XVI

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En cuanto la bestia cayó, solo se escucharon las llamas titando en el lugar; un dolor punzante recorrió todo mi cuerpo

<Tuve suerte... no creo que se haya roto ningún hueso...mi cuerpo...se movió por sí solo>

Mis piernas no me soportaron más y caí de rodillas, en ese momento una manta tapó mi cabeza; Lea me me estaba cubriendo, el anillo había dejado de funcionar - Por favor no los mate, yo me haré cargo de la situación - la escuché susurrar

<¿Acaso me cree un monstruo? en este estado no po... aún así me duele el cuerpo, si puedo evitarlo lo voy a hacer>

- ¡Identifíquense! - escuché el grito venir del árbol

- ¡No queremos problemas! nos iremos si nos dan una de las extremidades superiores del nigrum 

- Eso no fue lo que pregunté

- Solo queremos lo que nos corresponde de la caza

- ¿Qué haces? - le susurré

-Lamento hacer esto sin su aprobación pero... no tenemos dinero - susurró de vuelta

<Aún así nosotros nos metimos con su presa... bueno evitamos que sean la presa, pero no creo que nos lo vayan a dar de buena gana>

- ¡Basta Aten! - El hombre de cabello amarillo salió de entre las llamas y se dirigió a nosotros envainando su espada, rápidamente escondí mis ojos y Lea se puso enfrente de mí con aura defensiva.

- Se la daremos, es lo mínimo que podemos hacer por nuestros salvadores <En ningún momento sentí su presencia hasta que lo vi...estos chicos son peligrosos>  No tenemos las herramientas para mutilarlo aquí, pero se lo podemos compensar con dinero en efectivo

- Por nosotros está bien, solo si es la cantidad adecuada por un nigrum de clase tres

- Les daremos 20 monedas de oro

-¡Espera! no recuerdo haber acordado eso - el hombre con el arco bajo del árbol con un brinco, llevaba una capucha  - No sé si lo recuerden pero fue mi flecha la que acabó con el animal, si así son las cosas ¿Por qué debería compartirlo de manera tan injusta?

- Fue gracias a estos niños que tu flecha pudo alcanzarlo

- No me refiero a los niño. No me estoy quejando de compartir las ganancias con los niños, me estoy quejando de compartirlas con otros cuatro integrantes que no hicieron nada.

<sigh, esto va a ser molesto>

- Es más, no creo que tengan tanto tiempo, ya que ha pasado un rato y no veo ninguna mejora en la condición de su compañera, además han agotado casi por completo sus reservas médicas estando en lo más profundo del bosque

Voltee a ver en dirección al cuerpo tendido en la tierra y noté las caras angustiadas y llorosas de los cazadores

- si hubieran investigado un poco más, sabrían que los nigrum tienen un veneno bastante doloroso en los ganchos de sus extremidades superiores... de hecho es muy utilizado para las famosas torturas demoniacas

<Eso es en verdad interesante>

Todos se pusieron pálidos ante tales declaraciones

- E..es mi culpa, debí detenerla a tiempo [buaaaaa] - casi gritó la otra cazadora con lágrimas y mocos en su cara

<Sin ese viejo de barba ahí podría ver la cara de la afectada y saber si es verdad lo de la tortura>

- La ciudad aún esta a unas horas de aquí así que seré considerado. Les daré el antídoto si acceden a entregarme por completo el animal y yo poder hacer negocios con estos maravillosos niños

- ¡Si!, te daremos todo lo que pidas - dijo la chillona escandalosa

- Ah, pero deben saber una cosa, si el veneno ha llegado muy lejos no servirá de nada así que no se enojen, al fin y al cabo ustedes quisieron venir hasta aquí con sus niveles de porquería

El de cabello amarillo mantuvo la cabeza baja y solo pude escuchar un sutil rechinido proveniente de su boca - Está bien

- Este sí es un buen trato - se acercó al cuerpo del animal, sacó su cuchillo y con una sonrisa en la cara lo apuñaló y sacó uno de sus ojos salpicando en toda su ropa la sangre

<Y pensar que no hace mucho quería ver eso de una niña elfa>

- Debo admitir que es una pérdida, ya que los ojos son muy costosos pero tómenlo como un regalo de mi parte - le entregó el ojo al viejo barbudo

- ¿Qué se supone que tengo que hacer con esto? - dijo el hombre tomando el ojo de la cuerda que se supone que lo conectaba con el cerebro

- Ah, jaja vuelve a abrir la herida y exprímelo...pero para eso ella debe estar despierta

- ¡Eso no tiene sentido!

- Si no está en estado alerta o mínimo consciente es probable que simplemente no vuelva a despertar aunque la sanen

<Gracias a todas las pociones de curación que utilizaron ni siquiera hay marca de la herida, ahora les está pidiendo que la vuelvan a abrir sabiendo que no les quedan más y lo mejor, mientras está despierta... que agradable sujeto>

- ¿Co..cómo la despertamos?

- Yo puedo ayudar en eso - les lanzó una jeringa con un líquido azul casi negro - esto es básicamente adrenalina alterada, una de las muchas creadas por los demonios para que sus juguetes duren más

Le inyectaron cuidadosamente el líquido y casi instantáneamente la chica gritó desesperadamente.

- Jareth, necesito que la tomes de las piernas - el rubio la tomó de las piernas mientras que el barbón de los brazos, la otra chica  sacó un pequeño cuchillo y empezó a deslizarlo por la espalda de su compañera que se retorcía y gritaba, sangre más oscura de lo normal empezó a escurrir 

Fue muy tarde cuando me di cuenta que mi rostro con una sonrisa sádica se reflejó en los ojos de Aten

Nací Como Un Híbrido BastardoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora