-Te dije que estoy bien, no tienes que venir todos los días- Me queje con Armin cuando llegó
-Solo es precaución- Dijo sentándose en el sillón
-No haré nada Armin, tengo que trabajar
-¿Seguro que estás bien?- Me preguntó, todavía se sentía culpable por lo que sucedió
-Si Armin, estoy bien- Me acerque a el y me senté a su lado- Le prometí que iba a estar bien
-Todavía no puedo creer que se fuera...
-Lo sé, pero tenía que hacerlo- Dije convencido
Habían pasado dos semanas desde que Marco se había ido. Mi casa volvía a estar silenciosa, volvía a estar solo. Las risas que compartí con Marco solo eran un recuerdo, ya no estaba en casa para esperarme. Se sentía vacío, encendía la televisión solo para tener ruido de fondo, y no sentirme tan mal. Armin venía a verme pero solo durante un rato, el tenía cosas que hacer.
Después de que Marco se fue, los chicos poco a poco se enteraron de nuestra relación, no estaban tan sorprendidos como pensé y al igual que Armin, al principio pensaron que únicamente estaba confundiendo mis sentimientos. Me tomo más de dos horas convencerlos que no era así, y aún después de eso, dijeron que Marco había echo bien en irse. El necesitaba ser egoísta por una vez en su vida y hacer lo que quisiera, sin pensar en mi
-Esta cerca su aniversario- Dije después de un momento
-Si... Faltan algunos días- Dijo Armin en voz baja- ¿Estarás bien?
-Deja de tratarme como si estuviera enfermo, estoy perfectamente bien Armin- Dije con un poco cansado- Soy diferente ahora, soy fuerte. No echaré a perder todo lo que ya logré
-Lo siento- Respondió apenado
-Si realmente lo sientes, tienes que hacerme un favor- Pedí tocando su cabeza
-¿Qué cosa?
-Necesito hablar con Eren, creo que ya llegó la hora
-Eso es imposible
-No, tu te encargarás de citarlo en algún lugar y yo dejaré que me golpee
-Eso no es una buena idea
-Lo sé, pero es la única que se me ocurre
Me dijo que lo haría, así que unos días después me prepare para decirle todo a Eren, para pedirle perdón. Era justo.
Cuando llegue, suspiré nervioso y entre a la cafetería. Armin me había dicho que habían llegado hace 30 minutos y Eren estaba tranquilo. Por si acaso, Armin iba a llamar a Levi por precaución, aunque no creía necesitarlo.
Camine entre las mesas con paso lento, hasta llegar a la esquina, en el fondo, donde los vi sentados. Eren estaba de espaldas a mi, asi que aproveche para acercarme lo más que pude antes de hablarle.
-...Eren- Pronuncie su nombre de forma lenta, todo su cuerpo se tenso en cuanto me escucho
-Me voy- Le dijo a Armin que internivo tomando sus manos
-Por favor espera, solo escúchalo unos minutos- Pidió nervioso- Por favor, tiene algo que decirte
Eren no me miro pero volvió a sentarse, Armin me cedió su lugar y me senté frente a el, su cara se veía diferente a como lo recordaba. Estaba llena de odio y dolor, no quería ni si quiera mirarme.
-No voy a pedirte perdón- Comencé diciendo, eso lo hizo mirarme enojado
-¿De esto querías hablar?, ¿Entonces que haces aquí?
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Amargo
RandomPor favor solo dale una oportunidad a la historia, además soy mala poner descripciones de mis historias y mucho más ponerles nombres