El Rey Cuervo y la Reina Dragón - Libro 1

Capítulo 17

Alejado de Desembarco del Rey Davos veía como las naves se preparaban para la larga travesía. Zarparían en dos días hacia Naath. Davos no entendía las decisiones del rey pero estaba dispuesto a obedecer. Su reinado era próspero y productivo, en los juicios era firme pero justo. Un buen hasta la fecha. Escuchó el sonido de los cascos y el relinche de un caballo tras él pero ni siquiera se dignó a girarse. Pues estaba esperando visita. El encapuchado descabalgó y se acercó a él poniéndose a su lado.

- Te ha seguido alguien?- preguntó Davos.

- Se esconderme a plena vista recuerdas- se quitó la capucha y el rostro que había bajo ella era el de Gendry.

- Mira...- dijo Davos y Gendry vio el despliege de fuerzas- en dos zarpamos.

- A dónde?- preguntó Gendry.

- Naath – respondió Davos.

- Entonces es cierto, la quema del templo de Volantis, el ataque a Yara y ahora marcháis sobre Naath. Daenerys vive- dijo Gendry.

- Si- dijo Davos.

- A ella le debo mi señorío, fue quien me legítimo- dijo Gendry.

- Ahora entiendes el porqué de la visita de Arya- dijo Davos.

- Lo entiendo y porque Bran me quiere de su lado.- dijo Gendry.

- Solo los Siete Reinos juntos pueden vencer a Daenerys.- dijo Davos.

- Acaso es una amenaza? No crees que si ha regresado querrá estar lejos de aquí, vivir su vida, apartarse de esta tierra y sus problemas- dijo Gendry.

- Es posible, pero el rey Bran se está asegurando de que no sea una amenaza en el futuro. No le ataca a ella sino a sus aliados, evitando una posible invasión.

- Entonces estas a favor de sus planes- dijo Gendry.

- Ni a favor, ni en contra. Estoy cansado de lo mismo de siempre Gendry, deseo la paz y si esto puede asegurarla sea.

- Porque estoy aquí Davos.

- Sabías que Bran marchó al Norte?- preguntó Davos

- No- respondió Bran- Arya solo dijo que era la emisaria de su hermano.

- Fue al Norte a hablar con Sansa.- dijo Davos.

- Es la reina en el Norte y su hermana, no me extraña- dijo Gendry.

- Debería- dijo Davos.

- Porque? Sobre qué hablaron?- preguntó Gendry.

- Sobre muchas cosas. Muchas no son de tu incumbencia. Pero hay una que sí porque te afecta a ti.- dijo Davos sorprendiendo a Gendry.

- A mí, de que se trata- dijo Gendry.

- Gendry, el rey Bran desea que te cases con su hermana Sansa- dijo Davos.

Gendry se quedó sorprendido con la noticia y también se enfadó. Quien era Bran pero entrometerse con su vida, para jugar con su futuro. Él no deseaba desposarse, al menos por el momento. Y mucho menos con Sansa, teniendo en cuenta como terminó su relación con Arya. Tampoco sería agradable para Sansa, ella pensaría lo mismo que él, estaba seguro. Ya había sido una marioneta en el Juego de Tronos.

- Desgraciado- maldijo Gendry.

- Es un matrimonio de conveniencia- dijo Davos.

- Si, sobre todo para él. Envió a Arya sabiendo ya mi respuesta. Acaso Sansa no ha sufrido bastante, digamos que no ha tenido suerte con sus esposos. Ella está de acuerdo?- dijo Gendry.

- No lo sé, es la verdad- dijo Davos.

- Y que hay de mí?- dijo Gendry.

- Arya dijo que no, y siempre dirá no, supéralo.- dijo Davos- La unión Baratheon y Stark que deseaban vuestros padres no fue Joffrey y Sansa, ni Arya y tú. Pero si tal vez si sea Sansa y Gendry.

- Me trae sin cuidado lo que querían ellos. No los conocía. Yo forjo mi destino no ellos, no Bran.- dijo Gendry.

- Davos suspiró- te entiendo, de verdad que sí.

- Si me casará con ella Bran me tendría atado de pies y manos. Seríamos familia y por lo tanto debería ayudarle me guste o no.- dijo Gendry mostrando su enfado.

- Eso sin tener en cuenta que Sansa lo apoya. No podrías darle la espalda a tu mujer y a tu rey.- dijo Davos.

- No lo haré.- dijo Gendry dándose la vuelta y volviendo a su montura.

- Escúchame- dijo Davos.

- No lo haré!! – le respondió Gendry.

- Escúchame!! Por favor- dijo Davos haciendo que Gendry se detuviese y Davos se acercó a él.- Bran es el rey, pero no vivirá siempre, es un tullido que no puede tener descendencia y ninguna mujer de alta o baja cuna se casaría con él.

- Cuando el rey muera, dentro de muchos años el consejo de nobles de Poniente elegirá un nuevo rey.- dijo Gendry.

- Con sus movimientos Bran no solo asegura el futuro del reino sino el de la sucesión. Para Bran, Sansa es la única esperanza de tener un heredero.- dijo Davos.

- Para eso serviría cualquier señor norteño.- dijo Gendry.

- Pero Sansa no quiere, sabe que en el momento que acepte perderá la corona del Norte. Pero tú no eres así, no eres ambicioso, no quieres la corona. Al casarte con ella se afianza su posición en el Norte, Stark y Baratheon unidos, quien se dignaría a enfrentarse a ellos.- dijo Davos.

- Como tu as dicho, no quiero la corona.- dijo Gendry y se subió a su caballo pero Davos cogió las riendas del animal.

- Y esa tú mayor virtud, tú no te as criado entre algodones, conoces los problemas reales de la gente. El mayor beneficiario de esa unión no es Sansa, ni Bran sino tú. También afianzas tu posición, no solo en las Tierras de la Tormenta, sino en el Norte. Sansa te necesita más que tú a ella. Y vuestro hijo, no solo sería el Rey en el Norte y el Señor de Bastión de Tormentas. Sería el heredero de Bran y por consiguiente el futuro rey. Sería el único capaz de unir de nuevo los Siete Reinos.- dijo Davos.

- Bran es ambicioso y Sansa también- dijo Gendry.

- Pero no la conoces. Te aprecio como un hijo lo sabes muchacho.- dijo Davos.

- Lo sé.- le respondió Gendry.

- Siempre he velado por ti y tus intereses.- dijo Davos.

- Lo sé, nunca lo he puesto en duda.- dijo Gendry.

- Pues déjame ayudarte otra vez. Organizaré un encuentro antes de irme en tu nombre. Conócela, no hay prisa, paso a paso. Y si cuando lo hagas hay algo que no te guste lo dejamos estar, de acuerdo?- dijo Davos.

- De acuerdo.- dijo Gendry dándose por vencido.

En ese momento Davos le devolvió las riendas a Gendry y este se marchó al galope dejando solo a Davos allí, con sus pensamientos.