Única

23: bajo sus condiciones

Santo sea el Dios que hizo que Poché y su padre salieran de la casa, así no aremos ,o bueno, así no are nada. Se suponía que hoy mi amor y yo haríamos limpieza del baño, pero gracias a Jesucristo súper estrella se fue y pues ni modo, bajo sus condiciones.

Pasaron unas horas, eran las 2 de la tarde y no sabía que hacer, ahora no estoy muy segura de querer estar sola todo el día, sólo estaba acostada mirando el techo, haciendo pucheros pensando en algo que hacer. Los toquidos en mi puerta me asustaron un poco, me senté en la cama y me levanté a para abrir, cuando estuve a unos pasos de abrir mire mi habitación. Era un caos. En le sillón había ropa sucia, en el suelo estaban mis cucos y todos mis zapatos estaba regados. Abrí los ojos como plato y me apresure a rejuntar todo.

- ¡Un momento!

- ¡Vamos Calle, no tengo todo el día!

Mi puerta se abrió, cerré los ojos dando vuelta, esto era un poco vergonzoso. Escuche una risa nasal, cuando la vi tienda las manos en la boca y su mirada era divertida.

- Demonios Calle, quita eso de mi vista - Dios, Pau había visto mis cucos

- Disculpa - susurre avergonzada - Bu-Bueno ¿A qué venías?

- Eeeeh pues a nada importante, sólo quería pasar el rato - se encogió de hombros

- Claro ¿Qué quieres hacer?

- Vamos a molestar a Ana banana - Me reí por el apodo

- Bueno, pero si pregunta diré que fue tu idea - asintió y salimos - ¿Qué se supone que aremos?

- Molestarla. Ya te lo dije.

- Me refiero a que es lo que le aremos.

- Pues... No se, lo que se me ocurra en el momento.

Caminamos a paso lento hacia la habitación de la chica, la verdad estaba nerviosa, Pau es una chica muy loca y esto no puede salir muy bien que digamos. Escuchamos ruidos, como si intentarán abrir la puerta, Pau me lanzo hacia otro cuarto y luego entró cerrando la puerta lentamente, hay que recarcar que sigo en el piso y las pompis me duelen.

- ¿Quién era? - pregunte levantándome

- Al parecer era vale, debemos esperar a que regrese. Pero ahora quiero estar de chismosa, escuchemos su platica.

- No seas así Pau, que tal si escuchamos cosas que no queremos saber.

- Pueden aver unas que sean interesantes.

- Esta bien, repito, si nos descubren diré que fue tu idea.

No me respondió, sólo se volteó hacia la puerta mirando a través de un agujero, yo sólo me senté en el suelo. Unos minutos después, escuchamos unos pasó bastante fuertes parece que venían corriendo, Pau se levantó de inmediato y miro, me hizo una seña para que me preparará, aunque no sabía para que pero aún así lo hice.

- Ya, pegate a la pared - me jalo del brazo para ir a la pared, se recosto en ella y después lo hice yo, tengo que aceptar que la curiosidad fue lo que me llevo a esto o tal ves fue mi chismoses

- Ya volví Ana. Mira traje estas golosinas, ¿Ahora si me dirás que te sucede? -

Pau me susurro "te dije que era buena idea" sólo negué con la cabeza

- Es... es sobre tu hermana.

Ya tenía un mal presentimiento.

- ¿Qué pasa con ella?

- Bueno, sigo enamorada de ella. Me siento feliz por ella, se ve que su relación está estable pero no puedo evitar sentirme mal cuando las veo juntas - los sollozos no tardaron en aparecer

- Oh la verdad no se que decirte, no pienso meterme en la relación de mi hermana, ella es feliz y eso me basta. Pero tu... no se que hacer.

Me separe dispuesta a irme, ya había escuchado mucho y no creo correcto estar invadiendo su privacidad, pero como siempre Pau lo impidió.

- ¿Adónde crees que vas? Esto se pone bueno.

- Ya escuche mucho Pau, esto no está bien.

- Bueno, si escucho algo que tengo que ver contigo iré rápido a donde estés - sólo asentí

Abrí la puerta después a irme pero Pau me jalo hacia dentro y la volvió a cerrar.

- No hagas ruido. Irán a buscarte.

- ¿Por qué? - pregunte frunciendo el ceño pero ella se encogió de hombros

- Supongo para hablar contigo.

- ¿Y que piensan que les voy a decir?
"Hola Ana ¿Qué aún te gusta mi novia? No te preocupes, ahorita le terminó para que puedan estar juntas ¿Qué ella ya no te quiere? Tranquila, yo la convenzo para que ande contigo" claro que no diré eso - bufé. Paula se rio súper duro

- Pues vamos a ver que quieren, si quieren llegar a un acuerdo les dices lo que me acabas de decir.

- Vamos pues - dije suspirando

Salí después a ir a mi habitación estaba segura de que ahí estaban, como dije estaba sentadas afuera de mi cuarto y al verme se levantaron más rápido que yo cuando tengo hambre.

- Necesitamos hablar.

- Esta bien, entren. - la deje entrar, Pau estaba a nada de pasar pero la detuve - No se si quieran que pases.

- Pregunta.

- ¿Pau puede entrar? - se miraron entre ellas y negaron - Lo siento, yo te cuento después - asintió

- Ya que estamos a solas, queríamos decirte algo, bueno ella - señaló a su amiga

- Calle, es que... me gusta tu chica aún, es incómodo pero quería que lo supieras.

- ¿Sólo eso?

- Pues si, para que no te sientas incomoda conmigo, yo no intentaré nada. Se que le hice daño y no quiere verme más.

Vaya esto si no lo esperaba.

- No te preocupes, todo está bien - me sonrió y corrió a abrazarme, eso me sorprendió aún más, que extraño día.

- Graci... - mi puerta se abrió, Pau tenía una cara de espanto.

- Debemos llamar al señor Garzón, ¡Ya! - Vale salió disparada supongo que a su habitación - Debemos ir al ático, como la otra ves ustedes.

« ¿donde carajos estás Garzón? »

- Arriba señor -

« no tienes escapatoria Juan Carlos »

- Daniela, corre. No podemos perder tiempo.

Y pasó lo que temía, esos hombres entraron a mi cuarto.

Capítulo limpio y seguro. Besos en la cola :v