El Rey Cuervo y la Reina Dragón - Libro 1

Capítulo 29

Tras escuchar a los hombres y hablar con ellos Dalus regresó a la habitación. Al entrar pudo ver a Arya en la cama, despierta, con los ojos llenos de lágrimas. Dalus simplemente se acostó a su lado y la abrazó con fuerza, intentando consolarla pues había escuchado la historia completa de Gendry y eso incluía la relación que tuvo con ARYA en el pasado.

- Lo siento Arya. Yo no lo conocía pero por como hablan las gentes del Norte de él era un gran hombre- dijo Dalus.

- Era un buen rey, un marido y padre aún mejores y mi mejor amigo- dijo Arya.

- Dalus se quedó en silencio escuchando a Arya.

- Mañana Sansa partirá al sur en busca de justicia, recuperará las tierras de la tormenta y luego marchará sobre la capital.- dijo Arya.

- Y tú que harás? Se ve que quieres acompañarla.- dijo Dalus.

- Voy a llevar a Aerys con su padre, no se lo entregaré a Bran después de lo que ha hecho, y no puedo dejarle solo en Invernalia, si descubriesen quién es podrían ir contra él. El Norte no aprecia a los Targaryen.- dijo Arya.

- Llevarlo con su padre no será una tarea larga. Una vez este a salvo que harás?- preguntó Dalus.

- Arya se quedó en silencio.

- Quieres venganza y lo entiendo, se lo que significaba Gendry para vosotros pero al igual que Sansa tiene el deber de vengar a su marido y el deber de salvar sus reinos, tú tienes el deber de gobernar el tuyo. Llevamos más de un año fuera, es hora de regresar.- dijo Dalus.

- Yara se está encargando.- dijo Arya.

- Yara Greyjoy se está escondiendo mientras se recupera. Yara Greyjoy no es la reina de Druantia, tú sí.- dijo Dalus.

- En el momento que Bran vea que no le entregó a Aerys me buscará, me encontrará y vendrá a por mí.- dijo Arya.

- Tú puedes vencer a cualquiera que envié Bran y nosotros podemos ayudarte, para eso tú eres la reina y nosotros los súbditos. Lucharíamos y moriríamos por ti si nos lo pidieses.- dijo Dalus firmemente.

- Arya apenada acarició el rostro de Dalus- No arriesgaré sus vidas en una guerra que no les afecta, no les haré luchar en un continente que ni siquiera sabían que existía.- dijo Dalus.

- Entonces?- preguntó Dalus

- Entonces llevaré a Aerys con su padre para que sepa la verdad, si luego quiere regresar con su madre Jon le ayudará, estoy segura. Ayudaré a Sansa a acabar con Bran y cuando todo termine volveremos para nunca regresar. Te lo prometo.- dijo Arya aferrándose a él.

Siguieron hablando un poco más hasta que Arya se quedó dormida. Todas las emociones vividas en esos momentos la hicieron soñar, directamente hacia el pasado, varios años atrás. Estaba en la cubierta de su barco, hacía cinco meses que había avisado a Bran de que Daenerys marchaba a Meereen y ella volvió al Oeste de Poniente, al Oeste del Mar del Ocaso. Deseaba seguir navegando por esas aguas. El sol calentaba la piel y la brisa del mar hacia que el barco fuese rápido. La tripulación trabajaba en cubierta pero también se divertían hasta que el marinero que estaba en la cofa de vigía gritaba tierra a la vista. En ese momento Arya salió de su camarote y Dalus le indicó con el dedo, entonces Arya pudo ver a los lejos esa nueva tierra, una sensación de alegría y emoción crecieron en su pecho, marcaron el rumbo y de dirigieron hacia allí.

Llevaron el barco lo más cerca de la costa y cuando no pudieron avanzar más usaron los botes. Mientras remaban hacia tierra vieron a gente en la arena un instante antes de que salieran corriendo, la tierra está habitada <eso es algo bueno> pensó Arya. Cuando llegaron a tierra siguieron las huellas hasta llegar a una pequeña aldea, las construcciones eran muy similares a las suyas pero las condiciones eran deplorables, puertas y ventanas estaban cerradas, por mucho que llamaban no les habrían, tenían mucho miedo y Arya no sabía porque. Siguieron andando una semana más hasta llegar a otra aldea y a un gran castillo, el paisaje del trayecto le parecía hermoso, un lugar lleno de árboles que no conocía, de flores con aromas que jamás había olido y con abundante caza.