La total destrucción de Desembarco del Rey llevó a la cruda decisión de matar a Daenerys Targaryen. Con ella la casa del dragón se extinguía y una nueva era llegaba. Según el Consejo de Nobles el elegido para asumir el trono no era otro que Brandon...
Los guardias sacaron a Aerys a rastras mientras gritaba y maldecía a Daenerys, a Jon y a los demás. Daenerys dio la orden y dos inmaculados fueron a por Bran y lo lanzaron por las escaleras hasta caer frente a sus pies, estos bajaron las escaleras y lo volvieron a levantar para encontrarse cara a cara. Esos ojos violetas llenos de dolor, ira y fuego contra esos ojos negros que solo expresaban malicia, oscuridad y alegría por lo sucedido. Bran empezó a reír al ver como estaba Daenerys y esta le dio un puñetazo con su guantelete. Se vio como salía un poco de sangre de la boca de Bran pero para él ese golpe no significaba nada, era como si no hubiera sentido el dolor.
- Que le has hecho a mi hijo?- preguntó Daenerys.
- Jajajajaja te lo diré, simplemente le di una pócima que contenía varios ingredientes especiales.- dijo Bran.
- Control mental- dijo Jon acercándose a él y levantándole el cuello de sus ropajes- como se rompe?
- No se rompe, Aerys Targaryen está muerto- dijo Bran riendo.
- Voy a matarte por esto- dijo Daenerys colérica desenvainando su espada y acercándose a él.
- Adelante, hazlo, incluso con mi muerte te he vencido. Te he quitado todo aquello que amas, tu amante, a Aerys. Matándome me convertirás en un mártir. Matándome harás que Torrhen, mi hijo, os odie por siempre.- dijo Bran sonriendo.
- Cállate- grito Jon dándole un fuerte puñetazo en el estómago a Bran.
- He tenido una visión- dijo Bran recuperando el aliento pero riendo- mi estandarte ondeando en Desembarco del Rey, mi hijo Torrhen sentado en mi trono, y vuestros cráneos expuestos en el Gran Salón mientras los Siete Reinos lo vitorean y se burlan de vosotros- dijo Bran.
- Daenerys levanto su espada para asestar el golpe final pero Kinvara la detuvo- no creáis sus palabras, es un sirviente del Gran Otro, un sirviente del Mal, permitidme descubrir la verdad.
- Hazlo, pero quiero que sufra- dijo Daenerys.
- No podrá ser de otra manera- dijo Kinvara.
Hombres de la Mano de Fuego cogieron a Bran y se lo llevaron, seguidos de Kinvara y varias de sus sacerdotisas. Daenerys abandonó la sala del trono, necesitaba estar sola después de lo sucedido, Jon fue tras ella. Mientras marchaba por los pasillos vio como los inmaculados formaban una gran fila por toda la Fortaleza. Finalmente Jon alcanzó a Daenerys y la cogió del brazo, cuando esta quiso soltarse casi sin mirarlo la cogió con más fuerza, esto hizo que Daenerys desenvainara su espada y los inmaculados que estaban allí apuntaran con sus lanzas a Jon.
- Vuelve a tocarme y te mato- dijo Daenerys, Jon vio el fuego en sus ojos violetas.
- No dejes que te consuma el odio, eso es lo que Bran quiere, no repitas los errores del pasado!!
- Si pierdo a Aerys no tengo nada, lo entiendes, nada!!- dijo Daenerys y envaino su espadas y los inmaculados levantaron sus lanzas.
- Crees que no siento ira. Nada me gustaría más que arrancarle el corazón con mis propias manos pero no podemos, al menos hasta saber la verdad.- dijo Jon.
Daenerys sin decir nada se marchó, dejando a Jon con la palabra en la boca. Abandonó la Fortaleza Roja, a sus puertas se encontraba Drogon, subió a lomos del dragón y emprendió el vuelo. Mientras surcaba la ciudad podía escuchar los gritos de la gente y como corrían en todas direcciones muertos de miedo. Una parte de ella deseaba callarles con una simple Dracarys pero aunque la ira la estaba consumiendo recordaba las palabras dichas a Brienne, recordaba todo lo que le había enseñado a Aerys. De actuar así, no sería la madre que Aerys merecía.
Mientras en lo más profundo de la Fortaleza Roja Kinvara y las sacerdotisas lo estaban preparando todo, un gran altar de piedra con la silueta de unas llamas grabadas en la roca, el blasón de R'hllor, alrededor de estar se encontraba cuatro braseros, situados uno en cada extremo. Llevaron a Bran hasta allí, lo tumbaron sobre el altar y lo encadenaron de manos y pies. Había cuatro sacerdotisas por brasero, dos más que cogían con fuerza las cadenas y Kinvara sería aquella que intentaría entrar en la mente de Bran. Kinvara se hizo un pequeño corte en el dedo y marco la frente de Bran con su sangre. Acto seguido las sacerdotisas empezaron a recitar palabras en valyrio, las llamas de los braseros crecieron y empezaron a crepitar, las sacerdotisas que sujetaban las cadenas hicieron que estas se volviesen naranjas y empezasen a quemar la piel de Bran. Kinvara sujeto la cabeza de Bran y cuando su gema empezó a brillar con un tono naranja y con la intensidad del fuego Bran empezó a gritar. Los gritos se escuchaban por todos los rincones de la Fortaleza Roja, se estaba librando una gran batalla pero Bran no permitiría que accediesen a su mente. Tras horas de tortura Kinvara no consiguió acceder y algunas de sus hermanas murieron porque su poder se consumió. Bran con su rostro lleno de sudor y sintiendo mucho dolor sonreía.
- Eres muy fuerte- dijo Bran- pero yo también. No conseguirás nada.
- Ya lo veremos- dijo Kinvara agotada, al poner su mano en la nariz vio que estaba sangrando.
Agotada se marchó, durante los días siguientes la tortura prosiguió. Esto era una partida entre la Luz y la Oscuridad. Entre el bien y el mal. Entre R'hllor y el Gran Otro. Una partida que nunca tenía final y ahora ellos eran sus representantes en la tierra. Muchas sacerdotisas murieron a causa de Bran. Tras veinte días de torturas constantes finalmente Kinvara pudo entrar por unos instantes a la mente de Bran pero este rápidamente consiguió sacarla de allí.
- Ya he visto todo lo que necesito.- dijo Kinvara sonriendo- He ganado.
Mientras Kinvara se marchaba escuchaba tras ella los gritos de ira de Bran. Fue corriendo hasta encontrar a Daenerys y Jon, marchaban hacia una reunión con los demás líderes pero al verla se detuvieron.
- Lo he conseguido- dijo Kinvara, su rostro marcaba el cansancio.
- Y bien?- preguntó Daenerys.
- Bran dijo que le hizo tomar una poción que los controlaba, pero solo los controla él. Porque? Porque esa pócima esta imbuida de su poder, su poder reside en los arcianos, aquí hay un bosque de arcianos. Ese es el ingrediente secreto.
- La resina de los arcianos- dijo Jon.
- Exacto-dijo Kinvara- cuando he accedido a la mente de Bran he visto los arcinaos, esa era la clave.
- Puede revertirlo?- preguntó Daenerys.
- Si conseguimos la resina líquida y el señor de luz me proporciona el poder puedo revertir sus efectos.- dijo Kinvara.
- Entonces hazlo, ve- dijo Daenerys.
Kinvara abandonó la fortaleza con varios soldados y salió al galope hacia el bosque de arcianos. En ese momento y sin Kinvara para detenerlo Bran intento un último acto, consumiendo lo poco de poder que le quedaba tras todo el día de tortura tomo el control de las personas que vivían cerca del bosque y les dio la orden de encender antorchas y prenderle fuego antes de que llegara Kinvara. Ahora se trataba de ver quien llegaba primero.
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Mientras escribía como preparaban las sacerdotisas rojas todo lo necesario para el ritual/tortura, mientras se realizaba, mientras hablaban los personajes entre sí, en cada gritó escuchaba la canción de Lord of Light. Aquí os dejo el enlace.
