Las Leyes Del Amor

capítulo 6: confesiones

Aug, ah,... Oh si, ahí, ahí, justo ahí, ahhh, siii, dame más, hmm... Embestida tras embestida daba namjoon a jin, en ese momento el Omega se sentía en las nubes en el más allá, no sabía cómo expresar tan fantástico placer, justo cuando la pareja estaba llegando al orgasmo el sonido de un gallo cantando los interrumpió, y fue ahí donde un jin empapado de sudor se despertó exaltado, su pecho subía y bajaba por la falta de oxígeno, ¿Qué demonios fue eso? Se preguntó el Omega aún shockeado por el sueño que acaba de tener.

Desde el momento en que jin conoció a nam, algo dentro de él había cambiado, no sabía a ciencia cierta qué parte, pero si había un cambio un raro y extraño cambio, ahora tenía una fuerte lucha con su lobo interior, al principio creyó que era porque entraría en celo, pero no tardó en darse cuenta que la lucha con su lobo tenía nombre y apellido Kim namjoon, definitivamente tenía que hacer algo al respecto de lo contrario se iba a enloquecer.

Jin se levantó de su cama, se despojó de su pijama y se dirigió al baño, necesitaba con urgencia una ducha fría, a ver si asi de una vez por todas se le bajaba esa calentura que lo tenía en crisis existencial; luego de unos minutos, jin sentía que el agua no le estaba sirviendo de nada, por tanto decidió hacer lo que cualquier persona haría en el estado en que él se encontraba, tendría que masturbarse, darse placer así mismo y sacar toda su esencia para liberar un poco su lobo y que este se conformará por lo menos con eso.

Tae se encontraba en la cocina preparando el biberón del bebé Omega, cuando escucho sonidos extraños que provenían de la habitación de jin, ¿qué le ocurría a jin?, Desde hace una semana estaba actuando un poco extraño, tae no creía que jimin hubiese notado algo raro ya que se lo habría hecho saber, sin embargo, desde que le dieron de alta a jimin esté también estaba algo extraño, al caso ¿él era el único normal en esa familia?, Se preguntó un tanto indignado pues sentía que sus dos mejores amigos le estaban ocultando cosas y esto lo hacía sentir miserable, como si no confiaran en él.

Lo que el peli azul no sabía era que jimin también tenía sus propios asuntos personales, jimin se encontraba en un mar de sentimientos extraños, experimentando nuevas emociones y tenía su cabeza hecha un ocho de tantas confusiones que tenía, por ende el pequeño Omega no quería preocupar a sus amados amigos con sus cosas, quería sentir que podía ser independiente por lo menos en cuestiones sentimentales.

Y... es que...desde aquel día en el hospital jimin sintió como jeon encendió una chispa dentro de él.

Flash back

Jungkook luego de salir de aquella sala de espera, se dirigió directo a su casa, ese día no pudo conciliar el sueño aunque lo intentó no pudo lograrlo, ¿qué le diría a jimin al día siguiente?, Sería bueno contarle todo lo ocurrido?, ¿Debía decirle que sus marcas habían alumbrado purpura? ¿Debía decirle que él sería su alfa?, ¿Debía decirle que él si quería conocerlo?, ¿Que debía hacer?, Jeon era un mar de preguntas a las cuales no tenía respuesta alguna.

Al día siguiente un Jeon jungkook, con traje no formal pero si elegante y sexy, se dirigía a la habitación de jimin con un ramo de rosas rojas y una caja de chocolates, solo esperaba que al joven Omega le gustarán las golosinas de lo contrario quedaría como un imbecil y no quería dar una mala impresión, cuando llego a la puerta, tomo aire, respiro profundo trato de estar tranquilo, aunque estaba hecho un manojo de nervios, tu puedes jeon, vamos, no seas cobarde, es tu Omega, conquistalo, se dijo a si mismo para luego deslizar la puerta seguido por dejar ver en el interior de la habitación al Omega sentado en la camilla leyendo un libro.

Hmmm, bu- bue- buenos dias señor park, dijo el pobre de jeon tartamudeando, a jimin se le hizo muy tierno aquel gestó, era bueno saber que ponía nervioso a tan dominante Alfa, buen día señor jeon, respondió en un tono pícaro jimin, ¿Que lo trae por aquí?, Preguntó sin rodeos, es que así era él, le gustaban las cosas claras, aunque aveces era muy tímido, otra veces su lado coqueto salía a flote; ohhh, verá señor park, ayer fui yo quién lo trajo al hospital luego de que se desmayara en el ascensor de mi empresa, por ende quería saber el estado de su salud y le traje este pequeño presenté espero sea de su agrado; jimin desde que jeon cruzó la puerta estaba tan ensimismado mirando sus ojos que no se percató que traía en sus manos unas rosas, eran hermosas, nadie nunca antes le había regalado flores, era la primera vez que recibía un detalle tan lindo.

Jeon por fin se acercó hasta jimin y le pasó las rosas y los chocolates, las mejillas del Omega pasaron de un tono rosado suave a un rojo encendido, jungkook de inmediato noto el color de sus mejilla y le pareció que jimin se veía más precioso de lo que ya era como si eso fuese posible, es que era un ángel, era divino se decía jungkook en sus adentros y como si las palabras salieran por si solas soltó como una bomba... señor park! Me disculpó de antemano por lo que voy a decir, mi motivo no es ofenderlo ni incomodarlo, pero... ¿Le gustaría salir conmigo?, sé que no me conoce y yo a usted tampoco, pero desde que lo vi ayer en mi oficina no he podido sacar su hermoso rostro de mis pensamientos, quisiera que me diera el honor, la oportunidad de invitarlo a salir y así poder conocernos, no me tiene que responder en este momento, la salida es sin ningún compromiso para que no se sienta presionado.

Jimin aún estaba procesando todas esas palabras, todo aquello hizo que algo dentro de él sintiera una punzada de alegría, una oleada de calor, su lobo estaba feliz de que aquel Alfa de cierta forma lo reclamará. Luego de que saliera de su pequeño trance jimin conectó de nuevo miradas con jeon si antes tenía sus mejillas rojas ahora sí que sentía que estás le iban a Explotar; ACEPTÓ! Pronunció jimin quien al notar que aquello había salido más como un grito se avergonzó y solo quería que en ese instante se lo tragara la tierra, pero como ya no había marcha atrás prosiguió, señor jeon yo también espero que usted no me malinterprete, la razón por la cual acepté su propuesta es porque mi lobo no deja de tener una batalla con mi yo interior, la verdad es que desde que entre ayer a su oficina mi lobo parece estar fuera de control y no logro entender el porqué, por supuesto jimin no era consciente como jeon de que estaban destinados, para jimin jeon era otro alfa de tantos que existían un apuesto y ardiente alfa. Hmmm solo tengo una petición señor jeon, y es que si vamos a salir deberíamos dejar de hablarnos con tanta formalidad ¿No?, Jeon con ojos de cachorro asintió, para luego preguntar ¿Como debería decirte de ahora en adelante?, Puedes decirme como tú prefieras por mi parte y por el momento yo te diré kook, entonces yo te diré jiminshi expreso el Alfa entusiasmado.

Fin del flash back

Una semana después, Jimin se encontraba en una reunión de negocios junto a nam y algunos inversionistas, cuando un tip, tip le hizo saber que le había llegado un mensaje...

"Jiminshi espero que tengas un lindo día y también espero con ansias nuestra primera cita"

...embobado dejó de prestarle atención a la exposición de uno de sus empleados para responder aquel mensaje que sin duda le había hecho feliz, sin embargo, solo faltaba llegar a casa para ver y abrazar al pequeño Dong y toda su felicidad estaría completa, había estado tan ocupado la última semana que ni siquiera podía disfrutar un rato agradable con su hijo pero bueno vendría momentos lindos se dijo para si mismo.

"Kook yo también deseo que tengas un maravilloso día y por supuesto también estoy ansioso por nuestra primera cita"

Es ahora o nunca se dijo jimin para después teclear

"¿Estas disponible el sábado a eso de las 5 de la tarde?"

Jungkook que se encontraba tomando un vaso de agua, casi se atraganta cuando vio el mensaje de jimin, se supone que debía ser él, el que preguntara la disponibilidad de jimin, sin embargo, no negaba que le había encantado que el Omega tomara la iniciativa.

"Para ti estoy disponible 24/7 :3"

Perfecto, ahora jimin debía ir de compras con jin pues necesitaba verse espléndido ese día.