Cap 13

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—¿Pasa algo? —le preguntó a Ágata al verla pensativa.

—Me preguntaba... —susurro y luego negó —N-nada

—Ágata... Puedes decirme lo que sea. En serio, si puedo contestar tus dudas lo haré.

Ágata vacilo pero suspirando dijo —Me preguntaba si así se sentía ser humano.

El corazón se le encogió a Ayel al escuchar sus palabras.

—Eres humana Ágata. Como yo o Urías.

—Pero no nací siéndolo, toda mi vida seré un jaguar

—Eso no es cierto —Ayel le tomo de los hombros —Incluso un Katagaria puede ser más humano que un Arcadiano.

Ágata se sintió de alguna manera mucho mejor con esas palabras.

—¿Volveré a ser otra vez un Jaguar?

Ayel la soltó. —Si. No sé que te hizo cambiar pero puedes intentar volver a serlo.

—¿Cómo?

—Piensa que lo eres de nuevo, siente que tus orejas... —Ayel le jalo las suyas hacía arriba estirándoselas — ...Crecen. —Ágata sonrió —Imagínate que tienes cola de
nuevo y pelaje largo, pomposo y caluroso.

Ágata sonrió —Parece fácil

—La primera parte si, —explico —Si lo logras lo siguiente que tienes que hacer es permanecer pensando en tú forma de jaguar y concentrarte en que quieres permanecer así.

Ágata asintió. —Lo voy a intentar

—Bien, cierra los ojos. A veces esto ayuda a no distraerte.

Ágata obedeció.

Urías las miro mientras Ágata alzaba la vista el cielo y cerraba los ojos.

Ayel lo miro —Intentará volverse jaguar

Urías sonrió —Se que lo logrará

Ayel asintió. —Refresca a Alex, lo voy a bañar

Urías asintió.

Ágata respiro hondo y profundo. Se dejo llevar por el fresco del aire y el frío del agua.
Podía oler la humedad del bosque y sentir la calidez que desprendía el cuerpo de Ayel.
Se imagino de nuevo como un jaguar. Recordó cuando sus padres jugaban con ella en el bosque.
Recordó cuando la llevaban a cazar. Sintió una energía cruzar todo su cuerpo, desde los pies a la cabeza. De pronto se sintió más pesada. Sintió que se hundía.

Urías miro a Ágata volverse jaguar con destellos dorados.

Ágata abrió los ojos asombrada y solo vio como se hundía sin poder hacer nada.
De pronto sintió unas manos bajo sus axilas sujetándola y sacándola del agua.
Ayel aparto la cabeza cuando Ágata se sacudió para alejar el agua de su pelaje.

—Wow... —sonrió —¡Lo has conseguido! —Ayel miraba al cachorro que tenia entre sus manos. —Estás preciosa Ágata... Sólo trata de concentrarte para quedarte así. Ya si
quieres ser humana piensa en ellos, ¡Ah! Pero con ropa, sino solo serás humana. —río ella

Ágata veía todo más colorido, podía sentir el calor que emanaba de Ayel, así como su perfume a rosas y algo más. Incluso tenía aroma a bosque.

Unidos... |Trilogía Were Hunter #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora