Capítulo 31: Tyler y Scott.

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Los seis están muy a gusto en la sala de Daniel, con los chistes a estas alturas, sin sentido, de Masón, con la risa casi actuada de su hermano pero ven a Daniel feliz, quizás actúe, quizás no pero esta allí con ellos regresando a ser quien era.

Cuando se dirigían a casa de Daniel, Elle les pidió  a todos  que se olviden de que sabe los sentimientos de Daniel hacia ella, ya que si sacaban el tema todo se volvería a destruir, al menos hasta que sea el mismo Daniel quien lo diga.

Los días de la semana pasaron rápido para los que no esperaban el viernes pero para Scott y su familia, cada día fue una tortura, horas tras horas.

Scott, seguía espiando a Lía, ahora con más cuidado y tuvo que precensiar que Dixon la trajera a casa un día y también tuvo que contener sus ganas de demostrar sus celos pero aún Marcos creí que ellos estában juntos y no sería capaz de echar todo a perder por una escena de celos.
La carta que Tyler, prácticamente lo obligó a escribir, aún está guardada en su cajón, junto a su cama y lo tomó como una especie de diario íntimo, ya que antes de salir a beber o volver a perderse, le escribe a Lía, escribe todo y cada una de las palabras que no le dijo, que no sería capaz de decirlo de frente ya que nunca fue bueno para mostrar sus sentimientos tan abiertamente.
Tiene pensado darle esa carta a Lia una vez que Marcos ya no represente alguna amenaza para ellos pero mientras tanto, sigue despierto, no tan sobrio pero con Lía en el centro de sus pensamientos...

▶▶▶

El sol está a punto de ocultarse  y en el apartamento de las chicas, Lía está tomando una ducha y Elle está terminando de colocarse los zapatos ya que esta noche ellas cenaran con sus amigos, tan ajeno a lo que esperan Scott y Tyler.
Cuando Elle, apenas sale de su habitación, escucha que su móvil suena y al instante que ve el nombre de Tyler en la pantalla, contesta.

— Señor O'mally– habla lentamente.

— Señorita Hale– contesta Tyler,
— ¿quisiera bajar un instante?

— okey– Elle, lo espía por entre las cortinas y lo ve apoyado sobre el Audi, sonriéndo mientras cuelga la llamada.

Cuando sale del edificio, siente la mirada de Tyler por todo su cuerpo hasta que terminan frente a frente.

— Elle...– la pega a su cuerpo, — vine a secuestrarte— murmura con una sonrisa de lado.

— Tyler...

— lo sé, vas con tus amigos— actúa una mueca de tristeza pero termina por besarla, — te ves bellísima— agrega, hasta que gira su cabeza hacia el Oeste, el sol se está ocultando y deja a su paso hermosos tonos en el cielo que se ven aún mejor con esos colores reflejados en las nubes.
Tyler, gira a Elle en dirección a aquella vista y se coloca detrás de ella, apoyando su barbilla en el hombro de Elle.

— no es un amanecer, tampoco un completo atardecer pero es hermoso– habla  Elle pero Tyler no responde, sino que saca del bolsillo de su chaqueta un collar y en la posición que está, puede colocarlo alrededor del cuello de Elle sin problemas y cuando termina de colocarlo, deja un beso en la nuca de la joven.

—te amo— murmura en la misma posición.

La joven, toma el dije entre sus dedos, viendo que es pequeño y delicado corazón dorado.

— Tyler— murmura Elle, girando hacia él, — yo también te amo— habla con una sonrisa plantada en su rostro y aún tiene entre sus dedos el dije.

— dilo de nuevo.

— ¿ah?— ríe Elle.

— dilo de nuevo, me hace feliz escucharlo de tí.

Mi Dulce Perdición ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora