𝕋𝕖𝕟í𝕒𝕤 𝕢𝕦𝕖 𝕤𝕖𝕣 𝕥ú...♧♡[{𝔾𝕖𝕠𝕣𝕘𝕖 𝕎𝕖𝕒𝕤𝕝𝕖𝕪 𝕪 𝕥ú}] ♡♧

•☆13☆•

                                                     Presentes

- Señorita Morel!!

Se escuchó un grito dentro del carruaje para después abrirse bruscamente la puerta de entrada.

- Tengo un mensaje muy importante para usted!!- exclamó una de las prefectas de la academia Beauxbatons que habían ido en compañía de Madame Maxime.

Al notar la presencia de la señorita, George y tú se separaron bruscamente quedando un poco apenados ante la situación...excepto por sus manos que todavía seguían tomadas la una de la otra.

- Qué sucede Agnès?- le respondiste sin soltar la mano de George.

- Es un mensaje de su madre señorita, les ha mandado algunos presentes a usted y a su hermana los cuales he dejado en su habitación de cada una, junto con una carta que era de suma importancia y parecía urgente...- explicó Agnès un poco apurada.

- Ahhh de acuerdo Agnès, gracias, en un momento voy- le respondiste dulcemente.

- Claro señorita, como guste- respondió Agnès para después volver a entrar al carruaje.

Tú y George había quedado un poco incómodos por la situación...aunque seguían tomados de la mano.

Los dos solo se miraban riendo con cierta incomodidad, hasta que te acercaste a George dándole un beso en su mejilla, muy cerca de su boca...lo cual provocó que él se sonrojara.

- Te veo mañana George...- le dijiste mientras reías.

George no soltó tu mano hasta que se acercó a tu mejilla y dejó un dulce beso tal y como tú lo habías hecho.

Las mariposas en tu estómago parecían a punto de explotar junto con la sensación de que tus mejillas ardían intensamente...

- Te veo mañana _____...- respondió George para después soltar tu mano suavemente y dirigirse al castillo.

Tú solo lo observaste irse...como en un especie de trance, el cuál desapareció cuando el entro al castillo y las palabras de Agnès volvieron a tu cabeza...

"Es un mensaje de su madre señorita, les ha mandado algunos presentes a usted y a su hermana los cuales he dejado en su habitación de cada una, junto con una carta que era de suma importancia y parecía urgente..."

¿Qué iba a ser tan urgente para que tu madre te mandara una carta si llevaban apenas unos cuantos día fuera?

Al reaccionar, entraste rápidamente al carruaje y te dirijiste a tu dormitorio.

Al llegar y abrir la puerta, te encontraste con una pila de cajas en tu cama...bastante grande...varias de ellas acomodadas en el piso por la falta de espacio en la cama.

Y esa carta especial estaba atorada en el marco del espejo de tu tocador.

En el frente de esta venía firmada con la siguiente frase:

" – De Jean Delacour
– Para _____ Morel Delacour"

De inmediato pusiste el seguro de la puerta, prendiste la luz de tu habitación, cerraste la cortina de la ventana y tomaste la carta.

No sabías si abrirla ya que algo de todo esto no parecía marchar bien...sabias  que su madre no solía mandar cartas a menos de que fuera algo realmente importante.

Pasaron unos minutos hasta que tomaste el valor suficiente y decidiste abrir el sello de cera que llevaba aquél sobre de papel viejo y amarillento.