La hija de Isaza

E (ENCARGOS E INGENIEROS)

-Fue un placer hacer negocios con usted señor Isaza - decía un hombre mientras le estrechaba la mano - confíe que quedó en buenas manos.

-Así lo creo - respondió el del sombrero.

-Pues caballeros, los dejo, tengo que hacer un par de pendientes - dijo el señor despidiéndose tanto de Isaza como de Villamil que estaba ahí mismo.

-Si, si, igual nosotros - dijo el más alto y el hombre abandonó el lugar.

-Villa, sé que puede sonar a abuso, pero ¿podría acompañarme a buscar un par de muebles? - le dijo apenado.

-Si vamos los dos a buscarlos, nunca vamos a terminar, deje que le hablo a Moncho para que le acompañe y me quedo a hacer su estructura que quiere.

-Tapanco - corrigió el mayor.

-Si como se llame - le restó importancia.

-Está seguro?

-Qué me está queriendo decir? Está hablando con un ingeniero. Juan Pablo Villamil para servirle. Pff un tapanco, pan comido. Déjelo en mis manos. Como si no pudiera clavar un par de tablas. - dijo en modo diva.

-Ya, ya, está bien, es usted completamente capaz Villaco - dijo saliendo de la habitación y llamando al número de Simón.

-Capaz. Claro que soy completamente capaz. - repetía indignado Villa mientras Isaza se perdía en el pasillo.