"Every rose has its thorn" (COMPLETA)

Capítulo 7: "Stay strong"

- Quinn...

- Sam, mira...

- ¿Qué pasó con el papá de Lucas? - Me miró.

Miré sus ojos sin estar completamente segura. No quería que me juzgara por lo que hice o por lo que estuve dispuesta a aguantar, pero quizás era hora de hablar, de contarle lo que me pasó y el por qué soy así.

- Es...-Lo miré directo a los ojos, suspirando- él padre de Lucas es una mierda, no quieres perder tu tiempo escuchando esa historia.

- Me interesa saber tu historia, Quinn... Conocerte- Me miró tiernamente.

- Se llama James. Vivía en Londres con nosotros. Era un jodido idiota -murmuré suspirando, sintiendo que podía contarle todo- James me...

- ¡Chicos! -Dice Kitty, apareciendo solo en un vestido corto, dejando ver los tirantes de su bikini.

- ¿Qué ocurre? -Dijo Sam, mirándola. Yo apreté la mano de Sam. Primera vez que no nos separábamos apenas alguien nos sorprendía juntos. No me molestaba.

- Vamos todos a la piscina... Los estaban buscando -Dijo sonriendo, mirándonos, haciendo un gesto con su cabeza y volvió a caminar por donde había venido.

- Claro, ya vamos- Sonreí asintiendo y me levanté dispuesta a avanzar, pero Sam apretó mi mano de manera sutil para que me detuviera. Lo miré a los ojos y él me miró también.

- Me tendrás que hablar de James en algún momento.

- En algún momento -Dije asintiendo con mi cabeza, mirando después nuestras manos que se sostenían.

- Quinn...

- Después, lo prometo -dije asintiendo con mi cabeza. Me acerqué hasta quedar de frente a él- No desesperes, Sam Evans- sonreí, me acerqué para dar un beso en su frente y pude sentir que apretaba mi mano. Sonreí y me separé por completo, dándome la vuelta sin decir nada y caminé siguiendo los pasos de Kitty.

No entendí bien mi gesto con Sam, sólo sabía que me había nacido y que me había sentido completamente cómoda al momento de hacerlo. Era una sensación genial poder compartir con él.

Caminamos a la piscina que estaba a solo unos metros de la casa. Era un complejo cerrado, tenía unos cuantos toboganes y el agua se veía realmente genial. Lucas y Barbra corrieron a meterse, dejando las cosas tiradas. Rachel y Finn fueron a verlos, lo cual agradecí, porque ellos podían entrar al agua y cuidarlos de mejor manera.

Sam, Puck y Mike corrieron a meterse, mientras las chicas doblaban y dejaban todas las cosas en una misma mesa que estaba alrededor de la piscina temperada. Luego de unos minutos, el resto se metió a la piscina, quedando solo Kitty, Artie y yo.

- Si quieres ir a nadar, ve- Dijo Artie.

- No, no te preocupes- Sonrió Kitty, besando su mejilla.

- Si quieres yo me quedo con él- Los miré.

- ¿No te bañaras? -Dice Artie- Yo después entraré de todas formas, cuando inflemos el sillón...

- Pero yo no- Sonreí sentándome a su lado.

- ¿No te gustan las piscinas? -Dice Kitty.

- No tengo traje de baño- Reí mirándola, ella abrió los ojos sorprendida y luego me sonrió. Era la verdad. No estaba dispuesta a nada más.