Perfección Disfrazada.

Las reglas de la alianza.

Ian y Scarlett vuelven a leer las copias tratando de encontrar la conexión entre ellas o algo que pasaron por alto en la primera lectura, al terminar de releer se las intercambian para hacer lo mismo; el pelinegro deja de mala gana la copia que estaba leyendo en la mesa y Scarlett hace lo mismo pero frustrada.

-Si hay una conexión, yo no la veo -. Reconoce con el ceño fruncido la chica de ojos color miel.

-Es frustrante, pero tenemos que admitir que fuimos ingenuos al creer que esta persona nos daría pistas sólidas y claras para descubrir a la persona que casi mata a Genevieve -. Dice Ian pasándose la mano en el cabello en señal de incomodidad.

-Es cierto, pero eso no disminuye mi frustración -confiesa Scarlett-. ¿Qué tal si nos enfocamos en las reglas de la alianza? -Pregunta interesada.

-Enfocarnos en las reglas nos puede ayudar para que no sobre pensemos en las pistas y así no corremos el riesgo de autosabotear nuestra estrategia -dice Ian pensativo y Scarlett asiente totalmente de acuerdo con sus palabras-. ¿Has pensando en algunas?

-De hecho si -reconoce mientras que agarra un block de notas-. Pero debo hacerte una pregunta antes de seguir adelante con esta alianza -dice serenamente, el adolescente asiente dándole toda su atención-. ¿Intentaste matar a Genevieve?

-Claro que no -dice de inmediato bajó la mirada seria y analítica de Scarlett-. ¿Y tú intentaste matarla? -Pregunta con la misma seriedad que la adolescente.

-No lo hice -confiesa-. ¿Cómo sé que no me mientes? -cuestiona.

-Podría decirte un montón de razones, pero ambos sabemos que está en ti creerme o no, te toca confiar en mí como a mi me toca confiar en ti porque tu también me podrías estar mintiendo -. Dice reflexivo.

-Primera regla no nos vamos a obligar a decir nuestros secretos y si tu decides contarme tu secreto o viceversa será cuando estemos listos -le explica leyendo, levanta la mirada y ve al chico asintiendo-. La única forma de romper esta regla sería porque tu secreto, el mío o el de ambos será algo que nos asegure o mínimo nos ayude a ganar -aclara-. Segunda regla esta alianza será secreta para que los blancos que tenemos en nuestras espaldas no sean más grandes pero a pesar de que nuestros amigos no sepan de dicha alianza los protegeremos de G.P. y en caso de que uno llegue a querer contarles a sus amigos o amigo de dicha alianza debe tener primero la aprobación de la otra parte -explica, espera algún tipo de comentario, pero no llega sigue leyendo.

>>No siempre estaremos de acuerdo y eso algo normal así que por eso la tercera regla es que en caso de no concordar en algo deberemos buscar soluciones que nos hagan satisfaga a los dos, la estrategia no será a tu manera o a mi manera, debe ser a nuestra manera - explica-. La cuarta regla es que si en caso de que uno de los dos llegara a proponer agregar a más personas a esta alianza la otra parte debe considerar la propuesta y aceptar o rechazar a las personas hipotéticas con base al beneficio de la alianza y no por opiniones o desacuerdos que tenga con dicha persona -termina de leer y mira a Ian -. Esas fueron las reglas que se me ocurrieron.

-Yo tengo dos reglas más en mente
-confiesa Ian, la chica asiente en señal de que le presta atención -. Quinta regla ninguno de los dos puede hablar con G.P. sin decirle al otro, ambos debemos estar en el mismo nivel de información y la única forma de romper esta regla es una situación extrema como por ejemplo que la investigación de Clark y Nuñez apunte a cualquiera de los dos como el asesino y se necesite pruebas de inocencia inmediatamente -le explica y ella asiente estando de acuerdo -. Secta y última regla, debe haber honestidad pura entre los dos porque a partir de ahora seremos tú y yo contra lo que sea que nos depara esta surreal situación -dice con una gran formalidad -. Estas son las reglas de la alianza -. Dice mientras que levanta su mano para estrecharla.