Sin compromiso (Libro I) Terminado

Pequeños rasguños

Se separa de mi y se sienta sobre la cama mirándome con ojos llenos de pasión.

Comienzo a levantar mi blusa para después pasarla por mi cabeza y quedar solo en sostén.
Bajo poco a poco mis jeans hasta quitarlos completamente. Hago lo mismo con mis bragas, el sostén lo desabrochó y me lo quito.

Veo como pasa saliva y se relame los labios.

No sé que me pasa, siempre que pensaba en como sería el momento de acostarme con alguien me daba pena pensar el quedar desnuda frente a alguien, que viera cada parte de mi cuerpo, pero con Enric me gusta que me vea, me gusta el efecto que causo en el, ya no me apena.
Camino hacia el, subo una rodilla a la cama y luego la otra para quedar ahorcajadas sobre el, me toma de la espalda y nuca y me besa con fervor, cómo nos gusta, mordiendo y rosando nuestras lenguas.

Comienzo a mover mis caderas y siento que su bulto va creciendo mas.

Dejo de besarlo y empiezo a desabotonar su camisa, me bajo de el, se levanta y empieza a desabrochar sus pantalones, ya desabotonada su camisa la quito completamente y la arrojó al piso.

Paso mis manos por los músculos de sus brazos duros y fuertes, después paso las palmas de mis manos por su pecho y voy descendiendo por su abdomen marcado.

Me tumba sobre la cama, se acerca a la mesita de noche y de un cajón saca un preservativo se lo pone y camina hacia a mi.

Me va besando por el abdomen y va subiendo hasta llegar a mis pechos, saca su lengua y rodea mi pezón con ella después succiona y rosa sus dientes con mi pezón un poco al último, hace lo mismo con el otro pecho y después sube por mi cuello hasta llegar a mis labios, me besa y siento como se va hundiendo en mi, muerdo su labio inferior por la sensación, rodeo su cadera con mis piernas, se mueve lento unas veces pero comienza aumentar la velocidad.

—Dios….—jadeo.

Entierro mis uñas en su espalda, toma mis brazos y los pone a los lados de mi cabeza, sus manos van recorriendo mis brazos hasta llegar a la palma de mis manos y entrelazamos nuestras manos.

Gruñe, jadea y aumenta la velocidad.

—Joder Alice… me encanta como te sientes.

Jadeo por sentirlo, esto me gusta demasiado, el sentirlo adentro de mi, sus besos son tal como a mí me gustan, me gusta como me hace sentir, me gusta como me toma, pero no quiero sentir esto, no quiero arrepentirme después.

Aumenta la velocidad y siento la adrenalina del orgasmo.

—No pares….

—No tenia intención de hacerlo…joder..

Siento como libero toda esa tensión retenida en mi vientre, definitivamente me gusta demasiado está sensación.

Aún sin salir de mi Enric besa mis pechos y los masajea, yo pongo la mano en su cabeza y tiro de su cabello un poco.

Sale de mi y se quita el condón. Me cubro con las sabanas y el hace lo mismo. Nos sentamos y recargamos en la cabecera de la cama.

—¿Qué te pasó en la muñeca?—pregunta.

Volteo a mirar mis muñeca derecha, ahí están los rasguños de la tal Alejandra.

—Son unos pequeños rasguños.

—Se que son rasguños, pero yo pregunté ¿que te pasó?—esta serio.

—Tuve una pelea

Alza las cejas.

—¿Por qué?

Ruedo los ojos.

—Anoche salí con mis amigas de antro, estábamos bailando y una chica comenzó a chocar conmigo a cada nada y me colmo la paciencia.

—¿Así de la nada comenzó a chocar contigo?

—En realidad era la novia de mi ex.

Se pone serio.

—No sabia que eras de las chicas que pelea por hombres.

—No soy de esas chicas, pero ella comenzó y yo soy de poca paciencia.

—La hubieras ignorado.

—Claro y dejar que me estuviera aventando.

—¿Sabes? Una mujer se ve mal peleando por un hombre y peor cuando ese hombre ya no la quiere y está con otra. Solo se rebaja así misma.

Mierda dolió.

Asiento viéndolo a los ojos, el está serio.

Me levanto de la cama y busco mis bragas.

—¿Qué haces?—sonríe.

—Me voy

—Tu no vas a ningún lado hasta que no me quites las ganas.

Se levanta de la cama y me toma de un brazo.

—No soy tu puta.

—Tu aceptaste mi propuesta así que te aguantas.

>>Ahora voy a follarte duro por haberte portado mal.

Me toma de la cintura con fuerza y me besa.

No quiero responder a sus besos lo empujó pasa apartarlo pero me toma a la fuerza.

Me doy por vencida.

Que fáciles somos.

Me lleva a la cama y me acuesta.

Se va hacia el ropero que tiene la habitación y saca dos corbatas.

—¿Qué harás?—pregunto confundida.

—Voy a castigarte por haberte metió en una pelea.

Uuff se vienen unos capítulos buenos eh🤯