Única

37: Ramón

Iba caminando por las calles con una mochila en mi espalda rellena de ropa como si me fuera a quedar un mes, me sentía bastante emocionada de llegar, sonará ridículo pero la extraño. Cuando iba a cruzar una calle me pareció ver a alguien conocido, me le quedé viendo ¡¿Paula?! Debía ser mi imaginación pero era demasiado parecida, regrese la vista al frente pero de inmediato me detuve, estuve punto de ser atropellada.

- ¡L-Lo siento!

- Descuide señorita, tenga más cuidado.

Seguí mi camino tratando de no distraerme, podía morir en un descuido.
Solté Un suspiro ruidoso al ver su casa, alce mi mano para tocar pero un grito lo impidió.

-° ¡Ramón sueltame!

- ¿Ramón? - susurre con el ceño fruncido, no perdí tiempo y toque. Me abrió con una cara de sufrimiento, escuché gruñidos haciendo que baje mi vista ¡Qué cosa tan más hermosa! El pequeño pug tenía a mi amor tomada del pantalón, la jalaba y sacudía pero al verme se separó de ella y comenzó a ladrarme - Hola pequeñito - se calló, se sentó y movió su cabeza hacia un lado ¡Era lo más tierno del mundo!

-° Claro, encuentra algo más lindo y ni me pela - se cruzó se brazos

- Así hola Poché - Me hice la desinteresada

-° Cómo sea, pasa - abrió la puerta

Al entrar fui directo a su sillón, el cachorrito venía detrás de mi. Me senté y el se subió sentándose aún lado de mi, al parecer esta confundido, me mira detenidamente.

-° El es Ramón, mi hijo. - la mire y luego a Ramón

- Si se parecen.

Me sonrió tiernamente -° Gracias. Oye encontré una película que dicen que es muy triste, la quería ver contigo, ya sabes... para llorar juntas.

- ¿Cómo se llama?

-° Siempre a tu lado. ¿Crees que lloremos?

- Por el título tal ves si.

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La película estaba apunto de terminar y como era de esperarse Poché y yo llorábamos como dos niñas pequeñas.

-° E-Esto... es más - sorbió - es más triste que "a dos metros de ti"

- Mejor quitala.

-° Ya casi acaba.

Regresó mi atención a la televisión viendo como el perrito recordaba todo lo que pasó junto a su amo, apuntó de morir, las lágrimas se me escaparon. Poché sollozo.

-° ¡Joder! Ramón tu no hagas eso. - el la miro ladeando su cabeza hacia todos lados. Me reí.

Los créditos de la película comenzaron a pasar. Tome el control para quitarla, de repente me llegó una pregunta ¿Cómo rayos llegó Ramón? Cuando me fui el no estaba.

- ¿Poché? - Me miró - ¿En qué momento llegó Ramón?

-° Unos minutos después de que te fuiste Pau lo vino a dejar, es que el está enfermo y debo cuidarlo.

- ¿Entonces si era Pau? - susurre

-° ¿La viste?

- Si y por su culpa casi me matan.

Fruncio el ceño -° ¿Cómo así?