Caos emocional.

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Truman intenta calmar su respiración un par de veces para poder hablar con su amiga, cuando lo logra se acuesta en el escenario y pone su cabeza en el regazo de la pelinegra, quien de forma automática empieza a acariciar el cabello lacio con rizos naturales en las puntas de su amigo; ambos tenían sus miradas puestas en los asientos vacíos esperando que uno de los dos se atreviera a romper el pacífico silencio.

—Vaya, eres tan alto que tu cuerpo abarca todo el borde del escenario —. Comenta Scarlett dándole una mirada rápida al cuerpo de Truman.

Mira a Truman esperando que él también hiciera un comentario de su estatura así ella le respondería y sin Truman darse cuenta se verían envueltos en una discusión absurda sobre sus estaturas que haría que se distrajera un poco.

¿Nada?, ay Tru en serio estás triste.

Fue el pensamiento de Scarlett al ver que el adolescente dejó pasar la oportunidad de hacer bromas y comentarios sobre su estatura, algo muy inusual en él.

Lo siento Tru pero lo haré para que al menos no estés triste.

Fue el pensamiento de Scarlett antes de hacer la pregunta, la cual ya sabía la respuesta y que haría molestar a su amigo.

 —¿Estás triste solo por lo de Bianca o porque tu te buscaste saberlo por G.P. y no por ella? —suelta sin tacto la pregunta.

Truman se sentó de inmediato y mira a Scarlett como si estuviera loca, ella por su parte estaba tranquila y poco sorprendida de la mirada de su amigo, pues esa es la reacción que ella esperaba.

 —¿Disculpa? —pregunta ofendido mirándola de arriba a abajo y con un tono un poco chillón.

 —Lo que oíste —. Dice despreocupada.

 —¿Cómo te atreves? —pregunta indignado, al ver la calma que tiene su amiga y que él quería tener, un pensamiento pasa por su cabeza y sin ponerse a meditar lo dice—. Valerie —. 

¡Como te atreves a decirle su segundo nombre, idiota!.

Se reclama una y otra vez al ver que la cara pacífica de Scarlett se transformó en una de enojo real, no eran muchas cosas las que tenían el poder de sacar de sus casillas a la joven Schuster pero en el top de las tres principales se encuentra su segundo nombre; Truman iba a hablar para disculparse porque sabe la razón por la cual su amiga no le gusta ese nombre, pero ella con una actitud más calmada aunque con una expresión de severidad levanta la mano para que no hable.

 —Es normal que una persona diga cosas para hacer enojar a otra persona cuando dicha persona está enojada así que solo por eso voy a pasar por alto que me llamaste por ese nombre —le aclara, y él la mira con arrepentimiento—. Ahora volviendo a tu pregunta, me atrevo a decir eso mi querido Truman porque se que fuiste tú quien amenazó a G.P. —. Le aclara.

 —¿Cómo lo supiste? —Pregunta con los ojos muy abiertos por la sorpresa de que ella lo descubriera.

 —Cómo tu mejor amiga te he visto enviar muchos mensajes de enojo a los idiotas que has tenido como pareja y lo que esos mensajes tienen en común con el que le enviaron a G.P. es el insulto para terminar el mensaje —. Le explica reprimiendo la risa que le causa recordar los mensajes que ha enviado su amigo cuando lo hacen enojar.

 —Cualquier pudo enviar una amenaza con ese insulto —. Dice mientras alza su mentor y finge tener recato.

 —Solo tú te atreverías a decirle perra a alguien que ni conoces y sabe cosas de ti que no quieres que nadie sepa —. Dice riendo mientras le da un leve empujón en el brazo.

Perfección Disfrazada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora