Y ahora estoy aquí mirando a la nada, deseando regresar a aquellos momentos en los que estuvimos juntos. Nuestros yo del pasado que eran tan felices, la calle transitada en la que solíamos pasear en cada cita, y las lagrimas no dejan de fluir.
Trato de encontrarte, pero no te puedo ver.
—¡No corras, espérame! —Te dije, mientras mis brazos trataban de alcanzarte, y la adrenalina de mi corazón no dejó de presentarse.
—¡Corre más rápido Naruto-Kun! —Tu melodiosa voz, y el sonido de tu risa se revuelve dentro de mi mente. Las lágrimas fluyen con más naturalidad, y una carcajada de dolor salió de mi aliento.
—¡Te atrape y no puedes correr más! —Reí entre tus brazos, mientras intentabas zafarte de mí.
—¡Eres tramposo, tus pies son más largos, Naruto-Kun! —Reíste conmigo abrazándote de mí al fin, tu cálido aliento se mezclo en mi cuello, y me sentí en el cielo.
¡Oh, Hinata!
Trato de oírte, pero no te puedo escuchar..
Cuánto desearía volverte a escuchar, no me importaría si tuvieras que regañarme, me encantaría volver a escucharte, aunque sea una última vez.
Las lagrimas que he estado guardando, se han salido de mi corazón roto. Ya no sé ni quien soy yo, ni quién eres tú. Por favor, regresa una última vez.
Y empecé a ver cosas que no podía ver... A oír cosas que no podía oír....
—¡Tienes que usar bien tu gorro, o te enfermarás! —Me regañaste, con tu hermoso puchero y todo mi corazón se llenó de alegría. Quería abrazarte en ese mismo instante.
—¡Sí, mi señora! —Te dije imitando a los militares, tu te reíste y me sentí el hombre más afortunado del mundo.
Las lagrimas caen y caen.
—Si tuviera un super poder, sería ser eterna y curar las enfermedades. —Sonreíste, acomodando mi gorro. Tus suaves manos acariciaban mi rostro con tanta dulzura, que siempre quise quedarme en ese momento.
—¿Por qué? —Te pregunté dejándome caer entre tus manos, como gatito mimoso.
Reíste y dejaste de acariciarme, tus manos rodearon la mía y el tiempo se detuvo entre susurros dijiste.— Así siempre podría quedarme a tu lado y verte ser el hombre que siempre haz querido.
—¿Qué?
—Apresúrate, ya casi viene el tren. —Ya lo sabías, y no quisiste decirme.
Los recuerdos de nosotros dos, me pasaron como pétalos cayendo. Vi como ambos corríamos sobre la banqueta solitaria, entre empujones y carcajadas.
Porque después de que te fuiste, recibí un poder que no tenía antes..
Mis pasos no se detuvieron, comenzaron a seguir nuestros recuerdos. La larga línea que solíamos visitar, la parada de trenes fue la primera, y ahí nos vi de nuevo.
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One Naruhina ❤
FanfictionPequeñas historias sobre nuestra pareja favorita ❤ Posiblemente dentro de lo normal o no. El creador de estos personajes es Masashi Kishimoto, solo los utilizo sin fines de lucro y satisfacción propia ❤