Usuario no encontrado -taegi/yoontae-

Capítulo 41

—Bien. Tenemos ya lo necesario —Hyunho veía aquellos documentos, un abogado fiscal estaba en una silla y en la otra una extraña mujer bastante altiva.

—¿Cuando podré llevarme a la niña? —preguntó la mujer.

—Tendrá que dictaminarlo el juez, señora, para eso tengo que entregar los documentos que el licenciado tiene —le contestaba el abogado—. Pero creame, es un hecho que mañana mismo esa niña estará bajo su custodia.

—Así es señora McKenzie, su hijo aún no puede salir de aquí, y será a usted la única persona con la que Scarlette Kimberly pueda quedarse. No puede seguir con esa gente, ambos, tanto el hijo como la madre han hecho actos ilicitos.

—Era evidente —respondió de mala gana la mujer, su vestimenta era muy conservadora, su falda era alargada y vestía una camisa de cuello alto con olanes, su cabello canoso estaba en un recogido alto y llevaba un bastón negro lustroso con la punta dorada en forma circular—. Nathan siempre hizo lo que quiso, y siempre se lo advertí, primero tuvo a esa criatura con una prostituta, y luego se casó con otra, y no me extrañaría que el hijo estuviera metido también en algo así, pobre de mi nieta.

—De lo que se le acusa a la madre es de robo de dinero en el lugar donde trabajaba, lo vimos en las camaras, y nos mintió en que su nieta estaba en la escuela cuando ahí no estaba, además es alcoholica, el hijo trabaja con otra persona que utiliza programas ilegales para hackear personas y tomar información misma solicitada a cambio de pagos —explicaba Hyunho.

—Eso es todo lo que necesita saber el juez para que entregue la custodia a la señora McKenzie —habló el abogado.

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Kimberly sintió mucho frío cuando bruscamente las frazadas le fueron quitadas de encima, sus ojos estaban rojos y adormilados, quería seguir abrazando la almohada.

—A levantarse, andale —dijo con voz juguetona su mamá—. Lo bueno es que Bill me prestó su auto para poder llegar en la noche, podré llevarte a la escuela.

Cuando la niña se incorporó su adormilada voz detuvo a su madre que ya iba a salir de la habitación. —¿Bill? ¿Quién es Bill?

—Un amiguito de mami, querida. Date prisa, que ya se nos hace tarde...

Salió del cuarto, Kimberly solo rodó los ojos.

—Bill... —soltó en voz baja en un bufido.

Se dio cuenta que seguía en la habitación de Taehyung, pero vio que su hermano no había llegado a casa, y sintió algo arder en el estomago.

Sabía que había pasado la noche con Yoongi, y eso la enfermaba.

Se arregló al llegar a su habitación, y después de algunos minutos su madre la esperaba en el auto extraño color azul cielo, la llevó a la escuela, la niña quería decirle algo pero alguien la había llamado por teléfono y prefirió esa llamada a escucharla.

—Adios muñequita, te quiero mucho —dijo con el teléfono aún en el oido y subió la ventanilla del auto al bajarse la niña y luego puso en marcha el vehiculo, Kimberly solo observó como se iba su madre.

Había pasado el tiempo y clases, la niña estaba sola como siempre, sin nadie que le hablara o quisiera hablar, siempre prefiriendo a gente patética que hablaba de cosas superficiales o simplemente que la discriminaban solo por quererla discriminar, Kimberly ya estaba aceptando el hecho de que las personas, o bueno, no todas claro está, eran así, trataba de seguir lo que Usuario no encontrado le había dicho de enfocarse en ella, pero era difícil.