"Every rose has its thorn" (COMPLETA)

Capítulo 12: "Don't leve me"

- Él rubio de la mesa de atrás no te deja de mirar...-Susurra en mi oído.

- Me lo topé en la universidad –Dije mirándolo y vuelvo a mirar a Kriss.

- Invítale un trago...-Sonrió y yo volví a mirar al chico que me regaló una sonrisa, haciéndome después un gesto con el vaso. Rodeé los ojos y volví a mirar a mi amiga.

- Si me quiere, tendrá que esforzarse más -dije después de unos segundos.

- ¿Así como lo que estoy haciendo justo ahora...? -Escuché una voz masculina en mi odio y giré asustada- lo siento, no quise asustarte, soy James Holloway.

- Lucy o Quinn Fabray -Reí leve, mirando al guapo rubio alto que estaba delante de mí.

- Me gusta más Lucy...-Murmuró y acaricia mi cabello, lo miré algo sorprendida por lo rápido que el chico se sentía en confianza- lo siento, es que solo disfrutaba de tu belleza.

- Pues... lindo cumplido –Sonreí mirándolo.

- ¿Quieres beber algo?

- Eso es definitivamente buena idea- Sonrió Kriss.

- Espérenme acá chicas, yo iré por sus tragos -Dice amable, sonriéndome. Me guiñó un ojo y se alejó con esa misma confianza.

Desperté de golpe y pude sentir un peso a mi lado. Por un segundo llegué a pensar que todas mis aventuras en Berry Hill habían sido un sueño, un hermoso sueño. Pensé que no había escapado de Londres y que mi vida seguía siendo esa mierda que había permitido que se convirtiera.

Abrí mis ojos con miedo y reconocí el papel tapiz de flores claras que había. Me giré de a poco en la cama y pude ver a mi madre dormida a mi lado, con una mano sobre mi cuerpo, cubierta con las mantas. Suspiré aliviada al saber que nada había sido un sueño...

Me levanté de la cama con cuidado de no despertarla, tomé mi celular de la mesa de noche, me puse mis pantuflas y salí de mi habitación cerrando la puerta en mi espalda. Vi a Lucas dormido junto a Scott, sólo 1 año mayor que él. Suspiré y bajé las escaleras para ver a Lizzy en el sillón dormida. La cubrí bien con las mantas y fui hasta la cocina para prepararme un café.

Ayer había sido un día genial. Tras reunirme con mi mamá, Liz y su hijo Scott o Scotty como le decían de cariño, nos quedamos a ver al Club Glee de Sam quienes por cierto cantaron de maravillosa y Sam los miraba con orgullo mientras tocaba su guitarra al ritmo de las 5 diferentes canciones que habían preparado.

Después del show y tras despedirme con un rápido beso en la mejilla de Sam, nos fuimos con mi hermana mayor, su hijo, mi madre y Lucas a casa... acá, mientras los dos niños jugaban video juegos en el living, con mi hermana y madre bebíamos café en el comedor, mientras les contaba todo. Mi hermana me reprochó por no haber pedido ayuda, mi madre solo me abrazó y acarició el cabello como lo hacía cuando era pequeña y repetía una y otra vez "Nunca más volveré a dejarte partir". Los invité a quedarse y mi madre con nervios se intentó acercar a Lucas, quien la abrazaba y también repetía "Siempre soñé con una abuela". Había sido perfecto.

- Buenos días...-Dice la voz de mi hermana a mis espaldas. Había decidido preparar tostadas con huevo para todos, pero primero necesitaba cafeína. Me giré y ella sonrió arreglando su cabello con una mano.

- Buenos días, Lizzy -Le sonreí y serví una taza de café para ella- ¿Con dos de azúcar?

- Dejé la cafeína, Q -murmuró sentándose en una de las sillas del comedor- Hace 4 años -Dijo asintiendo con su cabeza, apoyando sus manos en la mesa de mi cocina.