𝕋𝕖𝕟í𝕒𝕤 𝕢𝕦𝕖 𝕤𝕖𝕣 𝕥ú...♧♡[{𝔾𝕖𝕠𝕣𝕘𝕖 𝕎𝕖𝕒𝕤𝕝𝕖𝕪 𝕪 𝕥ú}] ♡♧

~☆20☆~

                                                   Habitación

Después de haber caminado por unos pasillos, George ya había llegado a la sala común de Gryffindor...

Al llegar, mientras George subía las escaleras de caracol hechas de piedra que dirigían hacia los dormitorios...tú comenzaste a recuperar la conciencia.

- Dónde estamos George?- le preguntaste aún débil.

- Tranquila...aquí nadie podrá hacerte daño...- te respondió George mientras pasaban por un pasillo lleno de puertas a sus costados.

La respuesta de George te tranquilizó, ya nunca te había sucedido esto...así que estabas asustada y confundida, solo querías cerrar tus ojos para dormirte profundamente y olvidar las imágenes del momento tan traumático que no paraban de rondar en tu cabeza.

Unos instantes después ambos estabas frente a una puerta...no tenía nada en especial que no tuvieran las otras.

Cuando entraron supiste que era el cuarto de los gemelos, esta estaba llena de cajas con productos para realizar  bromas.

Tú observaste el cuarto mientras George entraba contigo en brazos cuidando que no golpeara tu cabeza ni tus pies.

Al entrar, George se dirigió a una de las camas y te dejó en ella cuidadosamente.

- Gracias Georgie...- le dijiste mientras le dabas una sonrisa algo forzada, ya que no querías llorar en frente de él.

Él solo asintió y se agachó en frente tuyo y comenzó a desabrochar tus tacones.

- Es mejor que duermas, estás cansada...- te dijo George mientras dejaba ambos zapatos a un lado de la cama.

- Pero...- le ibas a responder pero él te interrumpió.

- No te preocupes, yo voy a estar aquí todo el tiempo...te voy a cuidar para que puedas dormir a gusto- replicó George mientras te ayudaba a recostarte y te tapaba con las cobijas de la cama.

Cuando terminó de arroparte se dirigió hacia un rincón, el te iba a dejar dormir en su cama mientras él te cuidaba sentado en una de las sillas de la habitación...pero antes de que pudiera ir a acomodar la silla...tú tomaste su mano haciendo que se detuviera para voltear a verte.

Tus ojos involuntariamente dejaron escapar varias lágrimas rebeldes...tenías miedo y no querías que George se apartara de ti...ni aunque fuera unos metros.

- Puedes quedarte conmigo?- le preguntaste mientras intentabas limpiar tus lágrimas que corrían desbocadas por tus mejillas.

El corazón en el pecho de George se encogió, le dolía verte así...

Así que no lo pensó dos veces y rodeó la cama para acostarse a un lado tuyo, el quiso evitar el contacto físico para que no te sintieras incómoda.

Pero al momento en el que sentiste a George a tu lado, te volteaste hacia él y lo abrazaste mientras escondías tu cabeza en su pecho.

George te hacía sentir a salvo...sabías que él nunca haría algo para lastimarte de esa manera.

Por su lado, el corazón de George latió fuertemente en su pecho...sabía que estabas asustada y que te sentías herida...

Y el hecho de que encontrarás seguridad en él, lo hizo sentir mariposas en el estómago...por primera vez en mucho tiempo.

Al ver tu acción, el te rodeó con sus brazos dándote un abrazo cálido y dulce...el cual te hizo sentir segura de nuevo.

Unos momentos después, ambos estaban sumidos en un sueño muy profundo...mientras seguían abrazados el uno del otro...