qué.

- Por qué - me pregunto, se veía bastante débil.

- Porque eres mi amigo y yo no te dejare morir si puedo hacer algo para ayudarte, pero voy a necesitar que me guarden un secreto - observe a Dylan entrar a la habitación - puedo confiar en ustedes.

- Somos descendientes de la Familia Aubriot, es nuestro deber proteger a la Familia y sus secretos. - como siempre Dylan siendo Dylan, es demasiado serio pero es un gran chico.

- Cierra la puerta y asegúrate que nadie venga, no se asusten, sigo siendo yo. - Cerré mis ojos y para cuando los volví a ver ambos se quedaron en shock por unos segundos. - Nací en esta forma... no tienen que asustarse con mi presencia, sigo siendo yo. Dereck - tendí mi mano para que la tome, cosa que hizo. - No sé por cuanto tiempo funcione, pero, te puede ayudar a que no existan deslices por un par de años. El don de la vida, es capaz de muchas cosas, no solo de darle vida y movilidad a objetos inanimados, en este caso lo usare para que tus patrones mágicos puedan seguir regenerándose, y dándole vida a los que están muriendo. - Dereck se quejo por una pequeña corriente eléctrica que sintió recorrer su cuerpo, solté su mano. - Eso es todo. - dije cuando vi en el monitor como lentamente comenzaban a subir sus niveles, volví a verme en la forma física de un Dávila. - Esto es un secreto y confió en ustedes.

Continuara...