Nunca más... (Christopher Vélez) -TERMINADA.

Capítulo Final.

- Vamos mi amor, tu puedes... solo un último esfuerzo más -Ver a la mujer que amo, sufriendo esos malditos dolores, me partía el corazón, pero ya solo quedaba un empujón más para que mi hijo llegue al mundo.

- CHRISTOPHER VOY A MATARTE -Se a llevado todo el parto maldiciendome, porque según ella por mi culpa está aquí sufriendo -NO ME TOCARÁS NUNCA MÁS -Fruncí el ceño y ¿es enserio?

- Amor eso ni tu te lo cr... AUCH -Nohe apretaba mi mano y cada vez lo hacía más fuerte, siento que en cualquier momento me la amputara.

Mi mueca de dolor se esfumó rápidamente al escucharlo, ese sonido que era música para mis oídos, el primer llanto de mi bebé, Dios.. las lágrimas salieron sin previo aviso.

- Felicidades papitos, salió todo perfecto y León ya esta aquí -Una enfermera me lo entregó y si, cómo no dejé que Nohe le pusiera Toretto o Vin a nuestro hijo, le puso Leon... como el personaje de Violetta, la cual protagonizaba Tini, después de varias peleas, y noches durmiendo en otra habitación, tuve que aceptar que ese fuera su nombre, así que León Vélez Valdés... ya estaba junto a nosotros.

Al momento en que el Doctor me entregó a mi hijo, me sentí pequeño, sentí que tenía mi mundo en mis brazos, y es así, este pequeño es mi nueva razón de vivir, es hermoso...

Tiene unos ojos color miel, casi igual a los míos, su color de piel, su nariz, esos labios... es perfecto...

Le acerqué a Nohe nuestro hijo, y ella lo tomó, vi como sus lágrimas caían sin freno alguno, me acerqué a ella y dejé un beso en su frente.

- Lo logramos amor -Ella me miró y sonrió.

- Te amo Chris.

- Te amo, señorita Valdés.

Me fuí junto a León para vestirlo, dejando a Nohe para que se la llevaran a su cuarto, al llegar a la sala en donde tendrían a mi hijo, comencé a vestirlo, Dios.. es tan frágil, sus manitos, sus piernas...

- Eres tan hermoso, igual a tu padre.. claramente -Dije mientras le ponía el gorrito.

- Señor, necesitamos hacerle unos exámenes a.. -Miro la hoja en sus manos y siguió hablando -León Vélez.

- Si, claro... podré pasar a verlo luego, ¿Verdad?

- Si, tranquilo.. sólo serán unos minutos, luego lo llevaremos a la habitación con su madre, y podrán entrar a verlos a ambos.

- Muchas gracias -Sonreí y caminé hasta la puerta, y al salir todos los chicos estaban ahí.

- ¿Y? -Miré  a Karla y sonreí.

- S.. so..soy papá -Susurré mirando a la nada.

- Hermano te felicito -Recibí un abrazo de Joel, el cual recibí con gusto.

-Gracias.

- ¿Y Nohe? -Miré a Erick y hablé.

- Recién la pasaron a su habitación, pronto podremos ver a ambos.

- Y ¿León cómo está? -Preguntó Zabdiel y yo suspiré.

- Esta perfecto, es hermoso.. -Sonreí pensando en mi hijo.... mi hijo... suenan hermosas es palabras en mi mente.

Esperamos un momento más afuera de la habitación de mi novia, hasta que el doctor salió a avisarnos que podíamos entrar a verla, después de rogarle, casi suplicarle.. pudimos entrar todos a la vez.

Al entrar a la habitación, me encontré con la escena más hermosa, mi chica sonriendole a mi hijo, a nuestro hijo...

- Hola amor -Me acerqué a ella y la besé.

- Hola -Sonrió, su rostro esta cansado.. pero esa sonrisa sigue siendo igual de hermosa como la primera vez que la vi.

- Te dije que pronto estarías en ese lugar, y te verías terrible -Mi vista se posó en Karla y alcé una ceja.

- Touché -Respondió mi chica.

- Estas loca, ella está hermosa -Fruncí mi ceño.

- Lo dices porque estás enamorado de ella -Fulminé con mi mirada a Joel.

Después de estar un buen rato con Nohe, los chicos se fueron a casa, yo claramente me quedé con ella, me escabullí en el hospital y me quedé toda la noche con ella.

Días después.. 

A Nohe le habían dado el alta hace unos días, hemos estado en casa encerrados cual ermitaños, hemos dormido muy poco, pero a valido la pena.. los primeros llantos eran muy tiernos, nos peleábamos por quién iba a ver a León, pero ahora peleamos por quien no va y se queda durmiendo.

Los chicos han venido casi todos los días a vernos, a ver a León, la madre de Nohe vendrá en dos semanas, ya que pidió unos días en el trabajo y podrá venir, lamentablemente pero afortunadamente para mi, Sebastián no podrá venir aún a ver a Leon y a Nohe, y esta bien... lo entendemos.

En este momento me encuentro sentado en el sillon con León en mis brazos, Ollie y Kira a un lado y Laika y Sammy al otro, mi chica acaba de salir se ducharse.

Un flash me sacó de mis pensamientos, levanté la vista y Nohe estaba frente a mi con su cámara apuntándome.

- Perdón, pero es la foto más linda -Dijo con una sonrisa contagiandomela de inmediato.

- Faltaste tú -Hice un puchero y ella se acercó a mí, me besó y yo gustosamente le seguí el beso.

- Te amo Christopher, gracias por todo -Alcé una ceja y sonreí.

- Esta Nohe me gusta, no la que me gritaba cosas feas cuando mi hijo venía al mundo -Fruncí el ceño.

- Amor, si hubieras sentido esos dolores... me entenderías -Ahora ella hizo un puchero.

- Amorcito, estuve ocho meses con vómitos, mareos y cambios de humor -Rodé mis ojos.

- Insisto, cuando puedas sentir dolores de parto, lo debatiremos Vélez.

- Bien -Bufé -Ahora que ya tuvimos a León... podríamos ver lo de nuestro compromiso -La miré y ¿Está sonrojada?

- Si -Miró su anillo de compromiso -Creo que eso me pone ansiosa y nerviosa.

- ¿Por qué amor? -La miré mientras acariciaba la mejilla de León.

- No lo sé, ¿y si te arrepientes? -La miré fijamente y fruncí el ceño.

- ¿Enserio me preguntas eso?, Amor... tenemos un hijo de días, estuvimos separados más de un año y nuestro amor por el otro jamás cambió, ¿Enserio crees que me arrepentiría de compartir mi vida contigo?

- Esta bien amor -Hizo un tierno puchero.. -Pero nada de despedidas de soltero.

- Lo juro amor, nada de despedidas de soltero.