Saeron tuvo que viajar a Japón por dos meses por temas de trabajo, por lo que no podía hablar seguido con su novio o pasar tiempo juntos.
La supuesta mejor amiga de la castaña se acercó a Hoseok. Todo comenzó como una amistad, pero aquella chica pelirroja tenía segundas intenciones. Comenzó a insinuarse de manera seguida, recibiendo un rechazo por parte del pelinegro, pero un día, por desconocidas razones, Hoseok cedió. Empezó con un beso, el cual se empezó intensificar y ya todos sabemos que ocurrió después.
En un principio sintió culpa. ¿Porqué había hecho eso? La siguiente vez, la culpa empezó a desaparecer, la tercera vez ni siquiera se acordó de su novia. ¿Qué es la culpa? Solo disfrutaba con alguien que estaba en el país y no a kilómetros de distancia.
Saeron lo llamaba. Él respondía diciendo que estaba ocupado, que estaba prácticando o componiendo, que en ese momento no podía hablar, siendo que estaba con aquella chica que lo había vuelto loco, al menos, en el ámbito sexual.
Los dos meses pasaron. Saeron llegó y esperaba que su novio fuera por ella, pero no apareció. Llamó a uno de los chicos, Seokjin, preguntándole si podía ir por ella al aeropuerto. Él aceptó gustoso y llegó al recinto en menos de media hora.
Jin la llevó al hogar de Bangtan para que pasara un tiempo con ellos. La castaña aceptó. No veía hace mucho tiempo a los chicos.
La tarde pasó entre risas, bromas, largas y profundas charlas, haciendo que Saeron olvidara la tristeza que sintió durante esos dos meses fuera del país.
La chica fue a su departamento. Entró y lo primero que vio fue a su novio sentado en el sofá con la que decía ser su mejor amiga sentada sobre él. Ambos sin una prenda de ropa.
–¿Qué diablos? –Susurró, llamando la atención de Hoseok y Jiyu.
–Sae...–Soltó Hoseok, mirando a su novia con preocupación.
Jiyu por su parte, se levantó y vistió con rapidez, teniendo lo intención de irse.
Saeron bloqueó la puerta y miró a la pelirroja.
–No puedo creer que te atreviste a hacer esto –Susurró la castaña con la voz entrecortada. –Te conté todo, lo insegura que me sentí en el inico, cuanto amaba a Hoseok, lo feliz que él me hacía y te importó una mierda
–Déjame decirte que desde que lo conocí me atrae, no es mi culpa que haya preferido a una buena para nada en vez de a mí. Yo le puedo dar todo lo que tú no
–Vete de aquí, vete de mi vida –Espetó con molestia. –No te atrevas a acercarte a mí
Jiyu salió rápidamente y sin culpa alguna. La castaña cerró la puerta de golpe y miró a quien decía amarla incondicionalmente.
–¿Y tú? ¿Esto es lo que te mantenía tan ocupado que no podías decirme ni un "Hola"?
–Saeron, yo..
–Cállate –Soltó. –Me sentí como la mierda estos dos meses pensando que no querías hablar conmigo, me preguntaba si había hecho algo mal...y todo eso por esa estúpida
–No estabas en Corea y pues...necesito a alguien que me complazca –Hoseok se excusó.
–Déjame decirte que tú vas a giras mundiales por más de tres meses, y yo también necesito que alguien me de placer, pero yo nunca pensé en conocer a alguien, respeté tu lugar –La castaña contenía sus lágrimas y evitaba mirar al chico frente a ella. –Cuando fuiste a Estados Unidos a grabar el vídeo con Becky, tampoco pensé en tener algo con alguno de los chicos. Yo si respeté la relación, ¿porqué tú no pudiste?
