I Want Love ©

#Capitulo 38

#Capitulo 38

Me giré dudosa y Perséfone estaba recargada en la pared detrás de mi, con una uña en la boca, daba una vibra venenosa cargando una bata negra, ojos delineados color negro, cientos de anillos de plata en las manos, su cabello era intensamente rojo como el fuego, sus ojos eran oscuros aún mas que los míos, pero su piel era pálida como la nieve, tenía una posición muy dominante, la tensión en el aire se intensificó. Las dos nos admiramos la una a la otra por un largo tiempo.

-¿Qué haces tu aquí?- Quebré el silencio, ¡Bravo! No pudiste haber dicho algo mejor ______, debía ser inteligente si quería actuar, la verdad es que me hallaba en un trance de shock, mi hermana perdida que no sabía de su existencia desde hace tres semanas y que se supone que no debía conocer pero conocí por primera vez en un sueño en el que se adentró a mi mente dejándome una marca en el brazo, señal de que su odio hacia mí, en el combo incluía que me habían otorgado un don que le pertenecía continuando con la historia que después de tres días fue secuestrada por Hades y llevada al infra mundo y no ser recuperada por Padre o regresada al Olimpo dejándole un gran trauma de su infancia, siendo mal influenciada por el hermano de mi Padre y actualmente siendo la mujer del infra mundo formando uno de los secretos más oscuros de mi padre, sí era algo desconcertante...

-¿Ni siquiera un "hola"?- se miraba divertida, ella lo disfrutaba... yo no, al parecer no se miraba tensa, ni siquiera le sorprendía tenerme al frente, tal vez no era lo suficiente interesante. Sus alas no estaban...

-¿Qué quieres? La ultima vez que me visitaste me cediste un recuerdo- tomé de mi brazo y le enseñe la marca, ella era de la misma altura que yo, no miraba sus zapatos ni pies...

-¡Huy!- frunció el ceño -Culpas a la persona equivocada- se cruzó de brazos, le gustaba hacer gestos, lo siento pero me es imposible no analizarla -Yo no te hice eso- me miró tentadora. Si no fue ella... ¿Fue... Loan? Miente.

-Te esperaba más intimidante... menos divertida... más inteligente... y más linda- me crucé de brazos, no pensaba atacarla, en realidad pensaba eso, ella solo fruncía el ceño divertida.

-¿Que esperabas? Soy tu hermana- me miró a los ojos, me estaba respondiendo rápido, tiene prisa y yo no tengo tiempo de pensar. -Y yo que creí que serías más madura- torcí los ojos ante su comentario, no estaba para insultos, ella era la que estaba buscando a la otra, era lo mínimo que merecía por hacerme arder en llamas.

-¿Por qué vienes aquí? ¿Por qué ahora? ¿Por qué no antes? ¿Ya se te despojó la cobardía y decidiste visitarme en la vida real?- me crucé de brazos, me sentía a la defensiva, me estaba alterando, quería golpearla y no tenía motivos.

-¿Alguna vez te has puesto a pensar que tal vez estas arriesgando todo por ese amorío tuyo...- hablo con desinterés, como si fuera una broma, un simple capricho, una bobada de niños -y que tal vez Zayn ni siquiera te ama- se cruzó de brazos, sin duda alguna sabía quien era él.

Reí, aunque no estaba nada feliz -¿Viniste desde el infra mundo para aparecerte en un insignificante elevador solo para insinuarme que Zayn no me ama?- alcé las cejas, ella me observaba encantada como si fuese cayendo directo en la trampa.

-Querida... no son insinuaciones, él no te ama- me miró profundamente a los ojos.

Podía sentir la tensión en el ambiente, la adrenalina, el coraje, la ira, todos los sentimientos reencontrados, el cielo y el infierno reunidos en dos metros por cuatro. ¿Miedo? Para nada... Ella y yo teníamos cuentas por arreglar.

-¿Cómo estas tan segura?- enserio, creí que me diría algo más importante.

-No cree en el amor, no siente nada por ti, ¿Acaso crees que él te va a tratar diferente como lo hace con las demás? Eres una "chica" más en su lista- se cruzó de brazos. Suspiré.