Perfección Disfrazada.

Preguntas de rutina.

Toda la atención está en los detectives, los cuales estaban serios mirando disimuladamente a sus futuros testigos o sospechosos, la pareja de detectives tenían opiniones diferentes sobre ellos; Nuñez no creía que ninguno de ellos tenía que ver con lo que le pasó a Genevieve pero Clark pensaba diferente su instinto le dice que alguno de ellos por lo menos sabía algún detalle clave para descubrir al atacante.

 —Buenos días estudiantes —los saluda Stilinski y los estudiantes le responden el saludo—. Les presento a los detectives del recinto policial de Gloss City Damián Nuñez y Elizabeth Clark —. Los presenta.

 —Buenos días —. Saludaron los dos al mismo tiempo.

Todos le respondieron el saludo, los estudiantes sabían el por que de que los detectives estuvieran en su salón pero querían oír que ellos dijeran el motivo de su visita, una chica que ya todos conocían levantó la mano y todos ya sabían que es una chismosa pero les sorprendió su osadía de levantar su mano para preguntarles la razón de su visita.

 —Si —. Asiente Clark dándole permiso a la adolescente para hablar.

 —¿Están aquí por lo que le pasó a Genevieve? —Pregunta directa y curiosa.

 —En efecto Margareth —respondió la directora antes de que lo hicieran los detectives—. Los detectives solo vienen para saber si alguno de ustedes sabe algo que les sea útil para su investigación —. Les explica Stilinski.

A medias pues ella no quería preocupar a sus estudiantes por las sospechas absurdas e infundadas por parte de los detectives, para ella es algo impensable que alguno de sus estudiantes fuera capaz de hacer algo tan atroz como intentar quitarle la vida a otro ser humano; Nuñez y Clark se dieron cuenta de las intenciones de la directora. Solo le siguieron la corriente porque ellos no querían revelar aún a los estudiantes que es un caso por intento de homicidio además de que al igual que la directora no querían preocupar a los estudiantes dándoles a entender que existe la posibilidad que uno de ellos ha sido capaz de intentar cometer un homicidio.

 —La directora Stilinski tiene razón
—dice Nuñez la verdad a medias—. Oigan no crean que vinimos a interrogarlos y a realizar la rutina del policía bueno y malo —explica mientras señala a Clark y a él mismo—. Solo vinimos para decirles que si saben algo aunque sea algo insignificante sobre Genevieve nos lo digan —. Les dice con franqueza Nuñez.

 —Si quieren permanecer en el anonimato lo entendemos —admite Clark, ella se acerca a la pizarra y escribe dos números telefónicos—. Así que estos son nuestros números telefónicos en caso de que quieran hablar el primero es de Nuñez y el segundo es el mío pero de todas maneras las puertas del recinto están abiertas para los que quieran cooperar —. Les explica de forma serena.

 —¿No tienen sospechosos? —Pregunta Margareth curiosa.

Les dedica una mirada al grupo de Genevieve específicamente a sus dos mejores amigas, las cuales la miran con odio por atreverse a insinuar que ellas tienen algo que ver con lo que le pasó a su amiga; algo que no pasó desapercibido para nadie pero ambos detectives fingieron ignorar lo ocurrido.

 —Por ahora no hay sospechosos —. Dice sencillamente Clark.

Palabras que no fueron del agrado de la mayoría de la clase, excepto por un mínimo grupo que sintieron desagrado pero a la vez relajación por las palabras de Clark pero solo mostraron disgusto; Clark no les mentía porque fue apenas que se investigó a fondo y se descubrió que el caso es sobre un intento de homicidio así que de manera oficial no hay ningún sospechoso.

 —Ya saben lo que piensan los detectives chicos —dice rápido Stilinski antes de que Margareth o cualquier otro estudiante decida hacer más preguntas innecesarias—. Y como ya hablaron, ya terminaron así que profesora Smith continúe con su clase —. Pide con formalidad.