I (INSTINTOS Y SOPRESAS INCREIBLES)

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-Papi ¿qué le pasó a tu piano? - su voz comenzaba a quebrarse.

-¿No quieres ver tu nueva habitación? - intentó cambiar el tema.

-Papi... ¿qué ... le pasó a tu piano? - ahora estaba señalando hacia dónde solía estar.

-Solo ven a verla - le acaricio la mejilla.

-Papi, dime que no lo hiciste - Isabel sentía gran culpa en su pecho. Isaza permaneció en silencio - Papi por favor, dime que no lo hiciste - le tomó de la cara y lo miró fijamente.

-Me juraste que ya no te preocuparías - la mirada del mayor era dulce e hizo entender a su hija que ya estaba hecho.

-Pero tú... tú amabas ese piano - terminó un poco triste.

-Pero te amo mil veces más a ti. - le levantó la cara viendo como sus ojos se cristalizaban.

Ambos se abrazaron con fuerza -Ven, vamos a ver cómo quedó tu cuarto - propuso el mayor después de un par de minutos.

La pequeña asintió y le siguió tomándole por la mano - wooow - su mirada recorrió de arriba a abajo toda la estructura, sintió una gran emoción recorrerle el cuerpo - ¡papi está increíble! - terminó casi con un chillido por la emoción tan incontrolable. Subió por la escalera y miró todo más de cerca - Gracias papi... - de nuevo estaba colgada de su cuello.

-Si te gusto pequeña? - dijo sin soltar el abrazo.

-Es una broma! Esta asombroso! - le dijo ahora tomándole de la chaqueta y mirándole a los ojos - tú eres asombroso - le sonrió y esta vez el que rompió en llanto fue Isaza - papi ¿qué pasa? Papi, ¿estás bien?

La hija de IsazaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora