Capitulo 27

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El campo de batalla estaba desecho, solo quedaban restos, y los soldados Sasuke, Itachi e Izumi, estaban en su límite, dando, recibiendo y contraatacando. Y en medio de todo eso estaba la pobre Hinata que no entendía nada e inocentemente veía todo lo dicho por la pareja Uchiha con buenas intenciones.

_Los niños se estan quedando dormidos sentados, deberían ir a su casa

Y ahí estaba ese Sasuke amable que ya los estaba asustando con cada presencia, pero solo por no estar acostumbrados, debido a que después de eso seguía siendo tan malvado como siempre. Los había dejado en jaque varias veces con ese tono de voz, pero ellos nunca se rindieron e hicieron lo mismo.

_Creo que Otouto tiene razón

Los adultos vieron a los pequeños, que estaban en el sillón, los cuales estaban sentados mientras que sus cabezas caían al quedarse dormidos, para luego reaccionar y que volviera a pasar lo mismo.

Itachi alzó a su pequeño, Hinata acostó a los suyos, para poder despedirse de los invitados.

Una vez los cuatros estaban en el comedor, comenzaron su camino hacia la puerta del departamento.

Tanto la castaña como el azabache estaban afuera; Hinata y Sasuke estaban en la puerta.

_Ya deseo que sea domingo Hina

Izumi le sonrió, y la nombrada hizo lo mismo.

_Yo también, va a ser muy divertido.... Ah y gracias por lo consejos

Izumi le guiño un ojo a su querido, amado cuñado.

_No es nada, pero acuérdate, Sasuke igual a sucio, sus pedos igual a horrible, te quedas sin nariz, y hacelo bañar, a veces no quiere los fin de semanas

La mayor suspiró, he hizo una cara de asco.

_Espero que nunca tengas que soportar sus berrinches por no bañarse... Ah y que no sea haga el menso y coma verduras

Hinata asentía, mientras se hacía una lista mental.

Por su parte el más joven de los azabaches estaba pensando cómo podía ocultar un cadáver. Tal vez con ácido, o lo entierro en diferentes partes, o-

Sus pensamientos fueron cortados al sentir la mano de la ojiluna agarrando la suya.

Él la miró sorprendido.

_¿Estás bien? Estás algo callado e Izumi se está despidiendo

Miró por un segundo sus manos unidas, y luego la miró a ella. Es que esa mujer era hermosa, en todos los sentidos habidos y por haber. Con ese pensamiento no evitó que se le saliera una pequeña sonrisa, pequeña pero hermosa, que hizo que las mejillas de Hinata se volvieran rojas.

_Estoy bien

Miró hacia la castaña, que estaba como viejita viendo una novela, solo le faltaban palomitas.

_Nos vemos

_Nos vemos cuñadito

Y ambos se sonrieron.

_Sasuke

El nombrado miró a su hermano, el cual se había mantenido bastante callado desde que habían salido.

_¿Qué?

_Quieron hablar contigo... A solas

Y esa era la señas de las chicas para desaparecer.

La castaña agarró a su pequeño y le dijo, a su Uchiha, que lo esperaba en el auto. La peliazul le dijo que se iba a acomodar algo a su Uchiha.

Hinata al entrar cerró la puerta, y ambos hombres se quedaron en el pasillo.

La Familia del Otro ˢᵃˢᵘʰⁱⁿᵃDonde viven las historias. Descúbrelo ahora