"Isaza va a matarme, Isaza va a matarme... si... sin duda va a matarme" se repetía Martin al esperar que le abriera la puerta.
-Perfecto, solo un poco más a la derecha - se escuchaba a Nath acercándose a abrir - si exacto - tenía la mano extendida mientras abría la puerta, vio la escena y solo llamó a Simón con la mirada - Si bueno, es tarde, debemos irnos - dijo la pelirroja saliendo de ahí seguida de su novio.
-Hey porque tan repentina... si saben que, yo también ya me voy - dijo Villa al ver lo que había hecho Martin.
-No me dejen en esto solo - les decía Martín mientras se iban.
Ninguno le dijo nada, solo salieron de ahí lo más rápido posible.
-Hey Marto, que pa... ¿Qué se hizo en el pelo? - estaba riendo del nuevo corte y de los mechones rosas que ahora tenía Martín.
-¿Verdad que el rosa es su color? - le dijo Isabel orgullosa de que ella le había escogido el color y la sonrisa de Isaza se esfumó cundo volteó a verla.
-¡¿Qué le hiciste a mi bebe?! - le reclamó a Martín al instante.
-Te gusta? - la pequeña a pesar de tener solo un mechón pintado de azul seguía siendo motivo de reclamo hacia el menor de los Vargas.
Isaza se agachó a su altura - te ves hermosa - le dijo sonriéndole al
final - y con usted hablaremos más tarde - señaló a Martín que solo hacía muecas para disimular que moría de miedo por dentro.-Si, bueno... hey mire quien llama... sí, ¿mamá? Me voy, cuídeseme, hasta luego - se excusó y desapareció en cuestión de segundos.
-¿Estas enojado? - preguntó Isabel con culpa en la mirada.
-No puedo enojarme contigo, y menos cuando pareces una princesa. - Isabel se colgó de cuello para abrazarlo, no quería soltarlo, pero cuando abrió sus ojos notó algo, él mismo vacío que Simón en cuanto entró.
-Papi... dónde está tu piano?

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La hija de Isaza
Fiksi PenggemarPapi... Somos un equipo. Cuando Isaza dijo que 11 besos era una canción de cuna no deje de pensar en que pasaría si tuviera una hija, esta historia pasa en un futuro distante y alternativo.