Capítulo 9

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Con tanto dolor, y una fuerte crisis emocional dentro de sí, trato de ocultar como se encontraba. —No se preocupe —le costaba tanto hablar—. Iré para allá... —colgó antes de que no pudiera seguir sosteniendo la voz, y después cubrió con su mano la boca, mientras trataba de reprimir lo que sentía e intentaba respirar como podía.

Guardó su teléfono en su bolsillo y se dirigió al baño para echarse agua en la cara, miró su enrojecido rostro en el espejo, y trató de calmarse, no quería que aquél chico lo viera con los ojos enrojecidos.

Tomó una toalla blanca y se secó las manos, ni siquiera se percató que la dejó algo manchada, misma proveniente de sus dedos lastimados.

Tomó su saco y salió de su departamento, las ventiscas heladas de aire impactaron en su rostro y cabello, hacía bastante frío, pero ni siquiera lo sentía ya que aún llevaba la adrenalina dentro de sí.

Entró al vehículo y encendió el motor, pero mientras el auto estaba encendido Yoongi no dio su marcha, sino que se quedó unos momentos mirando por el parabrisas, y de nuevo, queriendo ser hundido por otro pensamiento.

Pero quitó todo eso de su mente. De su atormentada mente. Puso en marcha el auto y manejó hasta la casa de aquél chico, en minutos llegó, bajó del auto y trató de verse como si nada estuviera ocurriéndole, pero varios pensamientos hacían ruido en su cabeza.

Tocó la puerta, pero rápidamente la misma se abrió, y Taehyung lo miró fijamente, abriendo la puerta para que pasara.

—Gracias por venir —dijo, Yoongi pudo ver que se veía algo extraño—. Pase por favor, lamento que viniera tan noche.

—No se preocupe —Yoongi entró, Taehyung cerrando la puerta por detrás.

Ambos estaban en la sala de estar, Yoongi se volteó para verlo. —¿Qué fue lo que le mandaron?

—Pues... —relamió su labio, y Yoongi notó como su gesto se volvía a uno preocupado al voltear el rostro hacia un lado y sentarse en uno de los sofás—. Mierda —masculló, mirando algún punto del suelo—. Ya me cansé de esto. Creo que mi cabeza va a explotar.

Yoongi no entendía, pero veía como Taehyung parecía estar afligido, y también tenso, Yoongi se sentó en el otro sofá sin dejar de verlo, no quería decir algo que lo alterara. —¿Qué le ocurre? ¿Qué fue lo que mandó?

Taehyung suspiró. —Perdone —se encorvó un poco restregando su mano hacia atras entre su cuero cabelludo—. Le llamé a mi madre para decirle esto y no le interesó, estaba tomada, siento que todo en mi vida es una mierda no puedo creer que a mí de tantos tuviera que pasarme esto. Terminamos de cenar mi hermana y yo y comencé a sentir mucha angustia, incluso a sentirme observado —Yoongi veía como en el rostro de Taehyung había bruma—. Solo haga que esto del imbécil que me acosa acabe pronto por favor.

—Calmese Taehyung, le entiendo.

—Perdone, no suelo ponerme así delante de nadie, sé que usted viene por lo de la imagen que este sujeto me envió, pero aunque no esté en un buen momento tenía que decírselo, no puedo pensar con claridad, y esto, de este maldito acosador, me ha hecho sentir muchísimo peor.

—Es totalmente comprensible, no tiene que disculparse por cualquier cosa que usted esté viviendo, sé que el acoso de esta persona lo tiene peor evidentemente, teme por su vida y por la de su familia desde que él apareció, pero créame, usted y su familia están protegidos, cualquiera estaría como usted en su situación.

Taehyung alzó el rostro hacia él, encontrándose con sus ojos y tomó el teléfono que estaba sobre la mesita que estaba en frente.

Encendió el teléfono y al acto estaba en esa imagen. Posteriormente estiró su brazo hacia Yoongi con este.

Usuario no encontrado -taegi/yoontae- Donde viven las historias. Descúbrelo ahora