"Every rose has its thorn" (COMPLETA)

Capítulo 24: "Stage"

- Vamos, Evans, debemos trabajar -murmuré separándome de sus labios, mirando sus ojos.

- No creo que pueda levantarme de esta cama y mucho menos dejarte salir de acá -murmuró él, pasando una mano por su cabello despeinado, despejando sus ojos.

- Mm... yo tampoco quiero levantarme -dije sonriendo, abrazándolo por el cuello, mirando sus ojos.

Sam se había quedado a dormir el día anterior (obvio, trajo todas sus cosas antes), para así desayunar e irnos los tres juntos de casa. Hoy era miércoles y me tocaba ensayo durante la mañana para reunirme con el club Glee en la tarde y presentarles mis videos y mi testimonio como ex bicampeona de las nacionales.

Una noche de besos terminó en una noche de sexo desenfrenado cuando Lucas se durmió y otra sesión esta mañana al despertar. Me estaba acostumbrando bastante rápido a esta vida junto a Sam Evans.

- Vamos, amor -murmuré sonriendo, mirando sus ojos azules que miraban mi rostro. Su mano subió a mi frente y acomodó un mechón de mi cabello tras mi oreja.

- ¿Y si nos bañamos juntos? No sé si ya estamos en ese nivel -dice mirándome y yo levanto una ceja.

- ¿Nivel?

- Ya sabes... en la relación -dijo encogiéndose de hombros.

- ¿Hay niveles?

- Claro, de confianza y todo eso -dijo mirando mis ojos.

- Según yo, nosotros ya pasamos todos los niveles de confianza -murmuré- a menos que me equivoqué y tú no te sientas igual...

- Claro que me siento así contigo. En un nivel supremo de confianza -dijo sentándose en la cama, quitándonos las mantas, dejándonos a ambos completamente desnudos, haciéndome sonrojar. Él me miró sonriendo y se bajó de la cama, acercándose para besar tiernamente mis labios, tomándome de las caderas después, levantándome, subiéndome sobre su hombro, haciéndome soltar un grito bajo seguido de una risa- Estamos a un nivel de confianza supremo, Quinn Fabray -Dijo sonriendo y comenzó a caminar conmigo desnuda sobre su hombro. Yo reí y le di una pequeña nalgada, lo que me sorprendió y a él también, pero luego lo escuché reír- Eres una pervertida.

- Tú tienes la culpa, yo era casi virgen -dije sonriendo divertida, haciéndolo reír.

Luego de bañarnos juntos y negarme a un segundo round o de verdad llegaríamos tarde, fui a despertar a Lucas. Él abrió su ventana y comenzó a cambiar su ropa. Volví a mi habitación, donde Sam se estaba vistiendo. Sonreí mirándolo y, afirmando mi toalla del cuerpo, comencé a buscar mi ropa.

Me decidí por un pantalón negro ajustado, tipo jeans, de tiro alto. Una blusa de color celeste que metí dentro del pantalón, me puse una chaqueta tipo blazer encima de color azul marino, un collar delicado negro y tacones negros no muy altos. Dejé mi cabello suelto y me comencé a maquillar.

- ¿Estas son tus rutinas matutinas, Fabray? -Dijo Sam, sentado en la cama ya vestido, con un pantalón de tela azul marino y una camisa de color blanca de mangas cortas. Se dejó, como siempre, los dos primeros botones sin abrochar. Sam se estaba abrochando los zapatos para después levantarse de la cama y acercarse a mi lado frente al espejo para peinarse.

- Claro que sí. Debo bajar ahora a preparar café, desayuno y nos vamos los 3 juntos -dije asintiendo, poniéndome delineador negro.

- ¿Me puedo quedar más seguido? Me agrada la idea de dormir contigo, despertar contigo y desayunar junto al enano -murmuró mirándome.