Capitulo 34

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  Al día siguiente Sasuke les había pedido de favor a todos que no vallan a la hora de la visita para que así puedan estar solos los 4; los demás no se negaron ya que pensaban que sería lo mejor ya que necesitaban de un momento familiar después de tantos problemas. Además de que se rumoreaba que algo había pasado entre el Uchiha y la Hyuga... Cosa obvia si te pones a pensar en toda la química que desprendían solo con respirar uno al lado del otro, eso más el hecho de que los niños gritaban a los 4 vientos algo sobre un "te amo" y un "yo también te amo", que terminaba siendo confirmado por la castaña.

  Pero bueno, como siempre algunos planes no salen como uno espera por lo que el Uchiha junto a sus pequeños estaban llegando tarde. Mientras que Hinata los esperaba ansiosa al saber de toda la movida que hizo el azabache para que puedan estar juntos, obvio todo contado por la agente de espionaje más cofiable, Tenten, mano derecha de la ojiperla para el chisme, en otras palabras.

  En la espera por su familia Hinata se encuentra pensando los últimos acontecimientos, realmente todo había dado un giro 360° en su vida y si era sincera jamás pensó que sería tan bueno, pero bueno no todo es perfecto ¿Verdad? Y es que si se ponía a pensar no había recibido noticias de Naruto desde aquel día en el parque y no es como si quisiera realmente saber algo sobre él, pero es que ni siquiera los papeles de divorcio habían sido firmados por él, o al menos nunca le llegaron... Y lo mismo iba para la pelirosa quien tampoco hacia acto de presencia. De más está decir que eso es muy sospechoso y le estaba dando un sentimiento de mala espina, sentía que algo iba a pasar y cuanta razón tenía...

  La puerta de su habitación fue abierta, sacándola de sus pensamientos, al igual que poniendo una sonrisa instantánea en su rostro al pensar que al fin su familia había llegado, pero no, ellos no habían sido los que abrieron la puerta sino 2 personas que habían estado en sus pensamientos.

_¿Naruto?

_Hey Hina

  Por alguna razón le dió miedo ese saludo.

El saludo no tenía nada "diferente", solo era un alegre saludo por parte del rubio, pero de alguna manera no lo sentía así y más si ponía atención a la sonrisa falsa con la que la ojiverde la miraba.

Mientras tanto la pelirosa no podía actuar mejor al tener a la desgraciada que se robó a su esposo e hija, porque ella hizo eso, o al menos según ella.

_¿Q-Qué hacen acá?

  Okey, si te ponías a pensar esto era muy sospechoso, más que antes y eso la aterraba porque no sabía cuanto tardaría Sasuke en llegar, además de que llegaría con los niños y por obvias razones, por ahora, no los quería cerca de esa pareja.

_Solo vinimos a ver como estas, escuchamos del accidente y nos preocupamos

  Dijo la Haruno "amablemente" mientras se acercaba a la camilla donde se encontraba la peliazul.

_Exacto Hina, además eres mi esposa por lo que es mi deber estar al lado tuyo

  El rubio dio la vuelta a la camilla, haciendo que Sakura quedará de un lado y él del otro.

Mi esposa...
MI ESPOSA...
MI DE MÍO
ESPOSA DE ESPOSA, DE CASAMIENTO..

Por favor que alguien salve a la pobre ojiluna que no sabe cómo reaccionar ante semejantes 2 palabras.

_Naruto... Yo... ya te mandé los papeles de divorcio, ya no es tu deber estar aquí

Él la miró y ese miedo que sentía de hizo más fuerte.

  Por su parte Naruto trataba de mantener la calma delante de su preciosa y amada esposa. Porque ella legalmente lo seguía siendo, él nunca firmo los papeles... Bueno, tampoco los podría firmar debido a que ahora eran cenizas, pero eso no viene al caso, la situación es de que la preciosa ojiluna le acaba de decir que no era su deber cuando claramente lo era, osea él dejó a Sakura por ella... Bueno, dejar ¿Qué es dejar? Un concepto muy amplio, pero la cosa es que "lo hizo" y como lo hizo pues no hay motivos para que se separen, es lógico, él la ama y ella a él, aunque ahora ande con ideas en la cabeza que cierto Uchiha le metió, pero no era nada que no pueda solucionar con un poco de contacto con la peliazul.

La Familia del Otro ˢᵃˢᵘʰⁱⁿᵃDonde viven las historias. Descúbrelo ahora