Lo doloroso de amar parte 2

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Y así empezó su relación, de inicio Diro estaba muy entusiasmado, y para bajar un poco ese entusiasmo, Santino hacia que aprendiera varias cosas al respecto de la universidad, le había dicho que no se quedara solo con lo que la escuela le enseñara, él también tenia que tener la iniciativa de aprender cosas por su cuenta, y el trabajo era un gran aliado en eso, le enseñaba a Diro cosas sobre el manejo de la organización, de lo cual el menor siempre tomaba nota para aprender todo lo que Santino le enseñaba. Cuando salían a comer o por un café, Santino no perdia tiempo y preguntaba al menor por cosas relativas a la organización o a la universidad, Diro lo sabia y estaba preparado.. Sabia cual seria su recompensa si contestaba bien lo que Santino preguntara... Asi pasaron los meses, Y después de un tiempo, Diro aprovechaba toda oportunidad de estar con Santino a solas, donde fuera, pero Santino trataba de hacer todo lo contrario, se había dado cuenta del error que cometió al darle alas a un niño como Diro, era por demás muy inteligente, seria un gran miembro de la organización, aprendía rápido y gustaba de poner atención a lo que todos le enseñaban pero, sabia que sus actitudes para con él lo iban a delatar en algún momento y eso no le convenía porque ... Santino había omitido contarle un gran detalle al menor, y antes de que lo descubriera, él se lo diría ... con eso en mente, no le quedaba mas que reunirse con el menor para aclarar las cosas.

Era un sábado y Diro recibió un mensaje de texto -Hola Diro, como estas? Me gustaría que fuéramos a comer , paso por ti a las 5:00pm. Diro (con ojitos de corazón) se apresuro a contestar . (tecleo) - Hollooo!!! claro que si, te espero , emojis, emojis... Estaba muy emocionado, casi no salían a comer o por un café, estos meses solo se había conformado con que Santino diario (o casi diario, de unas semanas a la fecha) lo fuera a dejar a casa, pasando antes de llegar a aquel parque donde le dio su primer beso, Diro se había esforzado por complacer al mayor, sabia que su estilo de vida era diferente al suyo, el prácticamente era un niño a su lado, la diferencia de edad era un factor (Santino le llevaba 10 años) así que procuraba que el mayor estuviera a gusto los pocos momentos que pasaban a solas, solo con ver su sonrisa , Diro era el mas feliz del mundo... Así que se alisto para poder ver a Santino para comer.

Habían ido a un restaurante italiano, a Diro le gusta mucho la pasta, platicaron de cosas triviales y algo de trabajo... - Diro, necesito decirte algo, dijo Santino mirándolo a los ojos. -Ya no voy a poder llevarte diario a tu casa, es que ... me ha salido un trabajo por fuera y me quiero apurar a él y... -Yo te puedo ayudar Santino! nada me gustaría mas que ayudarte, dijo Diro con ojitos de borrego a medio morir. -No Diro, no lo hare solo, lo hare con otro compañero de la universidad, él me ofreció el trabajo para poder apoyarlo. Y dándole una sonrisa a Diro le dijo. -No te preocupes, tratare se sacarlo lo mas rápido posible. Pero el menor había desviado la mirada, y se notaba molesto. - Como quieras, fue lo único que atino a decir Diro, estaba celoso, realmente celoso... un amigo? cual amigo? no le dijo ni el nombre... pero sabia que el restaurante no era lugar para un interrogatorio y, en realidad, si hacia una rabieta Santino acabaría molestándose, y era lo ultimo que quería. -Nos podemos ir? dijo el menor, Santino asintió, pidió la cuenta, pago y salieron del lugar.

Demonios de un Alma atormentadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora