Capítulo cuarenta y cuatro.

207 5 0
                                    

Subí rápidamente a mi auto, y fuí en dirección al departamento de Christopher, cuando llegué a la entrada del edificio, Chris se subió lo más rápido que pudo.

- ¿Has hablado con él? -Preguntó y negué.

- Me llamo para preguntarme que hacer y quejarse porque Karla no dejaba de Gritarle -Sonreí, mi mejor amiga estaba a horas de traer a Valerie al mundo.

- Yo lo escuché muy nervioso -Dijo Christopher.

- Y con razón, va a nacer su hija.

- Debe ser lindo -Lo mire unos segundos.

- ¿Qué cosa?

- Tener un hijo, enseñarle cosas, regañarlos, culparlos de travesuras -Dijo Chris y no pude evitar sonreír.

- ¿Te gustaría tener hijos? -Pregunté curiosa.

- Claro, sé que con mi carrera será un poco difícil, pero me gustaría que después de llegar de gira, me estén esperando en casa -Lo mire unos segundos y su mirada estaba perdida por la ventana -Asi como Joel en unas semanas -Terminó por decir.

Mierda, el aún no recupera la memoria, y si lo hace... ¿Va a querer hijos?, nunca me vi con una pequeña criatura en brazos, y ahora que lo pienso si sería lindo.. aunque sería mejor aún si Christopher me recordara y me ayudara a cumplir su meta de vida.

Llegamos al hospital y bajamos rápidamente del auto, al entrar preguntamos por mi mejor amiga y luego corrimos por los pasillos.

- ¿Dijeron algo? -Me acerqué a Zabdiel y Belén.

- Joel entró recién a la sala de parto -Dios, estos nervios me volverán loca.

Pasaban y pasaban las horas y nadie salía a decir como estaba Karla, o Valerie... a cada enfermera que salía le preguntaba pero la respuesta siempre era la misma "No tenemos información aún", ¿Cómo no van a tener información si vienen de la sala donde se encontraba mi mejor amiga.

Christopher estuvo a mi lado en todo momento, aunque sé que también estaba nervioso por su mejor amigo.

De pronto sentí como el corazón se me aceleraba, Joel se asomó por la puerta y sonrió.

- ¡SOY PAPÁ! -Gritó y todo nos pusimos a aplaudir, estaba muy contenta me lancé a los brazos de Chris y estos me acogieron perfectamente, sentí como dejó un beso en mi cabeza y me separé de él.

- ¿Cómo está Karla? -Me acerqué a Joel y lo abracé -Felicidades cuñado.

- Gracias mi niña, y está bien, cansada pero bien..

- Necesito verla -Miré sobre sus hombros hacia dentro del pasillo pero no se veía nada.

- Aún le están haciendo exámenes, pero si quieres puedes pasar a ver a tu ahijada, de hecho ambos pueden pasar -Volteé y miré a Chris, este asintió y seguimos a Joel.

Entramos a una habitación, al parecer Valerie no era la única aquí, habían al rededor de 8 bebés, llegamos a donde se detuvo Joel y mi vista se posó en esa hermosa niña, que tenía la mirada perdida en el techo.

- Hola preciosa -Tomé a la pequeña Valerie en brazos y esta me miró.

Sin duda me dejo cautivada por sus ojos, esos color verde que derrochan ternura.

- Eres igual a tu mami, por suerte -Sentí un pequeño golpe y supuse que había sido Joel.

- Tiene mi nariz -Respondió mi cuñado.

- Espero que solo eso -Sonreí al escuchar a Christopher.

Puse a la bebé cargada en mi hombro y comencé a moverme, acaricie su espalda y deje caer mi cabeza sobre ella, sin cargarla.

- Te ves bien, con la niña en brazos -Volteé mi vista y Chris me miraba con una sonrisa.

- ¿Tu crees?, ¿Estoy lista para ser mamá? -Sonreí burlona.

- Más que linda, lista, perdón estás más que lista..

- ¿Quieres cargar a tu ahijada? -Pregunté.

- Si, claro -Con cuidado separé a Valerié de mi y la dejé en brazos de Christopher.

Noté como a se comenzaba a Cristalizar los ojos del hombre que amo, una gran sonrisa se apoderó de su rostro y me la contagió.

Pasó su mano por el rostro de la pequeña y esta tomó uno de sus dedos, Christopher no despegaba su vista de Valerie y ella de él.

- Le caíste bien -Habló Joel a mis espaldas.

- Claro, ya verás cuando esté más grande, va a quererme más a mi que a ti -Christopher miro a Joel.

- Cuando ella esté más grande, tu ya tendrás hijos, ¿No es así Nohe? -Mi cara tuvo que ser un chiste, porque Joel comenzó a reír de inmediato.

- Supongo que si, no lo sé -Los nervios comenzaron a aparecer.

- Oh, estoy seguro que si -Fulminé a Joel con la mirada.

- Da igual si tendré hijos en ese entonces, me raptaré a Valerie y me iré junto con mi hijo o hija y los dejaremos a ustedes aquí -Dijo Christopher.

Estuvimos un rato más con la pequeña y luego salimos para que los demás chicos pudieran entrar a verla, al llegar nuevamente al pasillo, un doctor salió y dijo que podíamos entrar a ver a Karla.

Rápidamente me levanté de la silla, caminé junto al doctor y entré a su habitación.

- Hey, Hola -Sonreí al verla.

- Hola...

- Estás fatal amiga -Me senté a un lado de ella.

- Vaya que traer a un hijo al mundo es complicado -Sonrió.

- Es hermosa -Sonreí al recordar a Valerie.

-Igual a su madre, obvio -Intentó acomodarse en la cama y la ayudé con cuidado.

- Sabes, nunca me imaginé que a estas alturas ya tendrías una hermosa hija, estaríamos viviendo en Miami, con los trabajos que siempre quisimos.. es perfecto.. bueno, casi -Hice una mueca.

- Ya recuperará su memoria, y volverá a ser todo cómo antes, ni te darás ni cuenta cuando estén juntos de nuevo y seas tú la que esté en esta cama -Sonrió.

- No, no.. viéndote así, créeme que ya se me fueron las ganas de pensar siquiera en tener un bebé-Reí y ella también.

-Quiero irme de aquí -Suspiró -Pero aún me quedan exámenes pendientes.

- Ya podrás volver a casa, recuerda que tienes que recuperarte, y así ir a la súper fiesta de Erick por su cumpleaños, ¿Te dijo que será de disfraces? -Ella asintió mientras sonreía - Es la oportunidad perfecta para disfrazarte de un sobre de mayonesa, Joel de Ketchup y la pequeña Valerie de mostaza -Sonreí.

- Estás loca -Rió.

Estábamos en eso cuando Joel entró con la pequeña en brazos y se la acercó a mí mejor amiga, esta la tomó, y comenzó a alimentarla.

- Hey, no mires -Tapé rápidamente los ojos de Joel y este sonrió.

- Si sabes que yo las probé antes que Valerie ¿Verdad? -Fruncí ceño y saque mis manos de sus ojos.

- No, no, no quiero tanto detalle, gracias -Lo miré asqueada.

Estuve un rato más ahí con mi mejor amiga y luego volví a salir al pasillo, los chicos entraron a verla, todos quedaron hipnotizados con Valerie, se hizo de noche y le hablé a Chris para irnos, si bien no teníamos hijos, teníamos unos bebés esperándonos en nuestras casas.

Nunca más... (Christopher Vélez) -TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora