64: Extra #6

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- ¡¿Cómo que la disfrazaste de pollo y no de crayon?!

Así es, fui tan valiente de decirle a mi amor el pequeño accidente que tuvimos, pero no era mi culpa el que mi hija no pueda hablar bien y no le aya entendido ¿Verdad?

- Es que no le entendía, me dijo como ochenta veces y seguía sin entender.

- Pollo y crayon no se parecen en nada María José - mi dio una mirada mortal

- Dijo gayon vede, crayon se parece a gayon, rima.

Su mirada se suavizo pero aún era dura - Solo por que tienes razón te perdono, pero para la próxima te dejo sin tetas

Las rodee con mis brazos, ella río - Te prometo que no lo are de nuevo. Ahora ven aquí mi chiquibombon, no sabes cuanto te extrañe - la envolvió entre mis brazos en un abrazo que desde que se fue necesitaba

- También te extrañe Poch. ¿Qué tal te fue sola?

Solté un suspiro - Me fue del asco, ósea fui responsable y todo pero en la cocina uh-uh intente hervir agua y la termine quemando, es decir ¿Cómo se quema el agua? Nadie quema el agua aparte de mi.

Se río - ¿Recuerdas cuando intentaste ayudar ala vecina con su comida y casi le quemas su casa?

- Ni lo me lo recuerdes, pobre vecina casi la mató ese día.

- Pero no murió y eso es bueno - lo dijo como si fuera de más casual casi matar a tu vecina - ¿Quieres ir por pizza? Me muero de hambre.

- Sip, iré por Estrella y nos vamos.

Salí de mi habitación para dirigirme al patio, mis tres hijos están ahí. Apenas mis ojos encontraron a mis niños me frene, los tres se revolcaban en el lodo, había llovido hace unas horas y los charcos seguían húmedo. Estrella hacia pasteles y cuando Ramón o chocolate se acercan a oler ella los embarraba en su pelaje. Con las manos en la cabeza me acerqué a mi hija, Calle la va a regañar como sino hubiera un mañana.

- Holi mamá Poché.

- Hola ¿Si sabes que cuando mamá Calle te vea se enojara mucho? - Ella de inmediato se apartó del lodo, se intento limpiar pero se ensucio más

- Mami Calle me castigará - hizo un puchero. Desde que dijo que estaba embarazada ya puede repetir la R

- Y yo también, mira como dejaste a chocolate, pobrecin - me levanté - vamos a dentro para que te cambies - al dar el siguiente paso me resbale y caí de cola, Estrella se comenzó a reí * inserten risa de Calle de niña*

- Ahora mamá Calle se enojara contigo.

- No la menciones que se aparece - y justo como dije, apenas deje de hablar ella atravesó la puerta, su ceño fruncido de formó conforme avanzaba

- Qué bonita Poché, que bonita.

- Gracias - intente bromear pero como siempre salió mal

- Estoy hablando enserio Poché, primero lo del disfraz y ahora esto no se puede contigo.

- Problemas técnico amor, uno trabaja como más le conviene - me levanté y trate de abrazarla pero por supuesto no se dejó - te pierdes de mis maravilloso abrazos.

- No me importa - intento sonar indiferente pero tenía una sonrisa divertida - me iré a bañar y cuando salga ustedes ya estarán listas.

- ¿Nos bañamos juntas? - pregunte con picardía en mi voz, era en modo de juego pero si ella quería no me resistiría

Se acercó - Así ahorramos agua, tienes razón - Subí y baje mis cejas rápidamente, ella soltó una risita - te espero arriba - Sin más se fue, iba a seguir la pero la pregunta que hizo Estrella me detuvo

- ¿Cómo nací yo Mami?

Lo pensé un momento y sonreí - Te encontramos en la basura, estabas tan pequeña y bonita.

- ¿Enserio? - asentí, ella se quedó en shock

Reí y ahora si fui al baño. Al entrar ala habitación el agua cayendo se escuchaba, me quite la ropa y entre ala ducha. Ver el cuerpo de mi amor siempre me dejaba sin aliento. Con mis manos tome su cadera y la empuje para que el agua cayera sobre mi cabello.

- Quítate Poché, yo llegué primero

- Ya me toca, tengo mugre por todos lados - jalo mi cabello y yo, indignadicima me aparte - ¿Sabías que eso es maltrato?

- No cuando te lo mereces - se encogió un hombro

- Bueno - Ahora yo le jale el pelo

- ¡Auch! ¡Amooooor! - reí y lo volví hacer - eres bien mala.

-Perdóname - le bese el hombro por que asta hay alcanzaba - dañemonos ya - asintió

...

Después de 800 años nos terminamos de bañar y cambiar, ahora estábamos comiendo la deliciosa pizza que habíamos pedido.

- Mamis ¿Puedo preguntarles algo? - levanté mi cabeza para verla y asentí - cuando se estaban bañando escuché a mamá Calle haciendo ruidos raros ¿La estabas golpeando? - Me miró con tristeza, pero yo no podía con la vergüenza, debimos a ver sido más cuidadosas

- No te pongas triste mi niña, yo nunca le pegaría a tu otra Mami - mis mejilla picaban mientras lo decía

Me sonrió - ¿Entonces que eran esos ruidos? - Calle se atragantó en su jugo, yo reí

- Dile amor, ¿Qué eran esos ruidos? - le pregunté burlona 

- Es que me caí - sonrió inocente 

Maravillosa jugada.

- Oh, entonces asta todo bien - feliz tomó su pizza y la devoró. En un suspiro voltee a ver a mi amor, me enseñó el dedo de en medio y siguió comiendo, reí, bese su mejilla cariñosamente y la imite.  

- ¿Y cómo te fui con mamá Poché? - mi niña soltó una risita y se volteo a ver a Calle

- Un día llegamos tarde ala escuela - Calle me miró enojada, sonreí forzosamente - Y la directora se muere por Mami Poch - Joder, no tenía que decir eso

- ¿Cómo sabes eso?

- Mi ma dijo que todos se mueren por ella.

- Qué humilde Poché - reí

- Y la directora quiere que ella y mamá Poché sean novias - me puse seria de inmediato

- Espero que le hayas dicho que no.

- Dijo "lo veremos después" - la mire indignada, ella sabía que Calle se molestaría si se lo contaba

- ¿Es enserio Poché?

- Lo dije para que dejará a Estrella entrar a su clase, no fue por otra cosa.

Negó - No te aproveches de la gente, bueno, sólo poquito.

- Me aproveché poquito, casi nada.

- Bueno, pero no quiero volver a saber que esa señora se te acercó, tu eres una desgraciada y le vas a seguir la corriente.

- Pero es en modo juego, sabes que sólo te quiero a ti - pique sus costillas - lo sabes ¿Verdad?

Asintió riendo - ¡No me chuses!

- ¡Deja de fingir celos!

- Bien, lo siento amor, se que te traigo a mis pies - me miro diva

- Qué humilde Calle.

- Deja de burlarte de mi y comamos, a tu pizza se le pararon dos moscas - mire mi rebanada y era cierto, las estante

- No que asco. Te la regalo bebe - sonreí extendiéndole mi rebanada

- Saquese ala verga, no quiero eso.

- Tu te lo pierdes - mordí mi rebanada y seguimos con nuestra comida de lo más normal, todo feli 

ÚnicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora