Capitulo 19

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Hinata estaba en un punto sin retorno, donde ya no podía reconocer sus sentimientos. Al principio pensó que solo sentía algo por el Uchiha debido a lo poco que pasaba con su esposo y que estaba confundida, por lo que se centró en su marido, pasando momentos familiares, y todo era hermoso, mas su corazón no lo sentia así y más de una vez se sorprendió a si misma queriendo que la presencia no sea rubia sino azabache. No lo quería, ni iba, a admitir que día a día su corazón anhelaba al Uchiha, que ese pequeño sentimiento se hacia notar a cada minuto, haciéndola dudar del tamaño de este. El sentimiento era seguro, y lo sabía, así que del miedo se alejó de Sasuke. Le dolió, demasiado, pero tenía que hacerlo, pensaba que así, tal vez y se olvidaba de él.

  Por su parte Sasuke se sentía horrible, sentía que había arruinado todo, y qué había alejado a la persona que comenzaba a amar. Más de una vez intento encontrarse con la peliazul, pero su mala suerte se le reía en la cara, y nunca la pudo ver. Así pasaron 2 semanas, 2 semanas de sufrimiento para el azabache, pero tenía que ser fuerte y seguir intentándolo.

[...]

  Durante estas 2 semanas la ojiperla no pudo llevar a pasear a Boruto y eso estaba volviendo loco al menor, por lo que, sin poder evitarlo, fueron al parque, uno diferente al que iban antes, uno incluso más lejos, pero para la conciencia de la Uzumaki era lo mejor, o iba a terminar pensando en una persona en la que no debería de pensar. En el camino el pequeño se la paso saltando emocionado ya que realmente extrañaba pasear, al igual que a la familia Uchiha, a la cual no sabía el porqué pero no los había visto en mucho tiempo, para su tristeza.

  A penas llegaron al parque, Boruto se fue corriendo a los juego y Hinata se sentó en una banca cerca de él. Realmente no quería pensar por lo que se había llevado algo de lana y sus agujas para poder tejer mientras su pequeño se divertía, tal vez y así podría obtener un poco de paz después de 2 semanas. Pensaba en tejer una bufanda para su pequeño de color naranja, mas al ver que, también, tenía lana roja, su mente no pudo evitar pensar en cierta pequeña Uchiha, por lo que decidió que a ella también le iba a hacer una. No sabía si iba a poder dársela, ya que no podía ver al padre de esta, pero aún así la había empezado a hacer, tratando de transmitir todo el amor que había logrado robarle a su corazón. Se sentía mal al no ver a la pequeña, hasta la extrañaba, pero su miedo era más fuerte, todavía no estaba preparada para ver al Uchiha, que se estaba calando en su corazón, y aceptar este hecho. Mientras pensaba en Sarada, su celular comenzó a sonar, asustandola un poco. Dejo en su regazo lo que comenzaba a verse como un rectángulito de lana, y contesto el teléfono.

_¿Si?

_¿Hinata dónde estás?

La voz sería pero amable de su primo se hizo presente.

_Oh, Neji... Vine a un parque con Boruto

  La peliazul escuchó un suspiro del otro lado de la línea.

_Se olvido de que teníamos que pasar por Boruto

No era una pregunta, y tenía toda la razón, se había olvidado completamente.

_Lo lamento tanto, lo olvidé

Hinata estaba muy apenada y sonrojada, por lo que sin darse cuenta ya estaba haciendo reverencias al aire, una tras otra.

_No pasa nada, solo dígame dónde está

_Estamos en el parque XXXXX

_Esta bien

Y antes de que su primo colgará, hablo.

_Neji, yo... lo lamento mucho

Por su parte, Neji solo sonrió.

_Realmente no pasa nada, iremos enseguida

Y así se colgó la llamada.

  El tener tanto en su mente la había hecho olvidarse de varias cosas, pero está había sido la primera que afectaba a alguien más, y se sentía mal por eso. Si bien, no afectaba en mucho, aún así la hacia sentir mal.

[...En otro lado...]

Sasuke se encontraba en el parque de siempre con Sarada, intentándolo de nuevo, tratando de encontrar a personas que parecían haber desaparecido de la faz de la tierra. Sin darse cuenta Sarada estaba en la misma tarea que él, durante ese tiempo donde no estuvo con Boruto y Hinata, se había sentido sola, a pesar de estar con su madre, y no le gusto para nada, por lo que siempre que salía con su padre trataba de buscarlos de alguna manera. Pero nada, ninguno encontró nada, por lo que cansados y tristes, decidieron volver a su hogar, mas Sasuke no quería ir a su casa, y como no había nadie, decidió dejar a Sarada con Mikoto y pasear un poco, necesitaba un respiro.

[...Volviendo con Hinata...]

  Neji había aparecido junto a Tenten en su auto y se llevó a Boruto, se habían ofrecido en llevarla también, pero no quería molestarlos, además de que quería quedarse un rato más, le había gustado ese parque para tejer. Y así pasó un tiempo tejiendo, y cuando decidió volver a su hogar, pudo ver a los pocos pequeños que estaban ahí jugando; ese parque era realmente muy tranquilo, y poco transitado, por lo que pudo ver perfectamente cuando unas melenas rubia y rosa, se encontraban paseando delante suyo, sin percatarse de su existencia, y ella reconociéndolos al instante, al igual que se rompía su corazón.

[...Con Sasuke...]

Estaba manejando a ningún lado, solo dejándose llevar. Sus emociones las tenía a flor de piel, por lo que pensó que era una ilusión de su mente, una de tantas otras, cuando observó una cabellera azulada que tanto podría reconocer, pero cuando se percató de que realmente no era ninguna ilusión, estacionó su auto y corrió tratando que aquella persona no desaparezca de vuelta, porque ya no lo soportaría, de milagro había soportado solo 2 semanas.

Cuando logró estar cerca de ella, la agarró de la muñeca, tratando que así no pueda escaparse; y al darla vuelta, solo pudo sorprenderse al ver las lágrimas correr por sus mejillas.

_Sasuke...

  Su voz estaba rota, y parecía que salían incluso más lágrimas de sus ojos, al verlo.

_¿Qué pasó?

Trato de ver dónde ella miraba momentos antes de darla vuelta, pero ella se interpuso.

_Yo... Lo siento tanto

  Lo miró, y sin poder contenerse más, se lanzó a sus brazos, necesitaba de esa calidez que le transmitía, necesitaba que la abrazara y le dijera que todo iba a estar bien. Sasuke la rodeó con sus brazos, y al alzar la vista, lo vio, Sakura y Naruto besándose... Hinata lo sabía, ya no tenía los ojos vendados, oficialmente sabía toda la verdad... Sasuke, la abrazo más fuerte, tratando de consolarla, de hacerla sentir su presencia y que no estaba sola. Tarde o temprano ella iba a saber la verdad, pero verla llorando lo había hecho sentirse peor de lo que había imaginado. Una vez ella se calmó un poco, la llevo a su auto y condujo lo más lejos posible...
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Hola ¿Cómo están? Espero que bien. Capitulo después de solo una semana, hace mucho que no pasa eso, parece un milagro ¿No? Bueno espero que les guste :3

Nos vemos

Pd: esto de escribir mensajitos, al final de la historia, me está empezando a gustar, así que espero que no les moleste :)

La Familia del Otro ˢᵃˢᵘʰⁱⁿᵃDonde viven las historias. Descúbrelo ahora