Nací Como Un Híbrido Bastardo

XI

Al ver esos mechones de cabello flotando en el aire y la sangre corriendo por el palo que sostenía la cabeza del único padre que había tenido y que seguro iba a tener sentí como mi sangre empezó a hervir, aquél sentimiento de pérdida que no había experimentado hizo que mi pecho doliera y que no pudiera identificar si esa era la realidad o simplemente una pesadilla; pronto una ola de emociones empezó a inundar mi mundo, una mezcla de rabia, desesperación, deseo y tristeza hicieron que por mi cara corrieran un par de lágrimas frías mientras pasaban todos los recuerdos de ese hombre... La segunda persona en este mundo que me brindó una cálida sonrisa, sus esfuerzos inútiles y divertidos por enseñarme a usar un arco a la tonta edad de dos años, su horrible sentido del humor, sus habilidades y valores, su amabilidad y consideración con los menos afortunados, su fortaleza, su esfuerzo por mantenernos a salvo y se que aunque no lo hacía directamente, intentaba hacer mi vida menos miserable...

La mano de mi madre me tomó desprevenidamente del brazo, aunque había lagrimas aun cayendo por sus mejillas me miro con decisión y me dijo: 

- Todo va a estar bien mi niño, mamá te protegerá pase lo que pase. 

Le quise decir lo mismo pero las palabras no salieron de mi boca, no pude evitar pensar que ella estaba sufriendo todo esto solo por mi nacimiento

<Ella no merece esto>

Corrimos en dirección contraria a la batalla hasta llegar a los suburbios, en ese momento alguien habló a nuestras espaldas 

- Por favor no corran más, esos callejones están sucios y poco iluminados.

Mi madre se puso delante de mí

- No te acerques más 

•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°(Flashback)•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•

En ese entonces tan solo tenía 106 años cuando llego una carta del Rey Demonio Azrael declarando la guerra o la negociación, mi madre amaba profundamente a su emperador y tenía más hijas e hijos así que yo fui la mejor opción para que se evitara una masacre inminente

- No intentes nada que pueda causar su descontento, puede proclamarse rey pero es un emperador despiadado - fueron las últimas palabras de mi padre y hablando de mi madre tan solo recibí una disculpa vacía y un consejo tonto - intenta no traer a un bastardo al mundo - después me dio la espalda y siguió con su fiesta de té. <No importa qué, mantén la frente en alto, vive y muere con honor por tu gente> me dije a mí misma justificando tal injusticia.

Maglor, mi amigo de la infancia, hijo de una duquesa con bastante poder y en algún momento mi prometido; al escuchar las noticias puedo decir que lloró más que yo, durante mis últimos días en el palacio nunca se separó de mí, esos últimos días fui yo misma, lloré todo lo que necesité, jugamos como cuando éramos niños, nos olvidamos por completo de la etiqueta y del futuro que nos esperaba. Mi pensamiento más frecuente en esos días era <que bueno hubiera sido que nuestro destinos si se hubieran alcanzado>

Pronto las tropas del "Rey" llegaron sin aviso por la noche y no pude despedirme de él . El viaje en carruaje fue de varios días hacia el imperio, tuve que soportar su sed de sangre dirigida a mí cada segundo. Al llegar al palacio real me guiaron a un palacio anexo en el que pasé 10 años en los que me di cuenta que mantener el reino demoniaco no era para nada fácil ya que estos tienen necesidades fisiológicas relacionadas con la guerra me sentí como la mujer más suertuda al haber sobrevivido tanto tiempo en los territorios demoniacos y también por no haber conocido al emperador, no pude evitar sentir algo de respeto por el gobernante y su creatividad para que esas necesidades sean satisfechas sin la necesidad de involucrar a otras razas. Se creó una poción obligatoria para anular los sentimientos primitivos y las guerras cesaron pero no muchos estuvieron de acuerdo

Durante una de las muchas guerras internas, en medio de la noche, un hombre tocó las puertas del palacio abandonado. Estaba sangrando por todos lados pero aun así sostenía su espada. Lo calmé con mucha dificultad y lo curé, al siguiente día desapareció; pasaron unos meses y encontraba diversos regalos pequeños y grandes en frente de las puertas casi cada mañana hasta que lo atrapé,  era de noche así que fui directa y concisa

- Escucha, esto se esta volviendo molesto, sé que estas agradecido pero solo hice lo que cualquier persona hubiera hecho, creo que ya hiciste suficiente como agradecimiento así que espero no volver a encontrar algo en mi puerta... buenas noches - cerré las puertas sin dejarlo pronuncias una palabra y fui a dormir pasaron un par de meses y fui llamada por primera vez ante el emperador y para mi sorpresa era el mismo hombre tímido que mandaba regalos "anónimos", supuse que me iba a matar por la forma en la que le hablé pero no fue así

<¿Qué es esto? ¿Una novela para jovencitas insatisfechas con su vida?>

Una cosa que de verdad me sorprendió fue su personalidad fría pero no desinteresada, casi siempre me mandaba a llamar y yo, en busca de que el silencio no reinara en su oficina, le contaba bastantes cosas sobre mi vida y las que fueron en algún tiempo mis metas, hasta que le conté sobre Maglor en ese momento me sumergí en mis pensamientos y por primera vez el me interrumpió y  sugirió dar un paseo por el jardín, Ya no me sentía tan intimidada así que acepté

-Sabe, en realidad su majestad es bastante agradable

-¿Es así?

- Por supuesto

Pude haberlo evitado pero empecé a tener sentimientos por ese demonio y estaba segura de que él también tenía sentimientos por mí así que no me contuve y él tampoco.

- Actúa sumisa ante los demás, pero cuando estés conmigo puedes ser tú misma

Lo entendí de inmediato, para sobrevivir debía ser la esclava del emperador así que lo hice.

Pasaba barias noches con él solo para aparentar pero nunca me tocó sin mi consentimiento, él de verdad me había atrapado así que decidí pasar mis noches con él no solo aparentando. A la emperatriz en realidad no le importaba porque ella tenía su propio harem y ya había cumplido con su responsabilidad de engendrar un heredero.

 Meses después me di cuenta de que mi ciclo menstrual no había llegado, se lo dije y por unos segundos su expresión fue de alegría pero rápidamente se volvió oscura; no me di cuenta de cuando fue que llegamos al acuerdo de que si nacían mestizos no iban a sobrevivir y si nacían híbridos vivían para pelear por el trono. Pero que pasara lo que pasara yo no lo odiaría y él no me dejaría de amar, esa última parte mi hizo jurarla mientras nos acurrucábamos en su cama, con voz desesperada antes de quedarse dormido solo se escucho un pequeño susurro pidiéndome que no lo odie 

<amar y odiar son palabras con mucho peso>.  Cree un plan por si lo peor pasaba y me contacté con Maglor una vez más

Nació una hermosa bebe de cabello negro, ojos rojos y lo mas importante sus marcas de alas en la espalda que representaban a la realeza demoniaca, volví a sentir dolor y pujé con todas mis fuerzas, esta vez salió un bebé mucho más pequeño y débil de cabello plateado y ojos rojos pero sin la marca de las alas

- La ejecución se llevará a cabo en tres días

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