Treinta y nueve

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Antes que nada, quiero aclarar lo siguiente:

Esta historia, a mi parecer y a comparación con otras que escribi, no tienen muchas escenas de delicioso. Entonces, como soy una puerca y amo a estos personajes, SON MI OTP QUE NUNCA SE HARA REALIDAD, decidí darles lo que tanto quería y estoy segura que ellos también.

Capitulo SUPER largo y con alto contenido +18 explicito. Bueno, solo son palabras pero creo que mi cerebro hizo corto circuito para escribirlo.

Sin más que decir, espero lo disfruten y si no les gusta leer este tipo de cosas, lo siento, pero es mi fantasía Y ES MI HISTORIA Y HAGO LO QUE QUIERO


Con amor, Pushel

Extra

-¡Ya llegué!- Grite al momento de abrir la puerta

-Estoy en la cocina- Fue la respuesta de Marco

Me quite los zapatos y camine hacia el, estaba lavando algunos platos. Llevaba puesto su delantal verde y unos guantes de plásticos, se veía demasiado gracioso.

-Pareces empleado de Starbucks- Dije riendo mientras dejaba un beso en su mejilla

-Idiota, deja de burlarte o haré que te vistas igual

Volví a reír y después fui a la habitación para cambiar mi ropa. Había traído un poco para quedarme a dormir el fin de semana. Todavía no vivíamos juntos, habíamos acordado tomarnos un poco de tiempo. No queríamos precipitar las cosas, esta vez sería con calma y paciencia.

Aunque ya habían pasado 6 meses, y yo quería hacer otras cosas con Marco.

Me había convertido en un pervertido que se masturbaba a escondidas en el baño de su novio. Tan patético.

Suspiré con cansancio y después de cambiarme fui a ver a Marco, había terminado de limpiar y se había quitado su horrible delantal, aunque la imagen mental de Marco desnudo solo con el no era tan mala.

-¿Comiste algo?- Me preguntó mientras se sentaba en la sala

-Si, antes de venir- Le respondí siguiéndolo

-¿Cómo te fue hoy?- Pregunto acomodándose.

Sus largas piernas se acomodaron sobre las mías, con su espalda apoyada en el reposabrazos. Mis manos acariciaron sus piernas, empezando a darle pequeños masajes.

-Acabo de cerrar un trato así que el trabajo estará tranquilo, lo agradezco porque ya no soportaba a mi cliente- Dije con cansancio- Era tan... ¡Estresante!

-Aunque necesitas muy poco para desesperarte- Comento riendo- ¡Auch!

-¿Te duelen?- Pregunté apretando un poco más debajo de sus piernas

-Un poco, no puedo seguir el ritmo de Sasha- Dijo, su expresión era de dolor- No dejes que vuelva a salir con ella, camina demasiado

-Te has vuelto demasiado flojo, creo que hasta engordaste- Dije en broma

-¡Eso no es verdad!- Respondió molesto- Mi peso está perfectamente bien desde que regrese. ¡Tengo músculos!

-Si los tienes, pero engordaste, solo mira tus piernas- Dije para molestarlo

-¡No es cierto!, ¡Mira esto!- Levanto su camisa y ahí estaban, sus músculos formados y delineados, aunque un pequeño bulto se formaba debajo de ellos

-Sip, ahí está- Dije con una sonrisa- Eso cariño, es grasa

Use mi dedo para presionar el área, mientras el golpeaba mi mano con un puchero. Sus mejillas se sonrojaron con molestia y me incline para besarlo, deje varios besos en sus mejillas infladas y poco a poco sonrió, sujetando mi rostro contra el suyo. Mi mano se apoyo sobre su abdomen, su camisa seguía un poco levantada. Podía sentir el calor que emanaba su cuerpo, me concentre en solo besarlo pero el movió sus piernas.

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