Unidos... |Trilogía Were Hunter #3

Prólogo.

Urías entro al cuarto del hospital con las pulsaciones a mil. No podía pensar como seria su vida si Ayel no estaba con él.
Había sido repentino la llamada que le llegó avisando que su amada había sido llevada al hospital.
Entrando junto a Gretel y Nick los tres vieron a Ayel en una cama un tanto pálida.

—Hola... —saludo Gretel  —¿Cómo te sientes?  —le preguntó

—Cansada y con sueño pero bien... —susurró

Urías se acerco a ella y le dejó un claro y delicado beso en la frente.

—¡Bien!  —unos destellos aparecieron en el cuarto y en medio de ellos apareció Archeron  —¿Dónde está mi sobrino?

Ayel sonrió  —La enfermera debería traerlo pronto.

Como si la invocarán una enfermera tocó la puerta y entró con un bebé en brazos.

—Señor Kontis.  —le hablo la enfermera a Urías  —Su bebé, felicidades señor es un
niño.

Urías tenia los ojos como platos mientras la enfermera le entregaba a su hijo antes de salir y dejarlos solos.

—¡Un niño! —Gretel se acerco para verlo  —¡Es hermoso!

Urías no lo podía creer, tenia en brazos a su hijo. Habían dicho que no deseaban saber el sexo hasta el día del parto.
Mientras lo contemplaba recordó cuando Ayel le confesó que al separarse pensaba que su alejamiento le daba mareos, pero al terminar en un hospital en Inglaterra descubrió que estaba embarazada.
Gracias a los dioses que no murió ella y el bebé cuando su padre le había atacado con la Phaser, ya que en ese momento tenia casi un mes de embarazo.
Apretando la mandíbula Urías recordó la impotencia que sintió cuando ella le contó.
Pero al mirar a su hijo sano y salvo sus rasgos se suavizaron.

Ayel tenia un nudo en la garganta mientras venia a Urías sostener con sumó cuidado y miedo a su hijo.
Podía claramente recordar cuando Urías le había dicho que se había encontrado con Lenny y Bride en el limbo y como había escuchado su voz
mientras le decía que debía regresar con ella porque iba a ser padre. Eso le dio la fuerza para regresar a su lado y al de su hijo. La comisura de sus ojos amenazaban con estallar en llanto al verlo mirar con asombro a su hijo.

—¿Cómo piensan llamarle? —preguntó Nick  —No me importaría compartir mi nombre. Después de todo sólo son para personas especiales y bellas.

Gretel puso los ojos en blanco. —En todo caso deberíamos llamarle Archeron.

Archeron se cruzo de brazos y miro a Nick irónicamente mientras levantaba una ceja.

Nick gruño —No es tan genial.

Ayel rio. —Tenia pensado ponerle Alexander David.

Archeron miro a Ayel y le sonrió —Me parece un nombre asombroso.

Urías asintió. —Alexander David será.

Urías le entrego su hijo a Archeron, pero en el momento que lo tomó un escalofrío lo recorrió por todo el cuerpo.

Joder siseo sin decir nada.

—¿Todo bien Archeron?  —preguntó Ayel

Él asintió —Si, es lindo como yo.

Todos rieron dejando atrás las preocupaciones que sólo Archeron sintió.

Algo malo se venía. Sin duda.