4. Parte 2

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Las clases del día dieron por terminada una vez que la última finalizó con el timbre de salida.

Cada alumno varió en su camino fuera del establecimiento o yendo a sus correspondientes casilleros para quitar o dejar alguna pertenencia, y Kyungsoo, no era la excepción.

—Maldición.

Masculló cuando abrió su casillero, cerrando los ojos para darse un golpe a propósito al costado de la puerta, soltando un suspiro de resignación. Se estaba regañando por ser un completo tarado, porque no podía creer que había hecho algo improvisado como para no pensar en sus responsabilidades y generar más habladurías en el alumnado.

—Vamos, Soo~ —habló Chanyeol a su izquierda, animandole—. Es cordial de tu parte querer hacerlo, pero cancelar no le hará ningún mal a nadie. Salvo que Joohyun y Sooyoung del solo enterarse te hagan besar el suelo o la lagartija del laboratorio.

Se quejó en un bajo gruñido rodando los ojos. Por un segundo se arrepintió, maldiciendo a sus compañeras; quienes agregaron que no se salvaría de nada si no cumplía algo tan sencillo.

¡Y vaya uno a saber qué tenían planeado! Porque, con sinceridad, hubiera preferido cualquier cosa aunque temiera por lo que mencionó Chanyeol.

Horas atrás, antes que el receso se dé por terminado, con la inquietud corriendo por su sistema y el valor para demostrar que no era ningún fracasado, dejó en claro que una invitación como esta podría sonar ridícula. No obstante, Sooyoung y Joohyun le esbozaron que no pusiera excusas; que en realidad, esto sería una buena acción de su parte con "El hermano de Sangjoon".

Mentalmente se repitió que era una tontería fácil de hacer pese a tratarse de una invitación algo antipática.

Las piernas de Kyungsoo se movieron con las suficientes ganas hasta llegar al sitio donde un grupo de estudiantes estaba con aquel muchacho que era su compañero. Sentados en una de las mesas de afuera de la cafetería. Kyungsoo pareció dispuesto a soltar las primeras palabras, pero todo se detuvo en cuanto obtuvo la atención de "El hermano de Sangjoon" y los demás que giraron la cabeza con curiosidad hacia su cuerpo inmovil.

Su compañero quien permaneció sentado con la cabeza inclinada hacia arriba, lo miró algo sorprendido. Pero cambió su semblante y le regaló una curvatura de labios; reconociéndolo.

Kyungsoo tragó saliva. Su repentina tensión le produjo un ligero sudor en la nuca, y algo confuso por ese efecto, apretando los labios para dar su siguiente acción ante la espera y expectativa de los demás, debido a un equilibrado y repentino saludo de interrupción que alcanzó a decir.

—Hola...

—...¿Todo bien, Kyungsoo? —dijo "El hermano de Sangjoon".

El nombrado creyó que su tono poseía una pizca de timidez y soltura con esa amable sonrisa. Una articulación balanceada como para no dejarlo hablando solo.

—Si. Disculpa si te interrumpí... Yo... Venía para... Oye, puede que esto suene raro...—comenzó sobandose el mentón.

—¿Necesitas algo?

—Uhm, si...y no. Bueno, depende de cómo quieras verlo.

Debido a su respuesta, se produjo una ronca risita por parte de su compañero y unas miradas divertidas de los otros. Incluido el propio Kim Sangjoon.

—...Te escucho.

—Bueno, para serte franco, se trata de un reto... ¿Ves a esos idiotas que están allá? —se inclinó apuntando con su dedo hacia la ronda de los chicos luego de pensarlo un segundo, tomando seguridad y porte chulesco. Chanyeol, Baekhyun y los demás, se removieron exagerados por la llamada de atención e intentaron esconderse entre sí. "El hermano de Sangjoon" asintió divertido por tal imágen—. Ellos me impusieron un reto y si no cumplo, probablemente reciba un batido de huevo y harina en mi cabeza.

Fue lo primero que se le ocurrió.

—Oh, ¿en serio?

—Si. ¿Aceptarías una merienda o cualquier cosa que quieras comer después de la escuela? Yo invito.

Las bocas de los que estaban allí, se abrieron de par en par mirándose entre sí con alguna sonrisilla juguetona, y para agregar, un silbido coqueto de burla provocando risotadas avivó una pesadez.

El propio Kim Sangjoon ignorando las babosadas de los demás, también se sorprendió: —Wah~ ¡Kyungsoo, sí que eres un adorable chico! —por eso decidió exclamar esto con una de sus típicas sonrisas guiñando un ojo.

Más risas se escucharon y Kyungsoo no supo cómo sentirse de repente. La verdad no esperaba eso por parte de Kim SangJoon, pero viendo y considerando cómo se tornó la situación, cualquier porquería podría esperar de ese "simple chico". Tampoco es como si lo viera un santo pichón por ser un halagado deportista.

Mientras tanto, "El hermano de Sangjoon" guardó silencio por un momento, observando, hasta que miró de vuelta hacia la señalada ronda, pensando otra vez, y finalizar dando su aceptación con movimiento de cabeza.

—Claro; acepto.

No está demás decir que la respuesta, le produjo un alivio a Kyungsoo para coincidir y alejarse cuanto antes de aquella camada. Había que admitir que fue un momento incómodo, aunque no lo suficiente como para resentirse y odiar a "los destacados".

El verdadero problema surgió al percatarse de un detalle importante.

Kyungsoo no tenía la intención de que fuese una mentira. Mucho menos una burla. Porque ninguna de las dos acciones se trataba.

Olvidó que hoy era viernes a parte de ser uno muy singular. Precisamente los días que empiezan con V, saliendo de la escuela, tenía clases de natación. Y ahora con un anzuelo al cuello, debía ingeniárselas para no dejar tan mal parado a "El Hermano de SangJoon".

De vuelta en su sitio recordando el hecho, tomó su pequeña bolsa que portaba lo necesario y la botella de agua que comúnmente dejaba, seguido de cerrar su casillero con fuerza.

Caminó junto a Chanyeol compartiendo unas breves palabras, mientras se fijaron si sus compañeras merodeaban por ahí en el camino. Y para cuando llegaron al portón de salida, se dieron cuenta que ellas estaban al frente. Quién los viera, pensaría que eran un par de idiotas dejándose llevar por las camufladas palabras de unas muchachitas que no sabían más que tener ocurrencias estúpidas de sus fantasías. Sin embargo, por más que se tratara de un juego a cumplir un reto, realizarlo, para Kyungsoo, hablaba mucho de cómo llevabas o llevarías tu vida.

Y no era el único quien lo pensaba así...

—Eres inteligente, amigo. No por nada tienes una cabeza de huevo como la mía —dijo sonriente Chanyeol, en un furtivo movimiento para remover los cabellos de Kyungsoo—. No te preocupes tanto.

Y este no hizo más que rezongar quitando su mano. El grandote le palmeó divertido la espalda seguido de despedirse en cuanto vieron a "El hermano de Sangjoon" acercarse y distinguir de reojo cómo Kim Sangjoon permaneció en la otra esquina hablando con su estimado grupo de amigos, mientras los ojos curiosos de otros estudiantes fijados en ambos.

Pero el "El hermano de Sangjoon", a pesar de su timidez e ignorando la vista de los demás, se animó a dar un sutil gesto facial como saludo y preguntar con las manos en los bolsillos:

—...¿Tienes pensado a dónde ir?

Discreto. Tímido. Y valiente.

—La verdad, no.

—Quizá... Si te parece, podríamos ir a la cafetería de la quinta avenida.

Aunque las manos de "El hermano de Sangjoon" estaban en los bolsillos de su pantalón escolar, hacía calor. Un ligero rubor se percibía en sus mejillas junto al sudor en los costados de su frente a pesar de llevar una remera.

—Qué dices. ¿Vamos?

Kyungsoo se sintió por primera vez terriblemente avergonzado por no responderle de inmediato. Tenían la vista fija de muchos sobre ellos. Por lo tanto, optó responder en una suave confirmación y decirle que mejor fueran por el otro camino.

Excusándose y yendo por el lado contrario al que "El hermano de Sangjoon" propuso.

Caminaron unas cuadras en un silencio sonoro de las calles, hasta alejarse lo suficiente de la escuela para que Kyungsoo le hablara con más comodidad; precisamente, en la parada del bus que debía tomar para a ir a su clase de natación.

El Hermano de Sang Joon © || EXO/KaiSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora